CLEARWATER, Florida - Odúbel sonrío y se tocó el estómago.
La barriga que tenía en los Entrenamientos Primaverales del 2018 ya no está. El venezolano se ha reportado este año más delgado, y el viernes por la mañana en el Spectrum Field dijo que está motivado a recuperarse tras la peor temporada en su carrera de cuatro años.
Herrera sabe que si quiere jugar todos los días en el 2019, debe demostrar su calidad en unos poblados jardines de los Filis. El manager Gabe Kapler dijo que está abierto a una competencia por el puesto de las praderas central y derecha entre Herrera, Nick Williams, Roman Quinn y Aaron Altherr. Andrew McCutchen jugará todos los días en la izquierda.
"Creo que la madurez de un jugador queda demostrada cuando sabes lo que hiciste mal y lo que necesitas hacer para mejorar", dijo Herrera. "Me dediqué en esta temporada muerta a mejorar, trabajar duro y comenzar temprano".
Herrera promedió .255 de bateo, disparó 22 jonrones y produjo 71 carreras con .730 de OPS en 597 turnos al bate el año pasado. Implantó topes personales en cuadrangulares y empujadas, pero a la vez su promedio de bateo, porcentaje de embasarse (.310), OPS, OPS+ (94), wRC+ (97) y WAR (0.9) fueron los peores de su carrera. Su WAR (victorias por encima del reemplazo) de 0.9 estuvo dos triunfos por debajo de las que logró en el 2017 y casi tres con respecto al 2015 y 2016, según FanGraphs.
Herrera no sólo tuvo problemas a la ofensiva, sino también sufrió un declive en su impresionante defensa. Dejó un -11 en Carreras Defensivas Salvadas, 15 por debajo de las que tuvo en el 2017 y 21 en comparación a su temporada de novato. Su -1 en Outs por Encima del Promedio del año pasado son 13 menos que en el 2017, según Statcast™.
Herrera perdió tiempo de juego el año pasado en el jardín central, a manos de Quinn.
"Definitivamente, hubo momentos en los que pude haberme enfocado más", dijo Herrera.
El venezolano de 27 años no tiene ninguna explicación por su falta de enfoque, aunque entiende que a veces es bueno tener jugadores y coaches ayudándolo. Los Filis apoyaron la individualidad de cada jugador el año pasado. Kapler dijo que quería "que los jugadores fueran ellos mismos y se sintieran orgullosos de ello", pero el manager llegó a los entrenamientos del 2019 con la frase clave de "hombro con hombro", que significa que los jugadores se apoyen entre ellos a asumir las responsabilidades necesarias.
Eso puede ayudar a Herrera, quien anteriormente contaba con el coach dominicano Juan Samuel y con los jugadores venezolanos Freddy Galvis y Andrés Blanco, quienes estaban constantemente a su lado--le gustara o no.
"Quieres tener a esa persona recordándote lo bueno que puedes ser y el talento que tienes", dijo Herrera.
"Para un jugador de béisbol, no es fácil mantenerse motivado. Obviamente, es una temporada larga, pero mi enfoque es mantener la concentración todo el año, a lo largo de los nueve innings de cada juego", dijo Herrera. "Siento que he aprendido de los errores que he cometido".
Los Filis se mantienen en la puja por Bryce Harper, lo que causaría un efecto inmediato en el planteamiento de los jardines. Williams podría cambiar de equipo, en ese caso, aunque Herrera también podría ser el jugador canjeado.
Firme o no Harper con Filadelfia, Herrera necesita mejorar su desempeño.
"No necesariamente porque Roman esté en el equipo ni porque perdí tiempo de juego el año pasado", dijo Herrera sobre su motivación. "Honestamente, se trata de mí y mejorar como jugador. Entiendo que este año hay más competencia, y honestamente creo que eso me hará mejorar. Eso saca lo mejor de mí, porque necesito jugar mejor. Tengo presión por producir y por mantenerme activo en el equipo".