Rays: Astucia, profundidad y sabor latino

6 de octubre de 2021

ST. PETERSBURG – Cuando los Rays cambiaron durante el invierno a Blake Snell a los Padres y dejaron partir vía la agencia libre a Charlie Morton—dos pilares de la edición del 2020 que tuvo marca de 40-20 y luego llegó hasta el Juego 6 de la Serie Mundial—muchos pronosticaron que Tampa Bay daría un paso para atrás este año.

Sin embargo, los Rays del 2021—con la quinta menor nómina de Grandes Ligas al iniciar el año, según Spotrac--nos dieron una lección que debimos aprender hace mucho tiempo: Jamás se debe subestimar la calidad de la organización de Tampa Bay, ni la estrategia gerencial de Matt Silverman, Erik Neander y los demás “cerebros” del Tropicana Field.

Si los campeones Dodgers (manejados desde la gerencia por el ex GG de Tampa Bay, Andrew Freidman) son los reyes de la profundidad en la Liga Nacional, los Rays lo son en la Americana. La tropa dirigida por Kevin Cash utilizó un total de 61 jugadores en la campaña regular recién concluida, incluyendo 38 lanzadores, rumbo a la primera temporada de 100 victorias en la historia del club. Monarcas del Este de la Liga Americana por segundo año consecutivo y participando en su tercera postemporada al hilo, Tampa Bay se prepara para medirse con los Medias Rojas a partir del jueves en la Serie Divisional de la Liga Americana.

PRODUCCIÓN OFENSIVA BIEN DISTRIBUIDA

Solamente los Astros anotaron más carreras en Grandes Ligas durante la campaña regular que los Rays (857), que contaron con 10 bateadores que produjeron cifras dobles en jonrones, incluyendo dos con más de 30 y dos más con al menos 20.

De hecho, Tampa Bay es uno de los mayores ejemplos de los “tres resultados inevitables” de un turno al bate en los últimos años: Cuadrangular, ponche o base por bolas. Los Rays del 2021 terminaron en el cuarto lugar (junto a los Yankees) de la Liga Americana en vuelacercas con 222, negociaron la tercera mayor cantidad de bases por bolas del circuito con 585 y fueron el tercer equipo más “ponchado” de Grandes Ligas con 1,542.

No se puede criticar mucho los resultados de este ataque ofensivo, pero habrá que estar atento al factor ponche si Tampa Bay se topa con un pitcheo élite que limite el batazo largo.

BRAZOS Y MÁS BRAZOS

Casi 40 lanzadores pisaron la lomita de los disparos por Tampa Bay este año. Y para sorpresa de nadie, los Rays encabezaron la Liga Americana en efectividad colectiva con 3.67. Pionero del “opener” hace unos años, la escuadra de St. Petersburg tuvo el mejor promedio de carreras limpias colectivo del Joven Circuito de parte de sus relevistas esta campaña con 3.24 y la mayor cantidad de ponches desde su bullpen en las Grandes Ligas con 739.

Andrew Kittredge, Pete Fairbanks y Collin McHugh representan un “trio terrible” como relevistas de Tampa Bay, pero ahora se podrían agregar nombres como el colombiano Luis Patiño, Ryan Yarbrough y Michael Wacha a un profundo grupo que también incluye a Matt Wisler, David Robertson (otrora estelar de los Yankees) y JT Chargois.

Mucho cuidado si los Rays tienen la ventaja a partir del quinto episodio con abridores como los novatos Shane McClanahan y Shane Baz (programados para iniciar los Juegos 1 y 2 vs. Boston, respectivamente), más Drew Rasmussen.

MUCHO SABOR LATINO

El ataque ofensivo de los Rays cuenta con mucho poder latinoamericano. Los cubanos Randy Arozarena (20 HR, 20 bases robadas) y Yandy Díaz (13 HR) están acompañados ahora por los dominicanos Wander Franco (racha récord de 43 juegos seguidos embasándose, OPS+ de 129) y Nelson Cruz (un total de 32 HR en el 2021), además de los también quisqueyanos Manuel Margot y Francisco Mejía.

Franco, prospecto número 1 del béisbol en la lista de MLB Pipeline hasta que fue subido este mismo año, no decepcionó para nada. De su parte, Cruz sólo tuvo OPS de .725 en 55 partidos con Tampa Bay, pero tiene amplia experiencia en playoffs y aporta un liderazgo importante. Y ni hablar de los récords que puso Arozarena en la postemporada del 2020 y los batazos importantes de Díaz en los playoffs del 2019 contra Oakland y Houston.

Del otro lado, Patiño se perfila como una valiosa pieza desde el bullpen, ahora con la oportunidad de darle 100% con la recta durante una entrada o dos.