Cómo Juan Soto puede ser hasta mejor

30 de marzo de 2022

Juan Soto tuvo otra campaña de revelación en el 2021. Tras unos 47 juegos “sobrenaturales” en la temporada abreviada del 2020, el dominicano demostró que dicha actuación no fue cosa de suerte. El año pasado, fijó una marca personal con 7.1 Victorias por Encima del Reemplazo (WAR), según Baseball Reference; encabezó las Grandes Ligas con 145 bases por bolas negociadas; y por segundo año consecutivo lideró a todos los bateadores calificados en porcentaje de embasarse. 

Soto es el mejor bateador de las Mayores, con un ojo increíble que le permitió hacerle swing a solamente el 12.2% de las bolas malas en el 2021. Ningún otro bateador que vio por lo menos 750 pitcheos fuera de la zona tuvo un índice por debajo del 15% en ese sentido. El oriundo de Santo Domingo le hizo swing al 35% de los pitcheos que vio, que también fue el mejor índice en Grandes Ligas (mínimo 1,750 pitcheos vistos).

¿Y cuando hizo swing? Los hizo valer, ya que el 23.9% de sus swings produjeron contacto duro, lo que representó el índice más alto en MLB (mínimo de 250 pelotas bateadas). Su índice de batazos duros del 52.7% también fue una marca personal.

Soto ha mejorado en alguna faceta u otra en cada temporada de su corta carrera, por lo que nos provoca preguntar: ¿Qué sigue? A continuación, les damos un vistazo a tres maneras en las que Soto podría mejorar aun más en el 2022.

Seguir elevando la bola

Soto tuvo una de las mejores expresiones de cara a su participación en el Festival de Jonrones el año pasado. “Creo que quizás afecte el swing de los muchachos que están en ritmo, pero creo que va a arreglar el mío, porque estoy dando demasiados batazos por el suelo”, dijo el quisqueyano. “Ojalá arregle mi swing a la hora de tratar de levantar la bola. Eso es lo que he tratado de hacer todo el año”.

Tiene toda la lógica del mundo que el mejor bateador del béisbol supo, a mediados de temporada, lo que necesitaba hacer para mejorar. Y eso fue justo lo que hizo. Luego de que el 40.1% de sus bolas bateadas resultaran en líneas y elevados en la primera mitad de la temporada, ese índice mejoró al 46.9% en la segunda mitad. En total, el 43.2% del contacto de Soto fue de aire, lo cual representó el segundo índice más bajo de su carrera, solamente detrás de su campaña de novato en el 2018 (40.2%). 

¿Por qué la fijación con elevar la bola? Porque está comprobado que produce mejores resultados. En el 2021, los bateadores de Grandes Ligas tuvieron promedio de .453 y slugging de .891 en turnos al bate que terminaron en elevados o líneas. Para Soto, esa ventaja fue aun más pronunciada: Promedio de bateo de .563 y slugging de 1.190. Ahora, imagínense si hiciera contacto que diera esos resultados con un índice más alto. 

La idea aquí no es cambiar el estilo de swings de una superestrella ni nada por el estilo – simplemente es cuestión de optimizar esos swings que ya está dando y el contacto que está haciendo, y elevar más la bola.

Ver más pitcheos en la zona -- y aprovecharlos

Sí, esto implica algo fuera del control de Soto, porque por más prodigioso que sea con el madero, no puede obligar a los lanzadores contrarios a tirarle strikes. Pero de alguna forma, uno de sus compañeros de equipo sí puede hacerlo. Aquí es donde entra en juego su compatriota, Nelson Cruz, la gran firma invernal de los Nacionales que le da otra dosis de poder a la novena de Washington. Ni hablar del hecho de que Cruz fue firmado como agente libre amateur ocho meses antes de que naciera Soto. Definitivamente, este dúo va a ser dinámico.

