El cotizado prospecto venezolano de los Dodgers, Diego Cartaya, ha empezado a lucir diferente durante los últimos siete días, en Doble-A Tulsa.

Luego de comenzar el año con promedios de .190/.288/.337 en 26 juegos, el cañonero llegó a su juego del miércoles con un OPS de .893 en los últimos seis compromisos. Había anotado ocho carreras en ese período, dos de ellas por la vía del jonrón.

“Sólo estoy tratando de mantenerme simple en el plato, sólo poner la bola en juego”, indicó Cartaya. “Siento que cuando hago eso, pasan cosas buenas”.

De cara al choque del miércoles, Cartaya había dado jonrón en juegos consecutivos, y no perdió tiempo para extender esa seguidilla.

Luego de tres pitcheos de su primer turno, detonó un bambinazo solitario por el prado izquierdo. El mejor prospecto receptor del béisbol registró una velocidad de salida de 101 mph con el batazo.

Cartaya conectó otro extrabase en su siguiente turno, con un doblete por el jardín izquierdo.

El venezolano, prospecto número 12 de Grandes Ligas, empezó el año tambaleante por Doble-A. Pero el haber anotado al menos una rayita en siete juegos en fila, además de su racha de tres encuentros con cuadrangular, demuestran que el cañonero de 21 años ha empezado a encontrar su ritmo.