Peralta endereza el barco…y pone la chispa

21 de abril de 2021

PHOENIX – A sus 33 años, David Peralta está produciendo cifras a la par de sus promedios en velocidad de salida, barriles y contacto duro. Y el jardinero venezolano de los Diamondbacks nunca ha dudado de su capacidad para rendir al bate.

Sin embargo, en sus primeros 11 partidos del 2021, los resultados no se vieron nada bien. En ese lapso, Peralta bateó de 41-8 (.195) con dos extrabases. Pero en sus últimos tres juegos, lleva de 10-4 (.400) con tres bases por bolas (dos intencionales) y porcentaje de embasarse de .538.

Poco a poco, el veterano parece estar enderezando el barco.

“Definitivamente, no es el inicio que yo quería, pero hay que seguir trabajando duro para definir cómo quiero estar en el home plate. Al mismo tiempo, cada vez que vengo al estadio, trabajo en las cosas para reponerme. Está volviendo”.

Afirma Peralta que ha hecho pequeños ajustes en su cuadre en la caja de bateo y en la posición de las manos. El valenciano ha expresado que en la joven campaña del 2021, en ocasiones le ha faltado algo de timing.

“Es cuestión de estar a tiempo”, dijo. “Creo que si estoy encima de la bola a tiempo, voy a estar ejecutando mejor. No es que esté tirándole a malos pitcheos, sino que estoy fallando pitcheos. No puedo estar fallándole a esos pitcheos. Son pitcheos que sé que puedo vapulear”.

Un aspecto digno de notar a la hora de ver el bateo de Peralta en el 2021 ha sido su tasa de roletazos, que era del 56.5% al iniciar la acción del miércoles, comparada con su cifra del 51.9% de por vida. Reconoce el guardabosque que eso ha sido un tema a seguir a la hora de hacer los ajustes.

“Estoy dándole por el suelo, porque estoy un poquito tarde”, explicó. “De eso se trata el timing. Si estoy más a tiempo, voy a poder darle con fuerza a la bola. Tengo que estar bajo control y a tiempo para poder darle a los canales”.

Un aspecto del bateo que ha estado de moda en los últimos años es el famoso “launch angle” (ángulo de despegue), en el que los bateadores intentan levantar la bola con swings hacia arriba. Por supuesto, ése ha sido un factor en el aumento colectivo tanto de jonrones como de ponches en tiempos recientes en las Mayores.

En el caso de Peralta, ha producido 1.1 grado en ese sentido en la breve muestra del 2021, lo cual ayuda a explicar su tasa de rodados. De hecho, desde la implementación de Statcast en el 2015, Peralta tiene un ángulo de despegue promedio de 6.0 grados, el décimo menor entre los bateadores con al menos 1,500 bolas puestas en juego en ese lapso.

Pero el venezolano no piensa cambiar su forma, que mayormente lo ha mantenido entre 6.0 y 7.0 grados en ángulo de despegue.

“Para ser sincero, yo no le presto mucha atención a launch angle”, dijo Peralta, quien llegó al miércoles con una línea general de .211/.297/.368 en 64 visitas al plato del 2021, con dos dobles, dos triples, un cuadrangular y ocho empujadas. “No es mi forma de batear. Yo soy una persona ‘gap to gap’ (de canal en canal) y de muchas líneas. Si tú puedes ver la mayoría de los batazos míos, los jonrones son de línea. Si me pongo en la cabeza que quiero levantar la pelota, voy a dañar mi mecánica. Entonces, yo voy a seguir haciendo lo que me trajo aquí a las Grandes Ligas y jugando los años que he jugado”.

LÍDER DEL BAILE DE LA VICTORIA

Los Diamondbacks llegaron al miércoles con marca de 6-10. Pero cuando han ganado, han gozado, con un baile especial a ritmo de la canción “El Juidero”, de Chimbala X Bulín 47. Peralta es el líder de la celebración, junto a su compatriota Eduardo Escobar, en el clubhouse de Arizona para festejar a la estrella del partido.

Ése ha sido el estilo de Peralta, quien desde su debut en Grandes Ligas en el 2014 se convirtió poco a poco en uno de los líderes del equipo del desierto--hasta el punto de ser ahora el jugador que más tiempo lleva con el club. Hace unos años, se trató del “Freight Train” (Tren de Carga) en las bases. Ahora es el “flow” en las fiestas del clubhouse.

“Decidimos hacer de eso nuestro baile de la victoria”, dijo Peralta. “Es divertido celebrar cuando ganas. Cuando ganas, tienes que divertirte y eso es lo que hacemos.

“No todos los días el equipo gana. Cuando lo hacemos, hay que celebrar. Nosotros celebramos con un baile que es muy divertido para nosotros. Así se mantiene el clubhouse y todo el equipo unido”.

HISTORIA DIGNA DE ADMIRAR

A esta altura, es de amplio conocimiento la trayectoria de Peralta hacia las Grandes Ligas, primero en el sistema de los Cardenales como lanzador que no pudo llegar debido a las lesiones y luego como jardinero/bateador en ligas independientes, con un destino final en Arizona como exitoso jugador de posición.

En medio de los logros en los Diamondbacks, que incluyen tanto un Bate de Plata como un Guante de Oro, Peralta jamás olvida la lucha necesaria para que pudiera cumplir su sueño.

“Son frutos de todo el trabajo que yo he hecho, toda la dedicación y la disciplina que yo he tenido”, reflexionó Peralta. “Para mí, son muchos logros y mucho orgullo. Es un orgullo y un ejemplo a seguir para darle a todos esos jóvenes de que sí se puede, que nunca se puede rendir. (Hay que seguir) trabajando y siendo disciplinado para lograr las metas que uno quiere”.