Con la temporada de Ligas Menores ya en el retrovisor y un nuevo año en el horizonte, echamos un vistazo a los prospectos latinoamericanos que dieron un gran paso en el 2025.
Rays: José Urbina, LD (Nro. 17)
Firmado por US$210,000 en enero de 2023, Urbina comenzó este año como el prospecto Nro. 29 de Tampa Bay, principalmente por su potencial aún sin desarrollar. En su temporada con 19 años, el venezolano convirtió esa promesa en resultados al registrar efectividad de 2.05 con 96 ponches en 92.1 entradas por Clase-A Charleston, antes de cerrar el año con una presentación para finalizar la campaña en Clase-A Alta Bowling Green. El espigado derecho se apoya principalmente en una recta de 95-97 millas por hora que puede alcanzar las 100 mph y en un slider que oscila en las 85 mph con gran efecto lateral.
Yankees: Carlos Lagrange, LD (Nro. 2/Nro. 74 de MLB)
Tras perderse la mayor parte del año pasado por una inflamación en la espalda y tener problemas de control en la Liga Otoñal de Arizona, Lagrange se recuperó y se convirtió en el mejor prospecto de pitcheo de los Yankees. Firmado por apenas US$10,000 en el 2022, el dominicano domina a los bateadores con una recta que supera las 95 mph, un slider con gran efecto lateral que promedia 85 mph y una recta cortada que se acerca a las 90 mph. Tuvo efectividad de 3.53 con promedio de bateo en contra de .191 y una relación de 168 ponches por 62 bases por bolas en 120 entradas entre Clase-A Alta y Doble-A.
Guardianes: Alfonsín Rosario, OF (Nro. 12)
Cuando los Guardianes lo adquirieron desde los Cachorros a cambio de Eli Morgan en noviembre pasado, Rosario era conocido por sus herramientas llamativas (poder bruto muy por encima del promedio, fuerza en el brazo y velocidad), pero también por un enfoque sumamente agresivo en el plato. El joven de ascendencia dominicana redujo su tasa de ponches del 32% en el 2024 al 27% este año, en la que bateó .251/.345/.461 con 21 cuadrangulares y 14 bases robadas en 115 partidos.
Reales: Kendry Chourio, LD (Nro. 8)
Pocos lanzadores en los últimos tiempos han escalado el sistema y el ranking como lo hizo Chourio en el 2025. Firmado por US$247,500 en enero de este año, el derecho venezolano de 17 años dio el salto a los Estados Unidos tras apenas cinco aperturas en la Liga de Verano Dominicana (DSL). Cerró el año con seis aperturas más, la mayor cantidad para un lanzador de 17 años o menos desde que el mexicano Julio Urías hizo 18 en el 2013. Los Reales fueron agresivos con Chourio, debido a su impresionante repertorio (recta de mediados de las 90 mph, curva por encima del promedio y un cambio prometedor) y su control (sólo cinco bases por bolas en 51.1 entradas). Está bien encaminado a convertirse en un prospecto Top 100 en una etapa muy temprana de su carrera.
Mellizos: Gabriel González, OF (Nro. 8)
Ha sido una montaña rusa para González, quien alguna vez fue un prospecto del Top 100 con los Marineros. Su perfil se desinfló un poco después de que bateara .255 con OPS de .707 en su primer año con los Mellizos, luego de llegar en el cambio por el dominicano Jorge Polanco. Pero el venezolano borró eso este año al dejar atrás un problema en la parte inferior de la espalda que lo limitó en el 2024, y brilló en tres niveles hasta alcanzar Triple-A. González terminó con un wRC+ de 149 — el más alto del sistema de Minnesota — línea ofensiva de .330/.397/.514 y una tasa de ponches de poco más del 14%.
Nacionales: Sean Paul Liñán, LD (Nro. 15)
Firmado por US$17,500 en Colombia en el 2022, Liñán no estaba entre los mejores 30 prospectos de los Dodgers al iniciar este año, pero se colocó en esa conversación con su dominio en Clase-A y Clase-A Alta (además de dos breves presentaciones en Triple-A). Los Nacionales adquirieron al derecho en ascenso en la Fecha Límite de Cambios de este año en un canje por Alex Call, y con su cambio de velocidad plus-plus (uno de los mejores en Ligas Menores), Liñán se posiciona cómodamente en el medio de la lista de prospectos de Washington.
