Roberto tras la cirugía: “Soy un guerrero”

12 de mayo de 2021

CLEVELAND -- ¿Podrá el dedo fracturado del receptor puertorriqueño Roberto Pérez ser un presagio de que el equipo se está preparando para una temporada similar a la del 2016? 

Al principio de mayo del 2016, Pérez necesitó someterse a una cirugía para reparar una fractura en un pulgar, lo que le permite familiarizarse con la situación actual. Casi cinco años después, Pérez pasó por el quirófano por una fractura en el dedo anular derecho. Cuando volvió en el 2016, el equipo estaba en medio de una campaña mágica. Las similitudes entre ambas temporadas van más allá de las lesiones del boricua. 

“Fue un año divertido y creo que el 2021 se parece al 2016, con los muchachos pasándola bien y con un gran pitcheo”, dijo Pérez. “Se siente en el ambiente, el clubhouse, las vibras. Lo único que quiero para ellos es que salgan y sigan jugando de la misma manera. Y que sigan divirtiéndose como han venido haciéndolo. Es un año largo, pero hasta ahora parece que todo está saliendo bien. Nuestro cuerpo de lanzadores está ahí, estamos dando batazos oportunos. Esperemos seguir así y que nos vaya bien”. 

Incluso cuando está rehabilitándose de la cirugía, Pérez espera que los protocolos de COVID-19 le permitan viajar y acompañar a sus compañeros. Se sometió al procedimiento el viernes luego cruzarse con un pitcheo de James Karinchak el 13 de abril en Chicago. Cuando Pérez esperaba una recta, el pitcheo rompió y le pegó en el dedo mientras reaccionaba. Supo que se había fracturado y vio dónde empezó a hincharse, pero esperaba poder evitar una cirugía. 

“Para ser honesto, pensé que sólo descansaría. Al menos por un par de semanas para ver si bajaba la hinchazón”, confesó Pérez. “Realmente no pensé que necesitaría cirugía. Pero cuando hicimos los segundos rayos-X, nos dimos cuenta de que ésa era la mejor opción. No queríamos esperar... creo que era la mejor opción y espero regresar en ocho semanas”. 

Pérez intentó jugar 11 partidos más tras sufrir la lesión. Aunque continuó recibiendo fouls detrás del plato, agarrar el bate resultó ser lo más problemático. Luego de la fractura, bateó de 40-3 (.075) con un jonrón, un doble y 19 ponches. 

“Soy un guerrero”, dijo Pérez. “Siempre encuentro la manera de continuar en el terreno y estar con los muchachos. Pero al seguir jugando y hacer swing -- más bateando que lanzando – fue que nos dimos cuenta una o dos semanas después de que estaba fracturado”. 

Pérez ahora necesita dejar atrás las frustraciones y enfocarse en regresar al terreno en salud. No sólo ya pasó una experiencia similar en el 2016, sino que no ha tenido una temporada completamente saludable desde que se encargó de la receptoría a tiempo completo en el 2019, cuando jugó con un espolón en un tobillo. Luego, en el 2020 tuvo problemas en el hombro derecho que lo llevaron a la lista de lesionados. Justo cuando estaba teniendo una campaña con la salud de su lado, una extraña jugada lo deja fuera durante un período de entre ocho y 10 semanas. 

“Diría que es frustrante. Al menos para mí”, dijo Pérez. “Especialmente este año, porque trabajé bien duro en el receso de campaña para estar en buenas condiciones físicas y me sentí bien en los entrenamientos. Estaba saludable. Pero al mismo tiempo, uso esto como motivación... no tengo más que decir. Sólo que trabajaré lo más duro que pueda para regresar cuanto antes y seguir ayudando al equipo a ganar”.