FILADELFIA — Cómo pueden cambiar las cosas en el béisbol en un año. En ese tramo, los Filis se convirtieron en un equipo sorpresa que alcanzó la Serie Mundial en su primera clasificación a la postemporada en 11 años en el 2022 a uno que se quedó cortó de las expectativas, luego de ser eliminados en siete juegos en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional ante los D-backs.

Al final, los altibajos del club fueron insostenibles para continuar la temporada. Filadelfia fue un equipo que vivió y murió por el cuadrangular, que llegó en ráfagas para el club. Cuando la ofensiva estaba en su mejor momento, los Filis parecían un equipo invencible, capaz de dejar un diferencial positivo de 15-3 en los primeros dos partidos de la SCLN y de eliminar sin mayores problemas a los Marlins y a los Bravos, en la Serie del Comodín y en la Serie Divisional, respectivamente.

Pero una vez se mudó la SCLN hacia el desierto, y los D-backs fueron encontrando las formas de “descifrar el código”, como señaló su manager Torey Lovullo, los bates de los Filis desaparecieron, causando la derrota de su equipo en cuatro de los últimos cinco compromisos.

La inusual dinámica del club, que cuenta con un jugador como Kyle Schwarber como primer bate — quien a pesar de brillar en la SCLN con cinco jonrones no deja de ser una figura poco acostumbrada de ver en ese orden al bate — el cañonero empalmó 47 bambinazos en la temporada regular y empujó 104 carreras, pero bateó apenas .197.

Pero Schwarber no fue el problema. Todo lo contrario. El bateador designado de los Filis dejó promedio de .364 ante los D-backs, con dos dobles, cinco bambinazos, ocho carreras anotadas y ocho boletos.

Más que un aspecto individual, los Filis no supieron aprovechar sus grandes conexiones. El club termina su paso por esta postemporada con 24 vuelacercas — con lo que igualan su segunda mayor cantidad en unos playoffs — pero 20 de ellos fueron solitarios.

Y al final, el trueno de los Filis sencillamente se enfrió en el momento menos oportuno. Luego de pisar el plato 15 veces en los primeros dos juegos de la SCLN, el club terminó anotando esa misma cantidad de rayitas en los siguientes cuatro partidos, para un promedio de menos de cuatro anotaciones por choque.

Especialmente, los primeros tres bateadores en el orden — Schwarber, Trea Turner y Bryce Harper — se combinaron para irse de 18-1 en los últimos dos partidos de la serie, cuando tuvieron la oportunidad en días consecutivos, en casa, de avanzar al Clásico de Otoño por segunda ocasión consecutiva.

Sin embargo, el manager Rob Thomson, quien ha sido criticado por no haber cambiado su alineación durante los siete encuentros ante Arizona, no quiso enfocarse tanto en los suyos, sino prefirió darle mérito al rival.

“Le lanzaron a esos chicos muy bien. Son los altibajos normales de una ofensiva”, expresó el piloto. “No van a batear todos los días de una temporada. Eso no va a pasar. Los otros chicos tienen que responder también”.

De cualquier manera, teniendo en cuenta que el club tiene proyectado tener la nómina más grande del béisbol en el 2024, según Spotrac, la presión aumenta ahora para los Filis.

“Estamos construidos para octubre. Se trata de sacar el último out de una Serie Mundial”, indicó Thomson. “Debido a nuestro pitcheo abridor, debido a nuestra ofensiva. También tenemos un buen bullpen. Hay áreas en las que caímos un poco, pero tenemos un buen equipo. Nuestra meta no es clasificar a la postemporada. Nuestro objetivo es ganar la Serie Mundial. Es muy decepcionante”.

El club falló en ese propósito. La directiva, liderada por Dave Dombrowski como el presidente de operaciones de béisbol, tendrá un invierno largo para evaluar lo que faltó para volver al escenario más alto del béisbol en el 2023.

¿Seguir viviendo del jonrón? ¿Hacer cambios drásticos? ¿Continuar el curso? Son algunas de las interrogantes que se desprenden de la eliminación.

La mayoría del equipo estará bajo contrato la temporada que viene, con excepción de Aaron Nola, Rhys Hoskins y Craig Kimbrel, que se presentan como sus agentes libres de mayor cartel.

De cualquier manera, lo que hace un año parecía una gran historia para los seguidores de Filadelfia, a pesar de perder la Serie Mundial en seis partidos ante los
Astros, la eliminación de este año luce como un golpe de realidad. 

¿Cómo reaccionará Dombrowski y el resto de la gerencia? Está en veremos