CLEVELAND -- El dominicano José Ramírez ha sido uno de los bateadores más productivos del lineup de los Indios esta temporada, pero su versatilidad ha resultado casi tan valiosa.
Con el segunda base regular Jason Kipnis fuera desde el 8 de julio con un tirón en la corva derecha, Ramírez ha jugado tanto en tercera base como en la intermedia, lo que le ha permitido a los Indios no tener que subir a otro pelotero para la banca y usar ese puesto para contar con un relevista extra.
En vez de tener sus usuales 13 bateadores en el roster de 25 peloteros, los Indios sólo tienen ahora en el banco a un infielder, un patrullero y un receptor. Ramírez es el gran responsable de que puedan darse ese lujo, pues ha jugado al menos 20 juegos en segunda, tercera y el jardín izquierdo las últimas dos temporadas.
"Es importantísimo", dijo el manager Terry Francona. "Incluso lo hablamos cuando firmó su contrato. Sólo queríamos asegurarnos que supiese que quizás lo íbamos a necesitar en varias posiciones en algún momento. No lo hace de mala gana, sólo va y lo hace y nos ayuda muchísimo".
Por ahora, Cleveland está utilizando una rotación de seis abridores tras el regreso del dominicano Danny Salazar, pero el bullpen sigue con sus siete lanzadores acostumbrados. Los Indios son el 3er equipo que menos ha utilizado el bullpen esta temporada y el pitcher adicional ayuda a evitar que utilicen demasiado a cualquiera de sus lanzadores clave.
"Yo creo que siempre te da un poco de tranquilidad tener suficiente pitcheo", dijo el coach de lanzadores Mike Callaway. "Lo último que uno quiere es poner a lanzar a gente que no debería ser utilizada ese día. Porque de golpe se te vienen dos juegos cerrados y ahora ya son tres días seguidos lanzando, y eso te ata de manos. O que un abridor tenga una salida corta, y entonces se te descuadra el bullpen para el fin de semana, cosas así".
Falta por ver por cuánto tiempo los Indios llevarán 13 lanzadores una vez que regrese Kipnis o la rotación vuelva a ser de cinco pitchers. Pero el brazo adicional será clave ahora que el equipo está en medio de una racha en la que disputarán 17 juegos en 17 días que comenzó el viernes.
"Yo sé que a Tito le gusta", dijo Callaway. "Nos da tranquilidad a todos. Le quita presión al abridor. Cuando tienes ese brazo extra las cosas se hacen más fáciles y les quita un poquito de presión".