Convenio colectivo será el enfoque en reuniones de dueños de G.L.

17 de noviembre de 2016

CHICAGO -- Tom Ricketts se dirigía al hotel donde el miércoles se realizaba el cónclave de los dueños de equipos de las Grandes Ligas cuando varios individuos le pararon en la calle para felicitarles por el campeonato de la Serie Mundial que sus Cachorros de Chicago acaban de ganar.
Así es la vida de Ricketts estos días. Han transcurrido dos semanas desde que la franquicia atrapó su primer título desde 1908, y la fiesta sigue.
"Esto es fabuloso. Este equipo es como otro miembro de la familia para mucha gente", señaló Ricketts. "Y el hecho que pudimos tener esta clase de éxito por todos estos años no poder alcanzaron es algo mágico para toda esta ciudad".
Ricketts recibirá el reconocimiento de los demás dueños de equipos durante las reuniones de dos días, pero por lo demás la agenda es la de siempre.
El punto central es el contrato colectivo, que caduca el 1 de diciembre. Las negociaciones entre la parte patronal y los jugadores han estado en marcha desde los entrenamientos de primavera.
La última vez que se produjo una paralización laboral fue en 1994-95, y el comisionado Rob Manfred se mostró confiado de que alcanzarán un acuerdo antes de diciembre.
"Confío en el comisionado, el despacho del comisionado", declaró el dueño de los Yanquis de Nueva York Hal Steinbrenner. "Harán un trabajo magnífico, y todos están trabajando con mucho esfuerzo. Es todo lo puedo decir".
Entre los puntos principales de la negociación sobresale el deseo de los dueños de que establezca un draft internacional amateur, el impuesto de lujo por gasto de nómina y si se modificará el formato de compensación con selecciones de draft al fichar a los agentes libres de mayor renombre.
La incertidumbre que rodea al nuevo contrato podría afectar la agencia libre y las tratativas de canjes, pero Steinbrenner dio a entender que los Yanquis tienen bien definidos sus planes sin importar lo que ocurra en las negociaciones.
"No creo que impactará en cuanto a nuestra dirección", señaló Steinbrenner. "Hemos reducido gasto de la nómina por primera vez en unos cuantos años, y vamos a reinvertir una porción decente en el club, como siempre hemos hecho. Resta por ver el monto, eso dependerá de nuestras necesidades y lo que está disponible".
Los Yanquis se desprendieron del toletero Carlos Beltrán y los relevistas y en la fecha límite de canjes, algo inusual, y terminaron la temporada con marca de 84-78, cuarto en la división Este de la Liga Americana.
Steinbrenner reiteró la intención del equipo por mantenerse por evitar pagar el impuesto de lujo, pero indicó que reforzar el bullpen es una prioridad.
Eso podría resultar en volver a adquirir al cubano Chapman, quien se acreditó 20 salvados con los Yanquis antes de ser traspasado a los Cachorros.
"Lo pongo de esta manera: cada vez que puedes contar con alguien que demostró que puede brillar en Nueva York... es un sitio complicado para jugar y si puedes adquirir a alguien que confirmó que puede rendir ahí, entonces eso es una ventaja", afirmó Steinbrenner.