Robert con los pies sobre la tierra en White Sox

7 de julio de 2020

CHICAGO – En los análisis previos a la temporada del 2020 en Grandes Ligas, surgía el nombre de Luis Robert en torno a los pronósticos para el premio al Novato del Año.

Algunos se han atrevido a afirmar que el jardinero cubano será una de las próximas superestrellas de las Mayores. Sin embargo, esa clase de elogios no alteran la forma de pensar de Robert, un jugador de las cinco herramientas del béisbol.

“Sí, veo todo eso”, dijo Roberto, programado para ser el guardabosque central de los White Sox como novato. “Trato de no hacerle mucho caso. Sé de lo que soy capaz y a veces si uno escucha todo eso, va a tener más presión y eso no conviene. Es bueno que la gente esté hablando bien de uno, pero trato de no hacerle mucho caso”.

Los elogios se ven justificados cuando uno observa a Robert durante las prácticas de bateo en el Guaranteed Rate Field en los entrenamientos veraniegos. El guardabosque tiene el talento para dar 30 jonrones y robarse 30 bases en una temporada normal. Además, sería un bateador de .300 que estabilizaría el jardín central a la defensa.

Los números de Robert en liga menor el año pasado fueron dignos de un Jugador Más Valioso: Promedio de .328, OPS de 1.001, 36 bases robadas, 32 cuadrangulares, 108 anotadas y 92 empujadas entre tres niveles. Ahora bien, Robert como atleta se ve más como un jugador de fútbol americano con sus seis pies y dos pulgadas de estatura y 210 libras.

“Se puede encontrar cosas buenas y malas en esta situación”, dijo Robert acerca de la inusual campaña del 2020. “Con todo lo que está pasando, tendré casi un mes para entrenar en el estadio antes de la temporada y eso es una ventaja. De verdad, me gusta el estadio”.

Robert firmó con los White Sox el 27 de mayo del 2017, con un contrato que incluyó un bono de US$26 millones al firmar. El 2 de enero de este año, el cubano firmó una extensión de contrato de seis campañas y US$50 millones—todo antes de ver un solo pitcheo a nivel de Grandes Ligas.

Los cubanos José Abreu y Yoán Moncada, además del dominicano Eloy Jiménez, se encargarán de fungir como guías para Robert este año. Jiménez se recuperó de un lento comienzo en el 2019 en medio de grandes expectativas. En ese sentido, podría ser de gran ayuda para Robert. Pero claro, en el 2020 habrá menos tiempo para hacer los ajustes. Robert no parece estar preocupado.

“Tendrá que hacer (los ajustes) lo más rápido posible”, dijo el novato. “Pero una vez comience la temporada, una vez empiece a saber lo que necesite mejorar en los tiempos difíciles, ya sabré qué hacer.

“Mis expectativas y metas siempre son las mismas: Dar el 100% en el terreno, ayudar al equipo lo más posible e ir, esperamos, a la postemporada. Y, si tengo suerte, ser Novato del Año. Ésas son mis metas y si me mantengo en salud, confío en poder hacerlo”.