Lindor tiene a Beltrán como guía en N.Y.

14 de abril de 2021

NUEVA YORK – Antes de sumarse a los Mets este año, el puertorriqueño Francisco Lindor nunca se había tomado mucho tiempo para conocer la ciudad de Nueva York. Sus viajes a la Gran Manzana se habían limitado a los juegos de los Indios en el Yankee Stadium, dejándole poco tiempo para salir a divertirse.

Entonces, cuando Lindor llegó a Nueva York, se consiguió a un guía turístico: Su compatriota Carlos Beltrán, quien pasó casi la mitad de su carrera de dos décadas en Nueva York y todavía vive en la ciudad. Beltrán y su esposa, Jessica, ayudaron recientemente a Lindor y a su prometida, Katia, a encontrar un lugar para vivir en Nueva York.

“Estuvimos hablando un buen tiempo y también comimos”, dijo Lindor. “Mi novia conoció a Jessica. Fue bien agradable. Todo estuvo muy bien. Beltrán ha sido un gran mentor en mi carrera”.

Beltrán ha mantenido un bajo perfil desde que él y los Mets cortaron vínculos en enero del 2020, tres meses después de que el equipo lo nombrara manager. De cualquier forma, sigue siendo una gran influencia en el mundo de las Grandes Ligas, especialmente entre los jugadores boricuas.

“Habló conmigo antes de que comenzara la temporada, justo después de que me cambiaron”, reveló Lindor. “Lo que me dijo fue, ‘Sé tú mismo, sé honesto contigo mismo y con los demás. Asume la responsabilidad en todo lo que hagas y disfruta lo que haces. Estás en una gran ciudad. La organización está en un gran momento, así que diviértete. Sal al terreno y da todo lo que tienes todos los días”.

Aunque los recientes partidos suspendidos de los Mets le han dado a Lindor suficiente tiempo libre para aclimatarse a su nuevo hogar, todavía no ha salido mucho a explorar. Lindor, quien recibió su primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 el jueves pasado, afirmó que quiere esperar que le pongan la segunda inyección antes de moverse más tranquilo por la ciudad.

Cuando lo haga, tiene previsto dejar que sea Katie quien lleve la iniciativa, pues su prometida está interesada en visitar museos y galerías de arte en la Gran Manzana. A Lindor le interesa más conocer la oferta de restaurantes.

“Me encanta comer”, dijo. “Si la gente tiene recomendaciones, que me las manden”.

En ese sentido, Lindor planea hacer de Nueva York su nuevo hogar, aunque más allá de la escena gastronómica y el tour cultural por la ciudad, no tiene planes inmediatos para gastar una porción grande de su nuevo contrato de US$341 millones.

“Le doy gracias al Señor. Tenía una gran vida antes de firmar y compré un montón de cosas”, dijo Lindor entre risas. “Gasté mucho dinero en las cosas más tontas del mundo. Ya pasé esa etapa de mi vida en la que gastas como loco. Ya he pasado por eso. Tengo una familia, mi prometida, una niña pequeña. Tengo que procurar hacer las cosas bien por ellas. Puede que compre algún terreno, casas. Vamos a ver. Me encantan los carros y los relojes, tengo muchísimos”.