Gose: De OF a lanzador…y a tirar a 100 mph

21 de septiembre de 2021

CLEVELAND – La puerta del bullpen del Progressive Field se abrió en la cuarta entrada del juego del lunes. Por allí salió Anthony Gose. En su camino hacia el montículo, el jugador de 31 años completó un camino literal y figurativo desde los jardines hacia la loma, debutando y regresando simultáneamente a las Mayores.

Más de cinco años después de su último partido en Grandes Ligas como jardinero central, Gose hizo su primera presentación como monticular en el segundo choque de una doble tanda, en la que Cleveland salió barrido a manos de los Reales. Gose permitió una carrera en 1.2 entrada de labor, en la derrota por 4-2.

Entre rectas a 100 millas por hora, Gose superó a un indetenible venezolano Salvador Pérez con un ponche, que le dio un punto de exclamación a su imperfecta, pero entretenida presentación.

“Fue bien especial para mí”, confesó Gose. “Significó mucho tener otra oportunidad para volver. Ha pasado un tiempo y estoy muy emocionado y feliz por tener la oportunidad”.

Gose fue seleccionado en la segunda ronda del Draft amateur del 2008 por los Filis y fue un valorado prospecto en ese entonces. Fue enviado a los Azulejos en el 2010, como parte del canje de Roy Oswalt Luego, fue canjeado a los Tigres en el 2014. Gose tenía la velocidad y el brazo para competir por un Guante de Oro, pero no pudo mantenerse. Tuvo OPS de apenas .656 en 372 encuentros a lo largo de cinco campañas con los Azulejos y Tigres.

Entonces, cuando no hizo el roster inaugural de Detroit en el 2017, se enfocó en el pitcheo. Algunos scouts querían que lo hiciera cuando aún estaba en la secundaria, pero a sus 26 años, todavía tenía posibilidades de modificar su carrera.

Gose dijo el lunes que hubo “más de una vez”, en la que parecía que su sueño de volver a las Mayores no se haría realidad.

Entonces, ¿cómo logró seguir?

“Amo el juego”, señaló Gose. “Me encanta jugar. Supongo que soy demasiado tonto como para renunciar”.

Gose no se dio por vencido y, luego de un breve paso por la organización de los Rangers y un frustrado intento de hacer el roster de los Astros como seleccionado en el Draft de Regla 5, encontró su hogar en unas fincas de Cleveland que se enfocan en el desarrollo de los lanzadores.

En el debut de Gose, fue fácil apreciar por qué la Tribu ha sido paciente con él en los últimos tres años. Regaló un boleto ante el primer rival que enfrentó, Hunter Dozier, quien eventualmente anotó. Pero el radar marcaba su recta constantemente en 99 y 100 mph, con un slider sólido. Cuando Gose pasó a Pérez con una recta a 98.7 mph por encima de la zona, fue el primer lanzamiento que pareció ser el comienzo de algo especial.

“Esto”, confesó Gose, “fue mucho más especial que debutar como bateador”.