MIAMI -- La primera vez que el derecho Edward Cabrera soñó con estar en las Grandes Ligas fue hace una década, cuando empezó a jugar en su ciudad natal de Santiago, en la República Dominicana. Ese sueño se hizo realidad el miércoles con su presentación por los Marlins ante los Nacionales.

El quisqueyano tuvo una apertura de calidad en su muy anticipado debut, mientras que el receptor colombiano Jorge Alfaro pegó el imparable que decidió la victoria de los Peces en la 10ma entrada.

“Me desperté con bastante confianza”, reconoció Cabrera después del encuentro. “Simplemente estaba pensando que ya estaba aquí, era hora de ver cuál era el siguiente paso y con la voluntad de Dios las cosas saldrían bien. Y así pasó. Pero la verdad, pensé mucho en ese sueño”.

Cabrera estuvo bajo control en seis entradas de 57 pitcheos (38 strikes) después de fijar el ritmo con una recta de cuatro costuras a 97.7 millas por hora para iniciar su carrera en las Mayores. Luego, coronó un perfecto primer episodio con ocho lanzamientos -- cada uno para strike. No concedió imparable alguno sino hasta la tercera entrada y recetó su primer ponche con una curva de 83.4 mph contra Riley Adams. En un día lleno de tantos recuerdos, Cabrera dijo que siempre tendrá en su mente ese momento.

Pese a su gran inicio, Cabrera perdió un poco su comando y otorgó tres pasaportes entre los últimos ocho bateadores que enfrentó. Permitió jonrones consecutivos de Josh Bell y el cubano Yadiel Hernández -- con par de cambios elevados en la zona de strike -- que rápidamente borraron una ventaja de 2-0 de Miami. Alfaro le informó al dirigente Don Mattingly, quien sustituyó al diestro tras otro boleto a Carter Kieboom, que los pitcheos no tenían movimiento -- que es una muestra de fatiga.

Los Marlins esperan que Cabrera y su compatriota Sixto Sánchez -- que tienen un mismo tatuaje y se consideran como hermanos -- encabecen la rotación del equipo y los guíen a la contienda en un futuro cercano.

Sánchez llegó al 2021 como el principal prospecto de la organización y era considerado un fuerte candidato para el premio a Novato del Año en la Liga Nacional. Pero no llegó a lanzar en esta campaña, luego de someterse a una operación en el hombro en el mes de julio.

Por su parte, Cabrera llegó a los Entrenamientos de Primavera con un nervio inflamado en el bíceps derecho y estuvo fuera de acción hasta junio. Si no hubiera sido por una ligera molestia en el hombro, probablemente hubiera subido al equipo grande en el 2020 como Sánchez.