FORT MYERS, Florida – Dando vueltas vestido con una franela roja y shorts azules – y luciendo una nueva barba – el manager de los Medias Rojas, Alex Cora, estuvo recientemente observando las sesiones de práctica en el campamento de ligas menores del club.
Bajo condiciones normales, el puertorriqueño estaría sumergido en su trabajo dirigiendo los entrenamientos del equipo grande, analizando y resolviendo distintas situaciones.
Pero durante el cierre patronal, Cora está tratando de utilizar su tiempo lo mejor posible.
El mes pasado, por ejemplo, participó en varias reuniones con su cuerpo de coaches.
En los últimos días, ha estado viendo a los prospectos del club y disfrutando del tiempo con su familia. Cora incluso tuvo tiempo para ir a Dallas hace poco y ver un concierto al que tenía tiempo queriendo presenciar.
Para Cora, el campamento de ligas menores es una experiencia interesante, pues realmente no ha podido estar cerca del trabajo del departamento de desarrollo de jugadores desde que él mismo era un prospecto.
“Lo que hago es dar vueltas por ahí”, dijo Cora. “Ver a los muchachos fildeando rollings aquí y allá”.
Cora apuntó que él es normalmente el que está dentro del terreno trabajando. Ahora, le toca estar detrás de la cerca o en la pista de seguridad durante las prácticas.
“Poder ver cómo trabajan, la forma en la que hacemos las cosas, es algo bien agradable, realmente bueno”, siguió Cora. “Yo sabía que era parte de una buena organización, pero el solo hecho de pasar tiempo con ellos en otro papel, saben, simplemente viendo, es algo increíble”.
Durante las caminatas diarias por el complejo Fenway South, Cora no ha podido evitar notar el talento que los Medias Rojas han reunido desde que el jefe del departamento de operaciones de béisbol, Chaim Bloom, tomó el mando hace dos años y medio.
“Estamos en una buena situación”, aseguró Cora. “Obviamente, Chaim siempre dice que no estamos todavía donde queremos, pero él va a seguir diciendo eso el resto de su carrera. No para de trabajar para eso. Lo pueden ver. Tenemos grandes atletas, buenos atletas, buenos brazos, más velocidad. Una cosa es leer al respecto y otra es venir a verlo y darte cuenta de que estás en una mejor situación. Lo estamos”.
¿Quién ha impresionado más a Cora?
“Nick (Yorke) me llamó la atención. Puedes ver que es diferente. Ha cambiado (con respecto al año pasado). Obviamente Marcelo (Mayer), lo vimos en Boston (en verano pasado), un muchacho alto y flaco, y de golpe ya no”.
“(Alex) Binelas, lo fuerte que es. Tiene un tremendo swing. Tenemos un buen programa ahora mismo en cuanto a ejercicios y defensa y todo eso. Poder verlos trabajar es bien refrescante. Y algunos brazos también. (Chris) Murphy es uno de los que he estado viendo. Tiene una buena recta. (Durbin) Feltman, físicamente se ve muy bien. Tenemos un montón de muchachos así”.
Cora también podría hacer un viaje a la academia del equipo en la República Dominicana próximamente.
“No he estado ahí, así que quizás me pase unos días allá, para ver todo y ser parte de lo que hacen”, contó el mandamás.
Uno de los momentos más importantes esta temporada muerta para Cora fue la noche en enero cuando el dominicano David Ortiz, su ex compañero de equipo en los Medias Rojas, fue elegido al Salón de la Fama en su primera oportunidad.
“Increíble”, dijo Cora.
Cora se emocionó tanto por la posibilidad de que Ortiz fuese exaltado que lo llamó en diciembre.
“Es divertido, porque no sé cómo funciona el asunto, pero un día estaba viendo televisión y me dijo, ‘Va a entrar al Salón de la Fama en su primer año, de verdad puede ocurrir’”, recordó Cora. “Lo llamé y le dije: ‘Sabes que puede que entres al Salón de la Fama’. Me dijo: ‘¿Tú crees?’ Y le respondí: ‘Así parece’. Bien por él”.