Nuevo ritmo tiene a los jugadores más refrescados y más presentes

11 de agosto de 2023

El tercera base de los Bravos, Austin Riley, se ha perdido apenas cuatro partidos con su equipo en las últimas tres campañas. Entonces, es habla con propiedad al indicar lo que es necesario para jugar cada día y cada noche en las Mayores.

Disputar cada encuentro de esta temporada del 2023, con la implementación del cronómetro de pitcheo y otras reglas, ha sido una experiencia diferente para Riley comparado con los años anteriores.

“Se trata de 30 a 40 minutos menos estando de pie”, explicó Riley, recalcando el desgaste que el shift causaba en los infielders que se movían de lado a lado, especialmente los antesalistas. “El año pasado, corrí 45 millas, sólo con el shift [según precisos cálculos realizados por los Bravos]. Entonces, haciendo menos de esas cosas, el cuerpo se siente bien. Definitivamente, pienso que es un factor”.

Típicamente, algunos presentan como “menos” atractivo la implementación del cronómetro de pitcheo. Es decir, menos inactividad. Menos oportunidad para perder tiempo. Menos vueltas por la lomita. Menos ajustes de los guantes en la caja de bateo. Menos ajustes de los protectores en el cuerpo.

Menos tiempo muerto; entonces, el partido dura menos. El cronómetro le ha restado 26 minutos al tiempo promedio de un encuentro de nueve innings y ha sido señalado como el héroe que mejoró el ritmo de la acción en MLB.

Pero estamos aquí para demostrar que el cronómetro de pitcheo también nos ha dado “más”.

Es decir, más jugadores participando en más compromisos. Pero nos hemos alejado de “menos” y acercado un poco más a la época en que no era tan raro ver  a “titulares” que jugaban todos los días de verdad.

“Siempre que le restes 20, 30 minutos a cada día en el terreno”, dijo el compañero de Riley, Matt Olson--quien juega todos los días de verdad--“te ayudará en tu descanso y recuperación”.

Antes de que nos sigamos fijando en los jugadores de posición, primero observemos el impacto, si es que existe, que el cronómetro de pitcheo ha causado en las lesiones de los lanzadores.

Algunos podrían recordar que esto fue algo que preocupó hasta a los que estaban a favor de la primera temporada de un tiempo contabilizado en MLB, porque lo último que el deporte necesita es más dolencias de brazos.

Pues, como señalamos en junio, los números no respaldan la teoría de que un aumento en el ritmo resultaría en un aumento en lesiones. En realidad, desde cualquier punto de vista, el paso de los lanzadores a la lista de lesionados ha disminuido del 2022 al 2023.

Como pueden ver, los serpentineros inhabilitados han estado cerca de la cantidad de la temporada antes de la pandemia, la del 2019, pero eso se trata más del patrón de varias décadas en que las lesiones de los lanzadores han seguido ascendiendo. Con el aumento de la velocidad en los pitcheos, también han aumentado los riesgos de lesiones. Debido a que las dolencias anteriores ayudan a pronosticar las futuras, el aumento de pitchers que llegan al nivel profesional con operaciones Tommy John en sus expedientes contribuye a este alarmante patrón.

Sabemos que hay una correlación entre el aumento de velocidad y las lesiones; lo incierto es si hay correlación entre el aumento del ritmo del juego y las lesiones.

El impacto que el cronómetro de pitcheo pueda causar en los jugadores viendo más acción es más interesante.

En cuanto a la lista de inhabilitados se refiere, los datos nos indican que los jugadores de posición se están lesionando prácticamente al mismo paso que el año pasado y que la última temporada antes de la pandemia, la del 2019.

Aunque las inhabilitaciones se han mantenido en las mismas cantidades, lo que sobresale, a estas alturas de la campaña, es el aumento de cantidad de jugadores participando en la gran mayoría de los encuentros de sus equipos.

El año pasado, hubo 43 que disputaron 95 juegos o más de los primeros 100 compromisos de sus equipos.

Esta temporada, con los conjuntos ya habiendo disputado los 100 choques, dicha cifra ha aumentado a 61.

Desde otro punto de vista, el año pasado hubo apenas 26 jugadores que vieron acción en 155 partidos o más y sólo dos -- Olson y Dansby Swanson -- disputaron cada uno de los 162 compromisos.

Esta campaña, antes de la acción del viernes, hubo 55 jugadores que llevaban paso de al menos 155 partidos, que sería la mayor cantidad desde el 2016. Y había 11 (el venezolano Ronald Acuña Jr.Freddie Freeman, el dominicano Juan SotoMarcus Semien, el puertorriqueño Francisco Lindor, Olson, Riley, Ozzie Albies, el venezolano Eugenio SuárezAnthony Volpe y Kyle Schwarber) que han visto acción en cada juego de lo que va de la campaña y podrían jugar cada uno de los 162 -- ¡que sería la mayor cantidad desde 1964!

Honestamente, no anticipamos que todos en esa lista de los 162 tenga la misma cantidad, y posiblemente todo el patrón pueda cambiar durante la recta final.

Pero los números hasta ahora nos hacen creer que los partidos que duran menos tiempo mejoran nuestras posibilidades de ver a los mejores jugadores sobre el terreno con frecuencia.

“Las piernas se sienten más frescas”, agregó Riley. “En el sexto, séptimo, octavo innings, pienso que ahí se siente la diferencia de estar más enfocado, con más agilidad”.

-- El investigador de MLB.com, David Adler, y el reportero Tim Stebbins contribuyeron a esta nota.