MIAMI - En un principio, Jean Segura no estuvo en el roster de la República Dominicana para el Clásico Mundial de Béisbol 2017. Con tantas estrellas provenientes de la Media Isla Hispaniola, ni siquiera un jugador que encabezó la Liga Nacional en hits en el 2016 con 203, como fue el caso de Segura, tenía cabida en la selección quisqueyana.
Sin embargo, cuando Hanley Ramírez se vio limitado por una lesión en el hombro derecho, Segura recibió la llamada del gerente general Moisés Alou para integrar la escuadra dominicana. Luego de pasar los primeros dos encuentros de Dominicana en la banca, Segura brilló en el tercer partido del equipo el domingo contra Colombia, yéndose de 6-3 con dos dobles, dos anotadas, tres empujadas, un robo de la tercera base y una defensa acrobática en el campo corto para ayudar a su equipo a ganar 10-3 en 11 entradas y avanzar con un invicto de 3-0 en el Grupo C.
"Le doy gracias a Dios por tener la oportunidad de estar aquí y siempre tuve la fe y la cabeza en alto", dijo Segura al tocar el tema de no ser incluido en el equipo dominicano desde el principio. "Lo entendí en el momento, porque son demasiadas estrellas en la República Dominicana y como profesional, en ese entonces, lo asimilé".
Segura forma parte de un grupo sumamente talentoso de infielders de la selección dominicana capaces de jugar en el medio del cuadro interior. José Reyes, Robinson Canó, Jonathan Villar y hasta Manny Machado (campo corto) son las opciones diarias para el manager Tony Peña, quien ha cumplido con su expresa meta de poner a jugar a todo el mundo.
El domingo le tocó a Segura, quien en el undécimo inning dio doble productor de tres carreras para ampliar a 8-3 la ventaja de los dominicanos sobre Colombia, lo que esencialmente puso el juego en la nevera para Quisqueya la Bella.
Hasta ahora, ha salido premiado Alou por elegir a Segura como sustituto de Ramírez.
"Le dije a Moisés, 'Si me necesitas en cualquier momento, ahí estaré'", expresó Segura, quien luego de batear .319/.368./.499 con 20 jonrones y 33 bases robadas por los Diamondbacks en el 2016, fue cambiado a Seattle, donde formará la pareja de doble-matanza con quien ha denominado como su "tutor", Canó. "Gracias a Dios, se dio la oportunidad. En realidad, me sentí muy bien por formar parte de este gran equipo.
"Para mí es un honor llevar esa chaqueta y es lo más grande que me ha podido pasar en mi carrera".