¿Podrán los Mets triunfar vs. mejores equipos?

8 de agosto de 2019

NUEVA YORK – Durante las últimas dos semanas, los Mets han demostrado su temple contra un equipo actualmente en el tercer lugar de su división y ante dos más en el quinto lugar, al ganar 13 de sus últimos 14 juegos para colocarse de nuevo en la contienda por la postemporada en la Liga Nacional. No se trata de una crítica negativa; los Mets han jugado contra los equipos que les tocaban en el calendario y han salido airosos, armando la mejor seguidilla de victorias desde que ganaron 16 de 17 compromisos en 1990.

Tras vencer a los Marlins el miércoles por 7-2 detrás de cuatro jonrones y una sólida apertura de Steven Matz, los Mets sellaron una barrida de cuatro juegos en el Citi Field con su sexto triunfo seguido. Ahora viene lo más difícil. Empatados con los Cardenales a medio juego del segundo Comodín en la Liga Nacional, los Mets se preparan para recibir al equipo del segundo lugar de la División Este, los Nacionales, para una serie de tres compromisos este fin de semana. Posteriormente, el equipo de Queens visitará Atlanta para disputar tres partidos más con los punteros Bravos. Y a partir de ahí, las cosas no lucen nada sencillas.

Si los Mets desean llegar a la postemporada, lo que necesitan hacer, según el primera base Pete Alonso, es “vencer a los gigantes”.

“Tenemos la oportunidad de hacer algo grande”, manifestó Alonso, quien al mismo tiempo destacó que el título del Este de la Liga Nacional, y no uno de los dos Comodines, es el objetivo principal del equipo.

La pregunta es la siguiente ¿Podrán los Mets lograr ese objetivo? Tomemos en consideración los siguientes factores:

Factor a favor: La rotación es de élite

Factor en contra: Todavía no existe una garantía

Desde la pausa del Juego de Estrellas, los Mets cuentan con la mejor efectividad para una rotación de todas las Grandes Ligas con 2.62, gracias en gran parte a tremendas actuaciones de Jacob deGrom, Zack Wheeler y Noah Syndergaard. Cada uno de sus cinco abridores han aportado, incluyendo a Matz, quien el miércoles permitió una sola carrera en 6.2 entradas.

“Tenemos que seguir haciendo lo que hemos venido haciendo últimamente de manera individual y colectiva”, expresó Matz.

Si existen problemas, por ahora éstos no se han notado. Debido a que los Mets canjearon al zurdo Jason Vargas, quien habría sido de gran ayuda en un rol combinado entre la rotación y el bullpen, sus opciones de profundidad en el cuerpo de abridores consisten mayormente en el novato Walker Lockett (7.79 de EFE) y el veterano dominicano Ervin Santana (EFE de 8.53 en G.L. en las últimas dos campañas). Para los Mets, evitar una lesión en la rotación será fundamental.

Factor a favor: El bullpen es mucho mejor también

Factor en contra: Díaz sigue siendo una interrogante

Gracias en gran parte al éxito que ha tenido su rotación, los relevistas de Nueva York también han subido su nivel. Antes del receso del Juego de Estrellas, el relevo de los Mets ocupaba el 28vo lugar en las Mayores en promedio de efectividad. Desde entonces, Nueva York cuenta con el segundo mejor bullpen de Grandes Ligas.

Una de las mayores razones de ese éxito es Seth Lugo, quien no ha cedido una sola carrera desde junio. También démosle crédito a Justin Wilson, quien ponchó a Jon Berti con las carreras del empate en base en el séptimo inning el miércoles para conservar la ventaja. Incluso el dominicano Jeurys Familia ha lucido mejor en agosto, con una carrera permitida en cinco presentaciones.

En cuanto a Edwin Díaz, el taponero puertorriqueño claramente perdió un poco la confianza del piloto Mickey Callaway tras ceder cinco carreras en sus últimos cinco juegos. Aunque Callaway ha mantenido firmemente que Díaz “va a ser nuestro cerrador y ha sido nuestro cerrador”, el dirigente utilizó a Lugo para un salvamento de dos entradas el lunes. Es una situación que hay que monitorear, pero la conclusión es la siguiente: Los Mets van a batallar para cumplir con sus objetivos sin un aporte clave de Díaz.

Factor a favor: La primera parte de su lineup está dando la cara

Factor en contra: La segunda parte no tanto

Jeff McNeil y Alonso han vuelto a encenderse con el madero. El primero ha retomado el trono con el mejor promedio de bateo en las Mayores, mientras que el segundo se ha volado la cerca en tres juegos seguidos para colocarse a dos jonrones de igualar a Cody Bellinger por el récord de más bambinazos para un novato en el Viejo Circuito con 39. Otros que han dado la cara con el madero son Michael Conforto, cuyo par de estacazos el miércoles lo hizo llegar a nueve batazos de vuelta entera para liderar al club en ese departamento en la segunda mitad; el dominicano Amed Rosario, quien batea .350 desde el 29 de junio; y J.D. Davis, quien posee el OPS más alto en la historia del Citi Field.

“Nuestros enfoques están dando resultados ahora mismo”, declaró Conforto. “Estamos teniendo grandes turnos al bate uno tras otro en el lineup”.

Pero a partir del sexto lugar en el orden, el lineup de los Mets ha batallado. Del sexto al octavo lugar en su alineación, los bateadores se combinaron para conectar apenas cuatro imparables en 42 turnos en la barrida de cuatro juegos contra los Marlins, debido en gran parte a que el cubano Adeiny Hechavarría, el venezolano Luis Guillorme, el dominicano Juan Lagares y Aaron Altherr se fueron de 32-2. Salvo una maniobra en el roster (¿Joe Panik, quizás?), uno de esos cuatro va a jugar de manera regular ante la ausencia del lesionado segunda base dominicano Robinson Canó. Los Mets necesitan más producción de ese grupo.

Factor a favor: Los Mets han vencido a los equipos que se suponía debían vencer

Factor en contra: Todavía tienen que demostrar que pueden derrotar a los mejores de manera consistente

Desde la pausa del Juego de Estrellas, los Mets tienen la mejor marca de Grandes Ligas con 19-6. Seis de esas victorias han llegado contra los Marlins, el peor equipo de la Liga Nacional. Los otros 10 triunfos han sido sobre equipos por debajo de .500 como los Piratas, Padres y Medias Blancas. Ahora, los Mets deberán demostrar ser capaces de competir tú a tú con equipos contendientes.

Ante los punteros Cachorros, Dodgers y Bravos, los Mets tienen marca de 7-11. Contra los Filis y Nacionales, los Mets tienen foja de 12-14. Con 27 juegos por disputar vs. esos cinco equipos, los Mets simplemente no pueden darse el lujo de seguir perdiendo ante ellos a ese ritmo. Si eso sucede, se perderán los playoffs.

Entonces, hay que seguir bien de cerca la actuación de los Mets a partir de este viernes, cuando arrancarán un trecho de seis partidos seguidos vs. los Nacionales y Bravos. Esas dos series podrían darnos una mejor idea de hasta dónde los Mets serán capaces de llegar este año.

“Lo que hemos logrado no ha sido nada fácil, pero ya quedó en el retrovisor”, destacó Callaway. “Si seguimos jugando de la misma manera en que lo hemos venido haciendo, vamos a seguir logrando cosas importantes”.