ST. PETERSBURG -- El abridor de los Azulejos, Aaron Sánchez, se subió nuevamente a un montículo el domingo parar realizar una sesión del bullpen de 33 pitcheos sin ningún limitante, como parte de su recuperación tras partirse una uña en la mano derecha.
Sánchez, quien tiene récord de 0-1 y 4.05 de efectividad en tres aperturas, dijo que pudo tirar todos sus pitcheos sin ningún tipo de dolor, incluida su curva, el lanzamiento que le había dado más problemas. El plan ahora es que abra el martes un juego de entrenamientos primaverales extendidos antes de unirse nuevamente a los Azulejos durante la próxima serie en casa la semana que viene.
"Todo salió bien. No hay dolor en el dedo", dijo Sánchez antes del juego del domingo ante los Rays. "Todos los pitcheos estaban saliendo fácilmente de la mano. Antes estaba teniendo un poco de miedo por la uña, pero los últimos cuatro o cinco días ya no ha habido inconvenientes".
El pitcher de 24 años fue retirado después de lanzar un solo inning en la victoria por 3-1 sobre los Rays en el Rogers Centre el 30 de abril, cuando el dedo -en donde ya había sufrido por una serie de ampollas que lo obligaron a ir a la lista de lesionados de 10 días- empezó a sangrar al partirse la uña de forma horizontal.