En esta Época de Oro 2.0 para los torpederos, el puertorriqueño Francisco Lindor se cuece aparte en cuanto a su generación se refiere.

Otros campocortos contemporáneos como su compatriota Carlos Correa, Xander Bogaerts, Marcus Semien y Corey Seager han sabido brillar en determinados momentos, pero Lindor ha establecido el camino potencialmente más glorioso de este grupo. Sin importar cuándo salte al terreno de juego este año, Lindor ya ha acumulado 28 Victorias por Encima del Reemplazo (según Baseball-Reference) y ha disparado 130 cuadrangulares hasta su temporada con 25 años de edad. La lista de paracortos que lograron alcanzar ambas marcas antes de cumplir los 26 años sólo cuenta con tres nombres: Cal Ripken Jr., Alex Rodríguez y Lindor.

Esa clase de inicio de carrera por parte del boricua nos hace pensar en lo que sucedería de aquí a 15 o 20 años más, cuando Lindor podría subir al podio para ser entronizado en Cooperstown mientras sostiene su placa del Salón de la Fama. ¿Nos estamos apresurando? Bueno, los sistemas de proyección también han empezado a “soñar”. Esto es lo que Dan Szymborski de FanGraphs, creador del sistema ZiPS, escribió en su previo de los Indios para el 2020:

“... Lindor lleva una trayectoria hacia el Salón de la Fama, y ZiPS lo tiene proyectado para terminar con alrededor de 80 WAR, una línea ofensiva de por vida de .279/.339/.490, 443 cuadrangulares y 2,600 hits”.

Los únicos tres torpederos de la era moderna que superaron la marca de 80-WAR son A-Rod (quien jugó una buena parte de sus encuentros en dicha posición), Ripken y Honus Wagner. Por lo tanto, ese punto de referencia – salvo cualquier cosa que pase fuera del terreno – prácticamente te asegura un lugar en el Salón de la Fama. A continuación, tres potenciales trayectorias en la carrera de Lindor, con un techo, un piso y un punto medio. (Presumimos que Lindor se mantendrá en buena forma al menos hasta los 30 años de edad, con la esperanza de que el pico de sus habilidades se alargue más allá de eso).

El techo: Cal Ripken Jr. (95.9 Victorias por Encima del Reemplazo)

¿Por qué no inclinarnos por el prototipo del torpedero de poder original? Pedirle a Lindor que emule la longevidad del “Hombre de Hierro” es una tarea extremadamente difícil, pero sus carreras lucen bastante similares en el comienzo. Cada estrella estableció rápidamente su fama como “chocador” de pelota en sus posiciones y se transformó en cañonero en la parte gruesa de los lineups de sus equipos.

Ripken hasta los 25 años de edad (1981-1986): .289/.351/.483; 129 de OPS+, 133 HR, 11 bases robadas, 34.6 de bWAR

Lindor hasta los 25 años de edad (2015-2019): .288/.347/.493; 119 de OPS+, 130 HR, 93 bases robadas, 27.6 de bWAR

A esta altura de su carrera, Ripken ya había jugado 130 juegos más que Lindor, dando señales de la durabilidad que lo definiría. Pero mientras el poder de Cal se destacó un poco más en una época no tan propensa a los cuadrangulares, Lindor ha integrado otro atributo con su velocidad de piernas. El boricua es una amenaza legítima para conectar 30 bambinazos y estafarse 30 bases en los próximos años, una hazaña que sólo cuatro campocortos han logrado (Rodríguez, Barry Larkin, el dominicano Hanley Ramírez y Jimmy Rollins).

Ripken fue el Novato del Año en la Liga Americana en 1982 y capturó el primero de sus dos premios al JMV al año siguiente en su temporada con 22 años de edad. Comenzando con esa campaña de 1983 y extendiéndose por las próximas diez campañas, Ripken produjo un WAR menor a 4 una sola vez y superó la marca de los 20 vuelacercas en nueve ocasiones. Mientras que Lindor no ha igualado a Cal en el departamento de premios ganados, es fácil imaginarse al boricua igualar ese mismo nivel de consistencia hasta su 30mo cumpleaños.

Y no se olviden de la defensa. Mientras que las estadísticas avanzadas lucen un tanto vagas cuando observamos la era de Ripken, su WAR defensivo total hasta la edad de 25 años (11.3) no está tan lejos de la marca de Lindor (8.9) a esta altura de su carrera.

El piso: Troy Tulowitzki (44.5 WAR)

Una posición tan exigente como lo es el campo corto puede crear algunas variaciones más amplias después de que un jugador llega a los 30 años de edad, y Tulowitzki es el ejemplo perfecto. Debido a que ya ha pasado algo de tiempo, muchos pensaban que “Tulo” tenía la trayectoria para poder llegar al Salón de la Fama, antes de que las lesiones mermaran su desempeño.

