Jorge Bonifacio anhela ser el segundo de su familia en G.L.

10 de julio de 2016

SAN DIEGO -- Jorge Bonifacio tiene un apellido bien conocido en el béisbol, como hermano menor de Emilio Bonifacio, veterano de Grandes Ligas y de la Liga Dominicana.
Sin embargo, Jorge -- prospecto número 15 de los Reales de Kansas City según MLBPipeline.com -- es un jugador bien diferente a Emilio. 
El mayor de los hermanos dominicanos es un utility que ha aprovechado su velocidad y versatilidad para jugar partes de 10 temporadas en Grandes Ligas como infielder y guardabosque. En cambio, Jorge Bonifacio se destaca, sobre todo este año, como bateador de poder y guardabosque derecho. 
En su primera temporada a nivel de Triple-A, aprovechando el ambiente de muchos de los estadios de la Liga de la Costa del Pacífico en las Montañas Rocosas, Jorge Bonifacio lleva promedio de .290 con OPS (porcentaje de embasarse más slugging) de .850, 13 jonrones y 54 empujadas en 321 turnos. Aunque se ha ponchado 85 veces, el quisqueyano ha logrado ir bajando la proporción de visitas al plato que han terminado vía el "abanico".
Dicha actuación le valió una convocación al Juego de las Futuras Estrellas en el Petco Park de San Diego.  
"(Se debe) al trabajo fuerte", asegura Bonifacio, de 23 años de edad, acerca sus éxitos del 2016. 
Debido a que Emilio le lleva ocho años a Jorge, el dúo de hermanos no llegó a jugar juntos con frecuencia en Santo Domingo. Pero Jorge procuró estar atento al ascenso de su hermano al mejor béisbol a partir del 2007. 
"Veía siempre a mi hermano progresando y me ponía contento", contó Jorge. "Yo también quería ser como él". 
Jorge también asegura que Emilio le ha tratado de dar buenas orientaciones durante su joven carrera. 
"Todos los días me aconseja y eso me ha ayudado mucho a mí", dijo Jorge. "De bateo, de defender, de cómo debo correr las bases. Todo". 

Ahora mismo Emilio Bonifacio se encuentra en el limbo, al ser designado para asignación por los Bravos el jueves. No se sabe si el veterano volverá a verse uniformado a nivel de Grandes Ligas, pero no cuesta nada soñar con una reunión entre hermanos en las Mayores. Total, Emilio tiene historial con los Reales, ya que participó en 42 juegos por Kansas City hace tres años.
"Eso es lo que anhelo en mi corazón, jugar algún día con él donde sea", dijo Jorge. "Tengo eso en mi corazón y espero que él también lo quiera". 
Más allá de esa ilusión, la realidad dicta que Bonifacio afine su juego, sobre todo en lo que es su carta de triunfo en el béisbol: el bateo.
"(Tengo que mejorar) en todos los aspectos; no me puedo conformar", manifestó Bonifacio. "Así puedo seguir escalando en el béisbol y ser una estrella.