Polanco confía en triunfar en la intermedia

1 de marzo de 2021

FORT MYERS, Florida -- A Jorge Polanco no le tomó mucho tiempo darse cuenta de que algo estaba mal. Otra vez. La temporada 2020 apenas había comenzado cuando el jugador de los Mellizos se dio cuenta que el tobillo derecho que tantos problemas le había dado todavía no se sentía bien. De hecho, varios meses antes de que terminase la campaña, el dominicano se enteró de que tendría que operarse por segundo invierno seguido.

Esta primavera, Polanco está completamente saludable por fin y listo para asumir una nueva posición en el cuadro interior, dándoles esperanzas a él y a Minnesota de que está listo para retomar ese nivel de jugador de Juego de Estrellas que lo eludió en el 2020.

“Pienso que se está moviendo muy bien”, dijo el manager Rocco Baldelli luego de la victoria por 7-6 de los Mellizos sobre los Medias Rojas el domingo en el primer juego de la pretemporada. “Se ve grandioso. Se le ve en la cara. Ha pasado un tiempo desde que llegó a los entrenamientos totalmente sano. Pienso que todos estamos emocionados de verlo jugar y no preocuparnos por ningún asunto de salud. Muy agradable”.

Polanco tuvo buenos turnos el domingo: Una base por bolas en la primera entrada y otra con las bases llenas en la segunda que fueron emblemáticas del tipo de turnos que agotó cuando fue el campocorto titular de la Liga Americana en el Juego de Estrellas en el 2019. Y fue bien distinto a lo que pasó la temporada pasada, cuando tuvo OPS de .685 al lidiar con esas molestias en el tobillo.

Con Polanco ahora trasladado a la segunda base debido a la llegada de Andrelton Simmons, debe de haber menos presión sobre un tobillo que requirió de una cirugía artroscópica tras la campaña del 2019 y de remover una espora de hueso y una astilla tras la campaña 2020.

¿Y cuál es su potencial en la intermedia?

“Si ves lo que es capaz de hacer ofensivamente y lo pones en segunda, podríamos estar hablando de uno de los mejores cinco intermedistas de Grandes Ligas”, dijo el dominicano Tony Díaz, coordinador de infield de los Mellizos.

Primero, veamos el componente ofensivo. Tanto Polanco como los Mellizos recordaron que su swing a la zurda, particularmente, se vio afectado la temporada pasada por los problemas del tobillo, pasando de batear .306/.378/.513 a la zurda en el 2019 a .227/.287/.318 en el 2020.

Polanco siempre ha sido mejor desde el lado izquierdo y el hecho de que su OPS a la zurda fuera 200 puntos peor que el que tuvo a la derecha el año pasado deja bien claro el problema, así como el hecho de que la velocidad de salida promedio de sus batazos bajó considerablemente, de 88.6 millas por hora en el 2019 a 84.9 en el 2020.

“A veces dolía mucho”, dijo Polanco. “Otras estaba mejor. Por eso es que al principio no sabía si iba a tener que operarme, porque jugaba sin dolor algunos días y después con mucho dolor”.

Los Mellizos han colocado a Polanco cerca de la parte alta del lineup ante abridores derechos en las últimas dos campañas, porque creen en su capacidad para realizar buenos turnos y hacer contacto sólido a la zurda. Retomar esa parte de su juego será crítico tanto para la productividad general de la alineación como para el éxito individual de Polanco.

“Me sentí más cómodo tomando mis turnos, apoyando los pies”, dijo Polanco. “Es bien bueno poder volver después de la cirugía y agotar un par de turnos”.

A la defensa, no hay dudas de que moverse del campo corto a la segunda base debe de ayudar a Polanco. Las métricas no lo han elogiado en las paradas cortas a lo largo de los años, a pesar de todo lo que ha trabajado en la posición. En cada una de sus campañas, ha terminado con un total negativo de Carreras Defensivas Salvadas, totalizando menos -34 en siete años.

Aunque Polanco podría jugar esporádicamente como paracorto, trasladarlo al otro lado de la segunda base representará una mejoría defensiva, comparado con el venezolano Luis Arráez. Y el brazo y el alcance que a veces fueron problemáticos en las paradas cortas deben de encajar a la perfección en la nueva posición.

Los Mellizos esperan que una vez un saludable Polanco se aclimate a la posición – específicamente, jugar en el terreno corto del jardín derecho durante los shifts contra bateadores zurdos – jugará un rol bien importante en lo que esperan sea una defensa mucho mejor en el cuadro.

“Tienes a un shortstop jugando segunda”, dijo Díaz. “Y cuando tienes a un shortstop legitimo en la segunda, creo que va a causar un impacto”.

“Creo que puedo ser un tremendo segunda base”, sentenció Polanco.