HOUSTON – Cuando los Medias Rojas llegaron al octavo inning del Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana el martes por la noche en el Fenway Park, ganaban el partido 2-1 y estaban a ley de seis outs para poner contra la pared a los Astros en la lucha por llegar a la Serie Mundial.

De ahí en adelante, empezando con un jonrón del venezolano José Altuve para empatar aquel choque, Houston aventajó a Boston por 22-1 en el marcador global. Ese dominio culminó con un triunfo por 5-0 de los Siderales sobre los Patirrojos el viernes en el Juego 6. De esa manera, los Astros eliminaron a los Medias Rojas para avanzar a su tercera Serie Mundial en los últimos cinco años.

“Ellos hicieron ajustes”, dijo el manager de los Medias Rojas, el puertorriqueño Alex Cora, elogiando el pitcheo de Houston. “Creo que fue a mediados del Juego 4 que ellos cambiaron. Usaron la recta en diferentes situaciones, especialmente los derechos. Y no pudimos alcanzar esa bola rápida.

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“Creo que desde mediados de ese juego, no pudimos alcanzar la recta y por eso no anotamos carreras”.

Es cierto, no anotaron carreras. Desde el primer episodio del Juego 4, cuando Xander Bogaerts le conectó un cuadrangular de dos carreras a Zack Greinke, Boston anotó una sola vuelta más en las siguientes 26.0 entradas, un bambinazo solitario del dominicano Rafael Devers frente a su compatriota Framber Valdez en el Juego 5.

Del otro lado, los bateadores de Houston descifraron los envíos de los relevistas de los Patirrojos y, como dice el dicho, el resto fue historia.

“Fuimos derrotados por un gran grupo de muchachos, un gran equipo”, dijo Cora. “Ése es muy buen equipo”.

Pocas personas esperaban que los Medias Rojas estuvieran a ley de dos triunfos de la Serie Mundial cuando se hicieron los pronósticos de la pretemporada este año. La mayoría proyectaba a Boston como un conjunto de cuarto lugar en el Este de la Liga Americana. Pero tras luchar todo el año e incluso superar la adversidad de un brote de COVID-19 en agosto y septiembre, los Patirrojos clasificaron en el último día de la campaña regular vía el Comodín. Acto seguido, eliminaron a los Yankees y sorprendieron a todos al despachar a los Rays en la Serie Divisional.

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“Teníamos mayores metas, para ser honesto”, dijo Cora. “Estoy bien orgulloso de este grupo. Es un grupo increíble. Es un grupo que siempre recordaremos.

“Fuimos derrotados al final, pero cuando reflexionemos sobre todo lo que pasamos, es increíble. Fue un gran año. Obviamente, estoy bien decepcionado de que no ganáramos esta serie, pero vamos a estar bien orgullosos de este grupo, esta organización y todos los que pudieron ser parte de esta operación a diario”.

Por supuesto, para Cora fue un regreso triunfal al timón de los Medias Rojas tras su suspensión de un año por su papel en el escándalo de robo de señas como coach de la banca de los Astros del 2017.

“Hubo muchas cosas buenas que pasaron no sólo a nivel profesional, sino también que pude ver a la gente disfrutar del béisbol otra vez. De eso se trata.

“A nivel personal, ha sido grandioso. Ha sido increíble”.