Un saludable Kjerstad mira hacia el 2022
Al recordar el pasado año, Heston Kjerstad admitió el viernes que "no ha sido divertido", pero el prospecto de los Orioles de Baltimore está convencido de que superar la adversidad que trajo le dará una "ventaja" y que se avecinan mejores tiempos.
Marginado de la acción desde agosto de 2020 debido a una miocarditis, Kjerstad reanudó la actividad de béisbol el mes pasado en el campamento de instrucción de los Orioles en Sarasota, Florida, donde el prospecto número siete por MLB Pipeline permanece en un proceso de rehabilitación, pero ya no mira hacia atrás. Está concentrado en 2022 y el hacer su tan esperado debut profesional.
"Me siento realmente bien en este punto", dijo Kjerstad en una llamada de Zoom el viernes, hablando públicamente por primera vez desde la noche del Draft del 2020. "Durante el año pasado tuve que pasar por todas estas cosas, no fue divertido mentalmente. Fue bastante agotador. Soy joven. Nunca pensé en ser marginado por algo de esa naturaleza. Pero fue algo que los Orioles me ayudaron a superar, ver a muchos médicos excelentes que me dieron un gran plan a seguir, seguí esos pasos y pude hacerlo. Vi la luz al final del túnel todo el tiempo y ahora finalmente logré atravesar todos esos pasos, volviendo a jugar y sintiéndome genial".
Ha sido un proceso largo y lento para Kjerstad, la segunda selección general en el Draft del 2020. Más tarde ese verano, contrajo COVID-19 y poco después se le diagnosticó miocarditis, una inflamación viral del músculo cardíaco. Luego esperó, esperó y ... esperó.
Pasó un año completo antes de que los médicos autorizaran a Kjerstad a reanudar la actividad física en agosto. Regresó a las jaulas de bateo un mes después y avanzará a la práctica de bateo en vivo la próxima semana, dijo, con miras a llegar al entrenamiento primaveral del 2022 sin restricciones.
En total, si Kjerstad debuta como está previsto el próximo mes de abril, habrán pasado aproximadamente 22 meses desde que fue seleccionado. Jugó competitivamente por última vez en marzo de 2020 para la Universidad de Arkansas, donde fue uno de los mejores toleteros en la conferencia más competitiva del béisbol universitario.
Los Orioles firmaron a Kjerstad por menos del bono establecido al pactar por $5.2 millones en el puesto número 2, usando los ahorros para firmar a las selecciones de la escuela secundaria Coby Mayo y Carter Baumler por encima de las bonificaciones establecidas. Mayo parece una de las estrellas emergentes de la organización después de una exitosa primera temporada en la Clase A, mientras que Baumler está en camino a debutar en el 2022 luego de la cirugía de Tommy John.
"Me vuelvo a sentir como antes", dijo Kjerstad. “Creo que me va a dar un poco de ventaja en mi juego. Ahora tengo una perspectiva diferente de todo y más aprecio por el poder jugar y estar saludable y hacer lo que amo".
Mientras tanto, Kjerstad soportó una pausa fuera del juego que describió como un reto. Los síntomas de la miocarditis incluyen dificultad para respirar y fatiga, lo que requirió que Kjerstad evitara la actividad física. Pasó el tiempo involucrándose con el béisbol tanto como pudo, inundándose con juegos televisados y compilando tantas "repeticiones mentales" como fuera posible. Dijo que espera estar "a toda máquina" esta temporada baja, trabajando con las pesas con miras a recuperar el tiempo perdido en su desarrollo. Cumplirá 23 años en febrero.
"Es una experiencia realmente de humildad pasar por algo así a una edad temprana, especialmente en el punto de mi carrera en el que estaba", dijo Kjerstad. “Estaba listo para saltar a las ligas menores y llegar a las Grandes Ligas tan pronto como pudiera, y tuve que poner una pausa en eso. Fue un desafío. Pero ahora estoy de vuelta donde quería estar. Definitivamente traté de adquirir nuevos pasatiempos aquí y allá. Pero no pude encontrar nada por mucho tiempo, porque lo único que quería hacer era jugar béisbol y no podía hacerlo. Así que en el fondo de mi mente, eso era lo que realmente quería y nada más lo satisfacía realmente".