Tulowitzki hasta los 25 años de edad (2006-2010): .290/.362/.495; 114 de OPS+, 92 HR, 42 bases robadas, 20.4 de bWAR

Tulowitzki fue un jugador productivo quizás por más tiempo del que uno pensaría. En el 2014, por ejemplo, acumuló WAR de casi 6 en solamente 91 partidos (su tercer total más alto en cualquier temporada de 100 juegos o más) antes de someterse a una operación ese verano. Tristemente, dicha cirugía fue el suceso que marcó el antes y después en la prometedora carrera de Tulo, aunque el torpedero logró tener una temporada productiva más en el 2016 (24 HR, 3.3 de bWAR) antes de que ya no fuera el mismo.

El WAR de por vida de Tulowitzki se estableció justo alrededor de 40 – la mitad del promedio que ZiPS proyecta para Lindor – hasta su campaña con 30 años de edad, luego una serie de lesiones en la parte inferior del cuerpo acabaran con las esperanzas de una prometedora segunda mitad en su carrera en las Mayores. Mientras que Lindor ha tenido un inicio de carrera más prolífico que el de Tulowitzki, la ex estrella de los Rockies y Azulejos es un ejemplo desafortunado de que la carrera de un pelotero puede desmoronarse rápidamente – incluso en los casos de las estrellas más brillantes. Aun así, mientras que dicho desenlace sería decepcionante basándonos en lo que hemos visto de Lindor hasta ahora, un destino similar al de Tulo (cinco veces convocado al Juego de Estrellas, tres veces dentro del Top-10 en las votaciones para JMV) todavía constituiría una excelente carrera.

El promedio: Barry Larkin (70.5 WAR)

Larkin podría verse opacado por los A-Rod, Nomar, Jeter y la camada reciente de paracortos que le siguieron, pero fue una estrella bien confiable en los años 90 y una selección lógica para el Salón de la Fama cuando se retiró después de la temporada del 2004.

Larkin hasta los 25 años de edad (1986-1989): .289/.338/.413; 106 de OPS+, 31 HR, 79 bases robadas, 13.6 de WAR

No hay duda de que Lindor ha tenido un mejor inicio de carrera. Su poder evolucionó más rápido que el de Larkin, aunque tampoco existe duda de que Lindor está disfrutando de un ambiente más propicio para los cuadrangulares y slugging. Si Lindor hubiese iniciado su carrera en las Mayores a principios de los 80, se le podrían haber exigido más acciones que involucrasen el béisbol de fundamentos o “béisbol pequeño” (nótese los 10 toques de sacrifico que Larkin ejecutó en 1988). Cuando ajustamos los diferentes ambientes a la ofensiva a través del prisma de las estadísticas ajustadas a la era de FanGraphs, las líneas ofensivas de ambas estrellas lucen más parejas.

Lindor hasta los 25 años de edad: 113 de BA+, 108 de OBP+, 116 de SLG+

Larkin hasta los 25 años de edad: 112 de BA+, 104 de OBP+, 106 de SLG+

Ambos torpederos también lucen similares en su juego general. Larkin es uno de esos cuatro campocortos con temporadas de 30-30 que mencionamos al inicio, y también era una amenaza para robarse 20 bases (con marca personal de 51 estafas durante su temporada de JMV en la L.N. en 1995) hasta su campaña de 35 años de edad. Al igual que Lindor, Larkin también aportó bastante valor a la defensa al adjudicarse tres Guantes de Oro. Donde Larkin podría realmente inspirar a Lindor – en comparación con el cara a cara vs. Tulowitzki – es en el departamento de durabilidad. Al igual que Tulo, Larkin se acercaba a la marca de 40 de WAR después de concluir su campaña de 30 años de edad en 1994. Pero también fue casi igualmente productivo en sus treinta, acumulando cuatro campañas con WAR de 5 o más en los siguientes cinco años (incluyendo esa temporada de JMV en 1995). Larkin no cayó por debajo del nivel de reemplazo sino hasta la edad de 37 años, e incluso fue convocado a un Juego de Estrellas más antes de retirarse a los 40 años.

En total, Larkin fue convocado a 12 Juegos de Estrellas, ganó nueve Bates de Plata, fue JMV una vez y acumuló WAR de 70. Lindor lleva paso de lograr más que eso, pero incluso un “regreso a lo normal” a fin de cuentas -- con Larkin representando ese “normal” – todavía le daría al puertorriqueño un boleto a Cooperstown. Ésa es la clase de calidad y talento que estamos viendo de la superestrella generacional de Cleveland.