Hay cosas que definitivamente aumentan las probabilidades de que un bateador tenga éxito– por algo se ha definido el término “tasa de batazos duros – pero incluso jugadores como Aaron Judge y Shohei Ohtani eventualmente tienen que lidiar con la cruda realidad de ser un beisbolista profesional: Puedes darle a la bola tan duro como quieras, pero tienes poco control sobre los resultados que conseguirás. Cuando desglosas el bateo hasta su nivel molecular, lo único sobre lo que realmente tiene control cualquier persona es cuándo va a hacer swing.

A estas alturas de la temporada, con poco más de un mes de acción, las mejoras estadísticas son especialmente frágiles, pero si pueden vincularse a un cambio en el enfoque, comienzan a sentirse mucho más concretas. Con eso en mente, aquí hay nueve jugadores cuyos ajustes los han ayudado a conseguir mejores resultados en este inicio de campaña.

Las estadísticas son hasta el sábado 4 de mayo.

Adley Rutschman, Orioles

Tasa de swings: +7.4 puntos porcentuales

Rutschman, consciente o no, ha anticipado un posible problema con su enfoque habitual. Existe un punto en el que la paciencia puede convertirse en un obstáculo para un toletero: Rutschman tuvo un gran año en el 2023, pero también recibió el quinto mayor número de strikes cantados en todo el béisbol. El aumento en su tasa de swings a envíos fuera de la zona de strike este año podría generar algunas preocupaciones sobre si se está alejando de lo que le funciona, pero el hecho de que todavía esté viendo la pelota lo suficientemente bien como para batear .321 es más que suficiente para indicar que no está perdido. Mientras tanto, su porcentaje de embasado ha sufrido un poco, pero considerando que recibió 92 bases por bolas en el 2023, tiene mucho margen antes de que eso se convierta en una preocupación.

Ryan Mountcastle, Orioles

Tasa de swing al primer pitcheo: -10.7 puntos

Para estar claros, Mountcastle ha tenido mucho éxito cuando batea el primer pitcheo; tiene un promedio de .376 con un OPS de 1.074 en cuenta de 0-0. Dicho esto, los lanzadores aprovecharán a un jugador que saben que va a hacer swing rápido, y el año pasado, en sus visitas al plato que se extendieron más allá del primer lanzamiento, estuvo abajo en la cuenta 0-1 en el 61.1% de ellas. En todo MLB, el 56.9% de esas apariciones al plato llegaron a una cuenta de 0-1. No suena como mucho, pero considerando que la diferencia entre estar en 0-1 y estar en 1-0 para un bateador es de alrededor de 40 puntos en promedio de bateo, no es algo que te ayude. Este año, la proporción de sus apariciones al plato en las que ha estado inmediatamente en desventaja en la cuenta ha bajado al 57.6%. Hasta ahora, tiene el mejor AVG (.293), OBP (.344) y SLG (.491) de su carrera.

Anthony Volpe, Yankees

Tasas de swings en blanco: -7.9 puntos

Volpe, a menudo en su detrimento, hizo muchos swings grandes en su año de novato. Por lo tanto, durante el invierno, trabajó en acortar la trayectoria de su swing, y aunque continúa trabajando en algunos detalles (recuerda que todavía estamos hablando de un joven de 23 años), la mejora ha sido evidente incluso a simple vista. Está viendo más lanzamientos, con un promedio de 4.2 por visita al home, frente a 3.9 en el 2023, y agregó poco más de 40 puntos a su promedio de bateo, que amaneció en .252 el sábado.

Salvador Pérez, Reales

Tasa de swings en blanco: -11.7 puntos

El venezolano Pérez sigue siendo el mismo jugador propenso a hacer mucho swing que siempre ha sido. Pero ten en cuenta qué tan a menudo decide activar su bate: su tasa de swings general del 58.6% está entre las más altas de las Mayores y su tasa de swings fuera de la zona de strike se ubica en el segundo percentil de bateadores que califican. Luego considera lo siguiente: ha hecho contacto en el 90.7% de sus swings dentro de la zona y en el 69.4% de sus swings fuera de la misma. Solo para tener una idea de la escala, la tasa de contacto promedio de swings fuera de la zona de strike en MLB es del 43.7%. ¿Qué haces cuando te enfrentas a un bateador así? Evidentemente, nadie lo sabe con certeza, pues Pérez tiene un promedio de bateo de .339 y un OPS de .985.

