El puertorriqueño Joe Espada es conocido dentro del mundo del béisbol como un hombre trabajador, detallista y siempre dispuesto a conseguir el tiempo para ayudar a su equipo.

Pero ahora que el coach de la banca de los Astros está entrevistándose para distintos cargos de manager por segundo año el corrido, cree que los retos que ha enfrentado fuera del terreno lo han ayudado a prepararse mejor que nunca para el puesto con el que sueña.

Durante la temporada del 2017, el coach de 44 años – entonces en su cuarta temporada con los Yankees y tercera como coach de tercera base de Joe Girardi— y su esposa Pamela empezaron a notar algunos cambios de conducta en su hija más pequeña, Viviana, que para entonces tenía sólo dos años.

Viviana era muy pequeña para ser formalmente diagnosticada con autismo, dijo Espada, pero eso lo sabría el siguiente verano.

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“La gente habla de los retos en nuestras vidas, cómo los enfrenta uno cuando se te presentan”, dijo Espada. “Pero verla con esos problemas para comunicarse, pasar por la terapia física, es bien duro. Ver que no podía jugar con niños de su edad, eso te hace ver la importancia de lo duro que es a veces lograr que alguien haga ciertas cosas que uno da por descontado”.

Esos retos parecieran ser bien distintos a los que Espada encuentra en su trabajo, pero el boricua ve numerosas similitudes entre ambos.

“Ver a una niña de cuatro años a la que le cuesta comunicarse con otra niña de cuatro años… necesitas tomarte el tiempo para enseñarle cosas básicas”, siguió Espada. “Ese también puede ser el caso en un clubhouse. Mientras más te acercas a los jugadores, más se dan cuenta de que les importas. La compasión, el compromiso de hacer las cosas, eso te hace mejor persona. Me ha hecho un mejor padre y un mejor coach”.

Dada la cantidad de tiempo que pasa junto un equipo de pelota, la comparación con una familia es obvia. De cierta manera, Espada piensa en sus peloteros como sus hijos. No hay nada dentro de su poder que no vaya a hacer por ayudarlos a alcanzar sus metas.

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“Uno hace lo que sea para ayudarlos”, resumió Espada. “No es sólo la parte estratégica la que importa. Tienes que conectarte con la persona. Lo importante es lo que está en tu corazón”.

Espada se considera “bendecido” por haber tenido la oportunidad de trabajar con Girardi y AJ Hinch durante los últimos cinco años, pero dijo que ha aprendido más de Viviana durante este último año de lo que jamás pudo haber soñado. Espada dijo que su hija ha “dado un giro” en meses recientes, mostrando franca mejoría su forma de expresarse y capacidad de coordinación.

Burton Rocks, amigo y agente de Espada, ha visto el impacto que la situación de Viviana ha tenido en él y la forma en la que ha utilizado uso para ser mejor persona tanto en casa como en el estadio.

“La experiencia de Joe con Viviana y todo lo que ella ha pasado lo ha ayudado a entender mejor el béisbol de hoy”, aseguró Rocks. “Es un hombre de la generación analítica que también tiene un gran corazón. Puede lidiar y tener éxito en medio de una crisis”.

Espada se reunió con los Cachorros el domingo, su segunda entrevista para el puesto de manager del club. Se espera que se entreviste con los Gigantes esta semana, mientras que los Piratas también han expresado interés en conversar con él.

El interés en Espada no es nada nuevo. El año pasado fue entrevistado por Angelinos, Azulejos y Rangers, y aunque no consiguió ninguno de esos trabajos, la experiencia ganada durante el proceso fue invalorable.

Espada reemplazó al también puertorriqueño Alex Cora como coach de la banca de los Astros luego de que éste lograra el puesto de manager de los Astros al terminar la Serie Mundial del 2017. Dos años alrededor de Hinch han resultado invalorables para Espada, entre cuyas responsabilidades está posicionar a los jugadores de cuadro, una tarea importante tratándose de un equipo que emplea tantas formaciones defensivas como los Astros.

Pero por vital que sea la parte analítica para el manager moderno, Espada sigue viéndose como maestro y estratega. Encontrar el balance perfecto entre los tres es el punto ideal para que el piloto de hoy día tenga éxito.

“Hay un lado humano, un lado analítico y un lado de estrategias; ¿cómo puedo usar los números y la información para tomar decisiones en los juegos?”, explicó Espada. “Yo he tenido la bendición de trabajar para dos organizaciones como Yankees y Astros con estructuras diseñadas para apoyar las nuevas formas de pensamiento. Es increíble poder estar rodeado de gente inteligente y de directivas inteligentes. Hace una tremenda diferencia”.

Todavía está por verse si Espada podrá manejar su propio equipo la temporada que viene, pero como él mismo dice, su actual cargo como coach de la banca de Hinch es uno de los mejores puestos del béisbol. Tiene un puesto primera fila para ver qué hace falta para tener éxito en ese cargo y con suerte podrá poner esa misma experiencia en práctica muy pronto.

“Para liderar a un grupo de hombres, cambiar sus vidas y crear una cultura ganadora”, dijo Espada cuando se le preguntó porque quiere dirigir. “Compromiso e integridad, de eso se trata todo. Quiero liderar un equipo y cambiar las cosas en el clubhouse. Yo sé que puedo hacerlo. Sólo quiero la oportunidad”.