El 47.8% de los pitcheos que vio Soto la campaña pasada estuvieron dentro de la zona de strikes, lo cual representó el segundo índice más alto de su carrera de cuatro años, después del 2018 (48.3%), aunque aún estuvo por debajo del promedio de MLB. Nadie espera que los lanzadores se atrevan a tirarle más a Soto dentro de la zona … pero, ¿qué tal si tuvieran que hacerlo para evitar una situación más difícil contra Cruz y su slugging de por vida de .527? Esto crea una situación ideal para todo aquel que disfrute ver a Soto apabullar la pelota.

Tener a Cruz en la alineación debe de resultar en más pitcheos que Soto pueda batear, y como ya se ha detallado, es un experto en aprovechar el lanzamiento que justo necesita. A lo largo de Grandes Ligsa, los bateadores tuvieron promedio de .280 y slugging de .488 ante los pitcheos dentro de la zona en el 2021. Pero, como algunos ya saben, Soto se ha degustado mucho más. Bateó .344 con slugging de .600 cuando les pega a lanzamientos dentro de la zona de strike, lo que deja a algunos preguntándose cómo los serpentineros se atrevieron a realizarle el 47.8% de los pitcheos ahí.

Desde el punto de vista de las estadísticas, la protección en el lineup no existe como un concepto simple. Pero en cuanto a las anécdotas se refieren, no cabe duda de que una alineación más temible resulta en situaciones en las que los lanzadores deberán ser más cuidadosos.

Más allá del plato

Cuando los Nacionales adquirieron a Kyle Schwarber antes de la campaña pasada, Soto pasó a ser el jardinero derecho titular, una posición que había patrullado en los últimos seis partidos de la temporada del 2020. Para Soto, fue una transición conocida, debido a que el bosque derecho fue su principal posición durante su breve tiempo en Ligas Menores -- antes de que fuera ascendido a una escuadra de Washington que tenía a Bryce Harper en la pradera derecha.

Con ese traslado en el 2021, Soto también mejoró a la defensa. Después de registrar -2 Outs Sobre el Promedio como jardinero izquierdo en el 2020, tuvo +5 en la pradera derecha el año pasado. La otra vez que tuvo un año positivo en los bosques en dicha métrica fue en el 2019 (+6), después de terminar con -6 en el 2018. Soto estuvo en el 90no percentil en Outs Sobre el Promedio y en el 47mo percentil en Salto de Jardinero en el 2021 -- y nadie criticaría al mejor bateador en todo el béisbol por tener dicha cifra el resto de su carrera. Pero debido al impulso que tuvo a la defensa al volver a su posición natural el año pasado, es justo imaginarse el potencial que alcanzará Soto en los jardines.

Lo que dicen las proyecciones

¿Qué pasará si Soto sigue mejorando? Su 2021 le ameritó su mayor resultado en las votaciones para Jugador Más Valioso, terminando de segundo por debajo de su excompañero Bryce Harper. Sigue por el camino al Salón de la Fama que hemos visto desde su debut. ZiPS lo proyecta más hacia una producción similar a la de Barry Bonds como un experto en la disciplina en el plato. Se proyecta para negociar 144 pasaportes, 41 más que el siguiente en la lista (Harper). Soto ya es sexto desde al menos 1901 en boletos antes de cumplir los 24 años de edad. Otras 144 bases por bolas le darían un total de 517 en su carrera, muy por encima del actual líder en dicha lista a los 23 años: Ted Williams, con 468.

Era inevitable que Williams surgiera aquí, otra vez como la comparación histórica, algo que parece pasar con frecuencia. Soto se proyecta otra vez para tener el mayor porcentaje de embasarse con .461 -- muy por encima de Mike Trout con .418. Ésta sería la tercera temporada consecutiva que Soto encabezaría las Mayores en dicha categoría. El último jugador en lograrlo al menos tres campañas seguidas fue nada menos que Bonds con cuatro en fila, del 2001 al 2004.

ZiPS también tiene a Soto como líder en promedio con .314, y en WAR con 7.7. Se proyecta para fijar una marca personal con 35 jonrones y con 120 remolcadas.

Todo esto para decir lo siguiente: Juan José Soto todavía es Juan José Soto, mejorando, y todos tenemos la fortuna de ser testigos de su carrera -- en cualquier rumbo que tome esta temporada.