Riley Greene, Tigres

Tasa de swings a pitcheos fuera de la zona: -6.8 puntos

Greene ha pasado de ser un buen bateador a uno invalorable en cuestión de una campaña, y parte de su crecimiento ha sido una mejor vista. No hace falta decir que es más fácil batear una pelota en la zona de strike; en el 2024, los bateadores realmente tienen una tasa de macetazos del 8.7% contra lanzamientos en strike, en comparación con apenas el 2.6% ante envíos en bola. Greene, después de reducir su tasa de swings fuera de la zona de strike de un 26.5% en el 2023, tiene una tasa de macetazos que se encuentra en el percentil 97 (18.3%) hasta la acción del sábado, una mejora de siete puntos desde el año pasado, de ahí los 100 puntos adicionales en su slugging (.547).

Starling Marte, Mets

Tasa de swings a pitcheos fuera de la zona: -6.0 puntos

El dominicano es posiblemente el último hombre que esperarías ver en una lista como esta, pero hay una razón por la que está aquí. Marte, en una decepcionante temporada 2023 que fue interrumpida por migrañas y una grave lesión en la ingle, registró una tasa de swings a pitcheos en bola del 37.4%. Eso se ubicó en el octavo percentil entre los jugadores calificados y fue su marca más alta desde el 2016. Su tasa de swings a pitcheos malos (31.4%) hasta los juegos del sábado sigue siendo bastante alta, pero aquí está el meollo del asunto: cuando bateó .301 con un OPS+ de 132 de 2021 a 2022, esa misma tasa fue del 31.5%. Independientemente de cómo se compare con el resto de la liga, un retorno a la normalidad, en términos de mejores decisiones a la hora de hacer swing, debería ser tranquilizador para los Mets, quienes estarían encantados de tenerlo sano durante más de un par de meses.

Alec Bohm, Filis

Tasa de swings a pitcheos fuera de la zona: -8.0 puntos

Observar a Bohm durante las últimas campañas ha sido presenciar el desarrollo en tiempo real de una estrella legítima a nivel de Grandes Ligas. Hace mucho tiempo demostró que puede batear. Ahora está perfeccionando su juego, y sigue mejorando. Bohm se ubicó en el percentil 93 con un promedio esperado de bateo de .290 el año pasado; reducir tanto su tasa de swings fuera de la zona de strike como su tasa de swings en blanco (-5.2 puntos desde 2023) ha elevado su promedio esperado de bateo a .321 (percentil 97).

Brice Turang, Cerveceros

Tasa de swings en blanco: -8.6 puntos

Turang tuvo una temporada de novato difícil (.218/.285/.300), pero sus fortalezas como toletero aún eran bastante evidentes: incluso a pesar de lo mal que le fue haciendo contacto, le pudo sacar provecho. En lugar de optar por un cambio drástico, Turang se enfocó en lo que históricamente ha hecho bien y ahora tiene una de las tasas de swing en blanco más bajas del juego (12.9%, percentil 96). Evidentemente, todo ese contacto está funcionando a su favor, dado que actualmente está bateando .305.

Ketel Marte, D-backs

Tasa de swings: : +7.6 puntos

El manager de Marte, Torey Lovullo, señaló que el dominicano parecía “hambriento” esta primavera. No estamos seguros si esto es a lo que se refería, pero tiene sentido. Marte realmente no encaja en ningún arquetipo como toletero: tiene algo de poder, estuvo muy cerca de ganar un título de bateo, tiene buena vista pero no siempre toma boletos, y podríamos seguir enumerando sus características. Por lo tanto, este es más un asunto de observar sus resultados, y su tasa de batazos duros del 50.9% y su velocidad de salida promedio de 93.1 mph serían ambos topes personales por un margen significativo. Su distribución de swings ha sido bastante pareja entre lanzamientos dentro y fuera de la zona de strike, pero incluso si este ajuste fue tan simple como “haz swing con fuerza por si acaso le pegas a la bola”, realmente no puedes discutir con los resultados.