ATLANTA - Tres años después de haber armado al talentoso trío conocido como "Up, Up y un Hey", los Bravos ahora enfrentan algunas interrogantes en los jardines, las cuales se centrarán alrededor de un hombre de apellido Inciarte.
Cuando los Bravos adquirieron al venezolano Ender Inciarte desde los D-backs en diciembre, hicieron otro intento más por corregir el error que cometieron cuando le otorgaron a Melvin Upton Jr. un contrato por cinco años y US$75.25 millones con la esperanza de que éste fuera su jardinero central por lo menos hasta el final de la campaña del 2017.
Gracias al tremendo declive de Upton en Atlanta, los Bravos les han otorgado la titularidad en la pradera central a 11 jugadores diferentes (siete de los cuales han arrancado al menos 14 veces en esa posición) desde el inicio de la temporada del 2013. En ese trecho, Atlanta también les dijo adiós a sus dos productivos guardabosques -- Jason Heyward y Justin Upton - de aquel trío llamado "Up, Up y un Hey".
Ahora, con Inciarte, los Bravos piensan que han adquirido a un jugador capaz de adueñarse del jardín central al menos para las próximas cinco campañas. Pero sería más apropiado describir al venezolano como un pelotero cuya versatilidad podría ser aún más valiosa mientras Atlanta arranca la próxima temporada con interrogantes que rodean a ambos de sus jardineros de las esquinas -- Nick Markakis y el cubano Héctor Olivera.
Markakis fue tal vez el bateador más consistente de los Bravos en 2015, ya que tuvo promedio de .296 con tres vuelacercas y OPS (porcentaje de embasarse más slugging) de .746. Aun así, hubo razón para preocuparse por la considerable baja de poder y fortaleza en el brazo que Markakis mostró en su regreso de una importante cirugía en el cuello a la cual se sometió en diciembre del 2014.
Los Bravos esperan que la oportunidad de hacer sin contratiempos los entrenamientos normales en la temporada muerta le permita a Markakis ser más valioso tanto ofensiva como defensivamente este año. Pero la fortaleza en su brazo continúa siendo una preocupación, y si Olivera no logra tener una transición sin problemas al jardín izquierdo, existirá la opción de colocar a Markakis en la otra esquina de los jardines y trasladar a Inciarte al bosque derecho.
A la vez que produjo el quinto mejor promedio UZR/150 (18.5) de Grandes Ligas en el 2015, Inciarte pasó la mayor parte del tiempo como jardinero derecho en los Diamondbacks. Ahora que ya no es compañero de A.J. Pollock, será trasladado de regreso al jardín central. Pero el tiempo de juego de Inciarte en dicho puesto también podría depender del desarrollo del prospecto en ascenso Mallex Smith, quien podría unirse al roster de Atlanta en algún momento este verano.
Inciarte tuvo promedio de .303, con 21 bases estafadas y OPS de .747 en 561 visitas al plato el año pasado. El jardinero de 25 años de edad será el primer bate titular de Atlanta. Pero los números divididos de Inciarte (OPS de .826 vs. derechos y OPS de .530 vs. zurdos) podrían animar al piloto Fredi González a sentarlo ocasionalmente y colocar en esa posición al dominicano Emilio Bonifacio, bateador ambidextro.
Los Bravos también podrían necesitar encontrarles tiempo de juego a Michael Bourn y Nick Swisher. Pero parece que canjearán o dejarán en libertad a uno de estos dos jugadores (Swisher parece ser el más probable) antes del comienzo de la temporada.
Si Bourn permanece en el equipo, el jardinero podría servir como un valioso mentor de Smith durante los entrenamientos primaverales y luego arrancar la campaña como jardinero suplente. El veterano de 33 años de edad podría sustituir ocasionalmente a Olivera, quien ya vio tiempo de juego como jardinero izquierdo este invierno con los Criollos de Caguas en Puerto Rico.
Olivera no cumplió con las expectativas tras batear para .253 con OPS de .715 en los 24 encuentros en los que participó tras su debut con Atlanta en septiembre. Pero los Bravos lucieron animados por la forma en la que el cubano de 31 años de edad se desempeñó en el jardín izquierdo durante su breve estadía en Puerto Rico. Ahora sólo esperan que Olivera encuentre su ritmo ofensivo en lo que será su primera temporada completa en la Gran Carpa.