ORLANDO, Florida. -- La imagen del cañonero Pete Alonso apuntando sus bombazos hacia el Monstruo Verde del Fenway Park era una posibilidad tentadora, una que se debatió durante semanas. Pero el miércoles, en el día final de las Reuniones Invernales, los Medias Rojas se enteraron de que el bateador derecho se dirige a los Orioles con un contrato de cinco años y US$155 millones, según informaron fuentes a MLB.com.
Aunque la agencia libre siempre es impredecible, Boston parecía un destino perfecto para Alonso. El jefe de operaciones de béisbol, Craig Breslow, habló durante todo el invierno sobre la necesidad de adquirir un cañonero que pudiera anclarse en la parte media del orden al bate de Boston.
Alonso y Kyle Schwarber eran los dos mejores jonroneros disponibles en el mercado. Schwarber acordó un pacto de cinco años con los Filis el martes. Ese movimiento no dolió tanto en la Nación Medias Rojas porque Schwarber es un bateador zurdo, y existía una sensación de inevitabilidad de que terminaría regresando a Filadelfia, donde es muy querido.
Ahora, todas las miradas giran hacia Breslow y cómo maniobrará para inyectar más producción a su alineación. El primer efecto dominó es que esto parece aumentar las posibilidades de que Boston retenga al veterano líder Alex Bregman, quien ejerció la cláusula de salida de su contrato de tres años y US$120 millones firmado en febrero.
Aunque Bregman no encaja estrictamente en el perfil de "slugger" puro desde que sacudió 41 vuelacercas para los Astros en el 2019, sigue siendo una pieza de mucho valor debido a su bateo, defensa y una incansable ética de trabajo que contagia a sus compañeros en la cueva.
Incluso antes de que Alonso se escapara, surgieron reportes de que el objetivo principal de Boston esta temporada baja es asegurar un nuevo pacto con Bregman. Breslow discutió la situación con MLB Network en una entrevista la mañana del miércoles.
“Estamos teniendo muchas conversaciones, y tienen razón: no sólo tenemos que trazar el plan A, sino también el B, C, D y más allá”, explicó Breslow. “Pero tuvimos la oportunidad de ver de cerca lo que Alex aportó al terreno, lo que trajo al clubhouse. Emergió como un líder, especialmente entre esos jugadores jóvenes. Su impacto en nuestro equipo fue enorme. Así que obviamente seguimos comprometidos en las conversaciones”.
En febrero, los patirrojos estaban dispuestos a ofrecer un alto valor anual promedio (AAV) a Bregman (aunque una gran parte de su salario de US$40 millones por año fue diferido), pero fueron conservadores con la cantidad de años.
Para traerlo de vuelta, Boston calcula que, como mínimo, deberá ofrecer un contrato de cinco años que podría rondar un monto similar a los acuerdos que Alonso y Schwarber firmaron en los últimos días.
Los Medias Rojas ya han mejorado su pitcheo esta temporada baja mediante el cambio por Sonny Gray y el cubano Johan Oviedo.
Si Bregman regresa, sería nuevamente una presencia veterana y un bate derecho para complementar el fuerte núcleo de bateadores zurdos del equipo, que incluye a Roman Anthony, el venezolano Wilyer Abreu y Jarren Durán. El madero derecho de Trevor Story también está de vuelta en el grupo tras una campaña de resurgimiento.
Sin embargo, es probable que los Medias Rojas necesiten conseguir otro bateador para acompañar a Bregman, uno que pueda sacar la bola del parque con frecuencia.
Bo Bichette es un agente libre que podría estar vinculado a los Medias Rojas, más ahora que Alonso está fuera del panorama. Aunque el tope personal de cuadrangulares del torpedero es de 29 en la campaña del 2021, las dimensiones amigables del jardín izquierdo de Fenway podrían permitirle superar los 30 por primera vez en su carrera.
Con Story afianzado como el campocorto de Boston, Bichette probablemente haría un cambio de posición si llegara a los Medias Rojas, moviéndose a la segunda base o a la antesala.
Bichette todavía está en su mejor momento a los 27 años, y su llegada a los Medias Rojas sería una historia emotiva. Sus padres se conocieron en un gimnasio detrás del Monstruo Verde. Dante Bichette, el padre de Bo, jugó dos temporadas en Boston al final de su carrera.
Otros bateadores de poder disponibles en la agencia libre incluyen al dominicano Jorge Polanco y al venezolano Eugenio Suárez.
También existe la posibilidad de un canje. Breslow reconoció el martes que hay algunos bates disponibles vía cambio. La sólida profundidad de los Medias Rojas tanto en el pitcheo abridor como en los jardines podría ayudar a concretar un trato, sin mencionar un sistema de granjas en ascenso.
“Seguro. Hay algunos [bates en el mercado de cambios]”, comentó Breslow. “Pero de nuevo, es bien difícil arrebatarle a otros equipos a sus mejores jugadores. Y al hacerlo, tienes que entregar talento. Estos tipos de traspasos deben ser incómodos para ambas partes. Y por eso estamos involucrados en esas conversaciones. Es imposible saber hoy qué se ejecutará, qué llegará a la meta y qué no. Pero acudir a los cambios y a la agencia libre son buenas formas de mejorar nuestro roster”.