J-Rod probó que “vive para esos momentos”

7 de junio de 2022

HOUSTON -- El jardinero dominicano de los Marineros, Julio Rodríguez, ha dicho desde el comienzo que quiere estar en medio de los momentos apremiantes, y el quisqueyano dramáticamente dio la cara cuando la oportunidad se presentó en el partido del lunes.

Momentos después de que se vaciaran las bancas en el primer partido de la serie entre Seattle y los Astros, Rodríguez le puso su sello a la evidente tensión en el Minute Maid Park con un cuadrangular de 360 pies hacia las gradas del bosque derecho, saltando hacia la inicial y quedándose con el bate hasta mitad de camino. Marcó el punto de exclamación en la victoria por 7-4 de Seattle.

Aparte del hecho de que los Marineros finalmente tuvieron éxito en un escenario que les ha sido una casa de horrores desde el 2019, Rodríguez -- recién reconocido como el Novato del Mes de mayo en la Liga Americana -- demostró una impresionante calma al poner a un lado el peso de las emociones luego de que se subieran los ánimos sobre el terreno justo antes.

Ty France fue golpeado por un lanzamiento en la espalda que no fue marcado de manera inmediata por el umpire del plato Chris Guccione, punto en el cual el piloto de los Marineros, Scott Servais, detuvo el juego para potencialmente pedir la revisión en video. Del otro lado del diamante comenzaron a escucharse gritos desde la cueva de los Astros, acto que provocó una respuesta inmediata de parte de Seattle, y de repente, ambas bancas y el bullpen se vaciaron.

“Yo siento que nunca perdí el control”, dijo Rodríguez. “Sabía que estaba toda esa situación, pero me dije, ‘Tienes que estar listo para batear’. Al final del día, más allá de todo lo que pasó, yo lo que necesitaba era mantenerme enfocado y poder producir para el equipo”.

Rodríguez incluso fue visto, de buena fe, tratando de calmar a su compatriota, el relevista de Houston Héctor Neris, antes de que el conato de bronca subiera de tono.

Los dos se conocen desde hace tiempo, habiendo entrenado juntos varias temporadas muertas en Tampa, Florida, con el preparador físico Yo Murphy, a quien Rodríguez le da mucho crédito para explicar porque está corriendo más rápido.

Pero una vez que las cosas se calmaron, esa camaradería mutua desapareció. Después de todo, había que tratar de ganar el juego.

“Al final del día, él está en el otro equipo”, dijo Rodríguez. “Yo juego para los Marineros y hay que competir…. Yo claro que estaba encendido. Realmente nunca hablo o grito cuando doy jonrones, pero en esa situación sentí que tenía que hacerlo y fue como que dejé salir todo lo que sentía”.

La forma como Rodríguez manejó el turno y toda la situación no pasó por debajo de la mesa para el manager de los Marineros, Scott Servais.

"Eso me dice que le gustan esos momentos cuando la sangre hierve", dijo Servais. "Algunos juegan mejor así. Él juega bien siempre. Pero algunos muchachos elevan su nivel en esos momentos. Como jugador te pones un poco emocionado. Es como que tienes esa espina ahí".

Sin embargo, durante los altos y los bajos de estos primeros dos meses de su carrera, y por encima de cualqier cosa, Rodríguez ha mantenido siempre una actitud positiva. Estaba sonriendo mientras abrazaba a Neris para sostenerlo detrás del montículo como un gesto de tratar de calmar los ánimos. Esa compostura que mantuvo el lunes, a pesar de toda la adrenalina que corría entre ambas novenas, impresionó a todo el mundo.

“Es súper raro, pero eso te demuestra dónde está mentalmente”, dijo el abridor de los Marineros, Robbie Ray. “Tiene la cabeza bien puesta sobre los hombres y es humilde. Pero él vive para ese tipo de momentos y es bien especial verlo triunfar en esas situaciones. Es muy divertido ver a un muchacho de 21 años corriendo las bases ahí (después de botarla)”.

Seattle ahora ha ganado cinco juegos en esta gira por tres ciudades que concluye en Houston, amarrando su primera gira ganadora en la campaña.