Filis: Aroon Escobar, 2B (Nro. 5)
Escobar dio de qué hablar cuando bateó .338 con OPS de .974 en su debut en los Estados Unidos en la Florida Complex League (FCL) de novatos en el 2024. Sus cifras superficiales al pasar al béisbol de temporada completa fueron un poco más modestas (promedio combinado de .270 con OPS de .774), pero el venezolano cerró con un impresionante wRC+ de 121 mientras mostraba paciencia al bate y limitaba los ponches. También jugó en tres niveles, culminando el año en Doble-A con apenas 20 años, y luego escaló al Top 5 de la organización tras coquetear con el Top 100 general a principios de año.
Cerveceros: Luis Peña, INF (Nro. 2/Nro. 18 de MLB)
Peña pasó de ser un joven de 18 años sin experiencia en los Estados Unidos a convertirse en uno de los mejores 20 prospectos de todo el béisbol. Peña, junto con el también dominicano Jesús Made, se saltó la Arizona Complex League y comenzó directamente en Clase-A con Carolina, donde bateó .308/.375/.469 con seis jonrones y 41 bases robadas en 71 juegos. Puede que haya tenido un tropiezo en Clase-A Alta con Wisconsin a finales del verano, pero su mejoría en velocidad de salida y su velocidad plus-plus constante lo convertirían en el principal prospecto en muchas otras organizaciones.
Cardenales: Rainiel Rodríguez, C (Nro. 3/Nro. 55 de MLB)
Rodríguez ya había brillado en el 2024 con un slugging de .683 y OPS de 1.145, pero al demostrar que podía trasladar su poder característico no sólo al béisbol estadounidense sino también a Clase-A, ingresó al Top 100 y se posicionó para seguir subiendo en futuros rankings. Desde el 2006, Rodríguez (145) es uno de sólo tres receptores de 18 años con un wRC+ superior a 140 en 250 visitas al plato o más --los otros son el quisqueyano Samuel Basallo (151) y el venezolano Jesús Montero (147). Los 20 cuadrangulares del quisqueyano en la campaña lo empataron en el séptimo lugar entre todos los cátchers de Ligas Menores este año.
Piratas: Edward Florentino, OF (Nro. 5/Nro. 81 de MLB)
Florentino logró dar un gran paso en el 2025. El dominicano empezó el año como el prospecto Nro. 23 en el Top 30 de los Piratas y aún no había debutado en los Estados Unidos. Comenzamos a recibir informes sobre la fuerza con la que estaba bateando durante los entrenamientos extendidos, y realmente llamó la atención con su OPS de 1.084 en la Florida Complex League. Eso le valió un ascenso al béisbol de temporada completa, donde mantuvo su producción, terminando con OPS combinado de .948, 16 vuelacercas y 35 bases robadas (con un wRC+ de 159). También ha trabajado fuerte para convertirse en un buen jardinero central y llegará al 2026 con una gran flecha hacia arriba junto con su nombre.
D-backs: Carlos Virahonda, C (Nro. 24)
Virahonda no estaba en el radar de nadie tras batear .156 con OPS de .510 en 49 partidos durante su segunda campaña en la Liga de Verano Dominicana en el 2024. Aun así, Arizona envió al venezolano por primera vez a los Estados Unidos con 19 años en el 2025 y fue un bateador completamente distinto: Produjo una línea de .347/.464/.455 con una tasa de ponches de apenas el 11.8% en 37 juegos en la Arizona Complex League de novatos, antes de ser ascendido a Clase-A con Visalia. Se perfila como un bateador de alto contacto por el lado derecho, con buena movilidad y fuerza en el brazo detrás del plato.
Gigantes: Argenis Cayama, LD (Nro. 9)
Varios jóvenes lanzadores internacionales se destacaron en los niveles bajos del sistema de los Gigantes este año, incluyendo a Cayama, quien firmó por US$147,500 en el 2024. Lideró la Arizona Complex League en promedio en contra (.191) y WHIP (1.06), además de ubicarse segundo en efectividad (2.25) en su debut en los Estados Unidos, antes de ser ascendido a Clase-A en agosto con apenas 18 años. Posee rectas de dos y cuatro costuras que oscilan entre las 92 y 94 mph y alcanzan las 97, además de un slider cerrado que supera las 80 mph y un cambio prometedor que promedia 85 mph.
Padres: Miguel Méndez, LD (Nro. 5)
Sin estar clasificado al inicio de la temporada, Méndez parecía estar en riesgo de quedar fuera del roster de 40 de cara al Draft de la Regla 5 de esta temporada muerta, pero ahora luce como una adición obligada tras mostrar una recta de 95-98 mph y un slider plus en los niveles de Clase-A, Clase-A Alta y Doble-A. El quisqueyano cerró su campaña del 2025 con efectividad de 3.22, WHIP de 1.22 y 118 ponches en 95 episodios, reduciendo su tasa de bases por bolas de un 15.5% en el 2024 a un 11.2%.