Con Machado a bordo, lineup de S.D. mete miedo

25 de febrero de 2019

PEORIA, Arizona – Si usted aún no está enterado, los Padres firmaron a Manny Machado esta semana. Y ahora el lineup de San Diego, con Wil Myers, Eric Young y mucho talento joven rodeando a su nueva superestrella, podría ser un buen orden ofensivo.

“Yo la veo como una ofensiva para pelear por la postemporada”, dijo Myers. “No hemos tenido una desde que yo llegué aquí”.

Myers sólo ha estado con los Padres por cuatro años, pero en realidad ha pasado mucho más tiempo desde que tuvieron una ofensiva legítimamente buena. Incluso durante su último período exitoso, entre 2005 y 2007, el pitcheo jugó un rol mucho más determinante.

Si definimos una toletería “buena” como una que se haya ubicado entre las primeras 15 de las Grandes Ligas en carreras anotadas, los Padres no han hecho eso desde el 2001.

Sin embargo, este grupo del 2019 podría empezar a cambiar las cosas.

“Es un lineup con mucha profundidad”, dijo el receptor Austin Hedges. “Tenemos velocidad, poder, distintas armas, así que es un lineup que se complementa muy bien”.

En el papel, el orden ofensivo para el día inaugural podría ser: (1) Manuel Margot, CF; (2) Manny Machado, 3B; (3) Eric Hosmer, 1B; (4) Wil Myers, LF; (5) Hunter Renfroe, RF; (6) Ian Kinsler, 2B; (7) Luis Urías, SS; (8) Austin Hedges, C.

Naturalmente, la mayoría de los sistemas de proyección no son tan optimistas sobre los Padres como los mismos Padres. Pero esos sistemas también reconocen que el club es mucho mejor de lo que había sido en las más recientes campañas.

De acuerdo con el sistema Steamer, ese posible lineup de los Padres para el Día Inaugural terminaría la temporada 2% mejor que el promedio de la liga. Tener a Machado, y no a Ty France, hace una gran diferencia. Para Steamer, Machado terminaría con 130 wRC+ esta campaña (30% mejor que el promedio de la liga), mientras que France cerraría con 87 wRC+, 13% menos que la media.

Los Padres, sin embargo, son los primeros en apuntar que no son sólo los regulares los que podrían darle un empujón a la toletería este año. La ofensiva de San Diego tendrá muchas más opciones. Los outfielders Hunter Renfroe, el dominicano Franchy Cordero y Travis Jankowski empezarán el año en la banca o en las menores. Los tres fueron regulares en algún momento del año pasado y Renfroe podría ser el mejor bateador de la novena.

“Estamos empezando a acumular talento que puede jugar e impactar al equipo grande”, dijo el manager Andy Green. “Ese tipo de profundidad es lo que ultimadamente te da campeonatos. En 162 juegos siempre hay muchas lesiones. Pero ahora viendo a estos muchachos en el campamento, vamos teniendo más y más profundidad. Eso es necesario”.

Pero la profundidad no es necesariamente para llenar huecos cuando ocurra alguna lesión. El dominicano Margot ha tenido problemas contra zurdos, y Cordero contra derechos. Imaginen a los dos alternándose en el jardín central, con Margot, que es mucho mejor guante, listo para entrar como reemplazo defensivo al final de los juegos cuando no le toque abrir.

Hay otras opciones para alternar en el medio del infield y la receptoría. Y quizás el mayor efecto de la llegada de Machado – un año después del arribo de Hosmer— es que los bateadores de los Padres van a estar alineados donde probablemente deberían estar alineados en el lineup.

“Tenemos tipos que van a batear de sexto o séptimo que están emocionados porque van a estar de sexto o séptimo”, señaló Green. “Antes, quizás estaban bateando de tercero o cuarto. Ahora tenemos un lineup más largo”.

Claro que todavía queda camino por recorrer. Los Padres han finalizado últimos en las Mayores en promedio de embasarse por cinco años seguidos. La ofensiva tiene poder, pero la falta disciplina. Y Machado es más conocido por lo primero que por lo segundo.

También está el asunto de la rotación, que terminó última en la gran carpa en efectividad el año pasado. Si los Padres quieren ganar en el 2019, probablemente van a tener que anotar muchas carreras. En sus 50 años de historia, eso es algo que jamás han hecho de forma regular.

Pero, de cualquier forma, no se puede negar el impacto de Machado.

“Tienes que escoger a quién le quieres lanzar en ese lineup”, explicó Renfroe. “Todo el mundo pasará por momentos malos. Pero mientras más caballos tengas en el lineup, menos tiempo vas a pasar perdiendo”.

Ese es el núcleo del efecto Machado. Los Padres tienen a un caballo en su alineación. Con él en el centro de todo, el resto de la ofensiva podría empezar a encajar.