¿Cómo pudieron los Mets firmar a Edwin tan rápido?

12 de noviembre de 2022

NUEVA YORK -- A principios de semana, los Mets concretaron su contrato récord de cinco años y US$102 millones con el cerrador boricua Edwin Díaz, tachando así uno de los mayores pendientes de su lista invernal. Pero, ¿por qué ahora? ¿Cómo lograron acordar Díaz y los Mets un contrato tan enorme tan rápido? ¿Y qué significa eso para el resto de los planes del equipo?

Analicemos la idea detrás del contrato de Díaz:

¿Cómo pudieron los Mets asegurar los servicios de Díaz antes de que empezara la agencia libre?

Aunque no es común que un agente libre deje ir la oportunidad de conversar con los demás 29 equipos, la situación de Díaz era singular.

Antes de que terminara la temporada, los Mets le dejaron saber a Díaz y a su representante, Joel Wolfe, que querían renovar con él. De su parte, Díaz le informó al equipo que quería permanecer en Nueva York. Dado que los Mets tienen por lo menos media docena de huecos en el bullpen por llenar este invierno, era importante que llenaran el más grande lo más rápido posible. En otras palabras, no había razón para que ninguna de las dos partes se pusiera a comparar opciones. Siempre y cuando los Mets hicieran una oferta justa de acuerdo con el mercado, lo cual hicieron al otorgarle a Díaz al contrato más jugoso en la historia de Grandes Ligas para un relevista, la situación era ideal para resolverse rápido.

“Él quería que llegáramos a un acuerdo”, dijo el gerente general de los Mets, Billy Eppler. “Quería quedarse aquí. Fue muy directo al respecto desde el principio, así que sentíamos que era una buena combinación”.

¿Es realmente un buen contrato?

No se puede negar que el historial de los contratos a largo plazo para los relevistas no es bueno. Es una posición volátil, como el propio Díaz demostró luego de pasar de ser uno de los peores cerradores de las Mayores en el 2019 a uno de los mejores en el 2022. Fuera del panameño Mariano Rivera, pocos cerradores de un inning en la historia han hilado media década o más de rendimiento élite.

Sin embargo, Díaz tiene varios factores a su favor. Uno es el hecho de que tiene apenas 28 años y tendrá 33 cuando reciba todo el dinero garantizado en su contrato. Muchos relevistas se han mantenido firmes más allá de esa edad. Las métricas subyacentes indican que, aun si Díaz da un paso hacia atrás durante su contrato, tendría mucho valor.

La mejor comparación sería el cubano Aroldis Chapman, quien de inmediato dio paso hacia atrás tras firmar con los Yankees por cinco años después de un 2016 sensacional. Pero Chapman, como Díaz, venía de un nivel tan alto que aun cuando mermó, salvó 124 juegos y tuvo efectividad de 2.82 y EFE+ de 155 en esas cinco temporadas. Es razonable pensar que Díaz pondría números parecidos, aun si no mantuviera el dominio que demostró este año.

“Nos sentíamos cómodos con el jugador”, dijo Eppler. “Estuvimos cómodos sobre dónde se encontraba en su carrera, dónde se encontraba en su trayectoria y lo que se espera de acuerdo con su edad y todas esas variables que gobiernan esas decisiones”.

Y no hay que olvidar que el béisbol es un negocio. Díaz aportó en ese sentido con su música de entrada y todas las ventas de camisetas, trompetas de espuma y dólares de mercado que eso generó. De una forma, es probable que los Mets reciban una gran remuneración por su inversión en el puertorriqueño.

¿Y qué tal el resto del bullpen?

Ahora mismo, los Mets solamente cuentan con dos relevistas para el 2023: Díaz y Drew Smith, quien sigue bajo control contractual del equipo. Los Mets también ejercieron la opción de John Curtiss para el 2023. El ex relevista de los Rays perdió toda la temporada 2022 mientras se recuperaba de una cirugía Tommy John. El equipo también reclamó al zurdo Tayler Saucedo de la lista de waivers de los Azulejos. Ambos lanzadores representan posibilidades para el bullpen, junto con candidatos internos como el venezolano José Butto, el cubano Yoan López, Bryce Montes de Oca, Stephen Nogosek, Eric Orze y Josh Walker.

Digamos que los Mets comiencen el año con Díaz, Smith y tres de los otros ocho lanzadores antes mencionados en el bullpen. En ese caso, los Mets tendrían que sumar a tres o cuatro relevistas mediante cambios o firmas de agentes libres.

“Hay más trabajo por hacer y varios lanzadores que estamos dispuestos a agregar”, dijo Eppler. “Pero conseguir a alguien que sirva de ancla en la parte trasera del bullpen, y alguien que sea de fiar -- nuestro manager confía en él, nuestros fans confían en él, yo confío en él -- creo que todo el mundo se siente bien cuando entra corriendo al juego. Entonces, creo que eso fue una pieza grande”.