Central de la L.A.: ¿Quién tiene el mejor ojo?

2 de mayo de 2020

Ver la bola y hacer contacto. Suena simple, ¿no?

Los jugadores de las Mayores tienden a hacer que el juego se vea más sencillo de lo que en realidad es. Pero para darle a un lanzamiento que viene a 95 millas por hora se necesita tomar una decisión en fracciones de segundos sobre si hacerle o no swing. No por nada muchos consideran que batear es el arte más difícil que hay en cualquier deporte.

¿Cuál es el bateador con mejor ojo en la División Central de la Liga Americana? ¿Quién identifica mejor los lanzamientos? ¿Quién puede dejar pasar un pitcheo cerca de la zona con cuenta de 3-2 y negociar un boleto?

Examinémoslo:

Indios: Carlos Santana

En el Festival de la Tribu en enero del 2019, Santana subió al escenario y frente a los aficionados respondió preguntas sobre su juego. Una de las primeras preguntas fue cómo logró desarrollar uno de los mejores ojos de todo el béisbol, y su respuesta fue sencilla.

“Veo la bola”, dijo el dominicano. “Si es un strike, es un strike. Si es una bola, es una bola… muchos jugadores me preguntan cómo. No lo sé. No hay secretos, sigo la bola y si es strike, le hago swing, y si no, no”.

En 1,274 juegos con los Indios, Santana ha negociado 834 boletos, ubicándose tercero en la historia del club, por detrás de Jim Thome (1,008) y Tris Speaker (857). Incluyendo su único año con los Filis, las 944 bases por bolas del quisqueyano lo ubican de cuarto entre los jugadores activos. En el roster actual, Santana tiene el menor porcentaje de perseguir pitcheos o porcentaje de swings ante lanzamientos fuera de la zona de strikes. – Mandy Bell

Reales: Jorge Soler

¿Quién tiene el mejor ojo en los Reales? Ningún otro, sino el cañonero cubano Jorge Soler, quien lideró la Liga Americana e implantó un récord para la franquicia con 48 cuadrangulares en el 2019.

Soler también lideró a los Reales con 73 boletos el año pasado (sólo tres fueron intencionales), y aunque acumuló la mayor cantidad de ponches en la Americana con 178, es una cifra normal para un cañonero en la actualidad.

Lo que hace único a Soler es su criterio de selección. Su porcentaje de perseguir pitcheos fuera de la zona en el 2019, según Statcast, fue de 24%, muy por debajo de la media de Grandes Ligas de 28.3%. Algo que los Reales le han pedido en los últimos dos años es que sea más agresivo, y probablemente eso haya causado que tuviera un máximo en su carrera de 49.9% de batazos fuertes.

Los Reales también piensan que Soler ha sido víctima de conteos erróneos de bolas y strikes.

“Nadie conoce mejor la zona de strikes que Soler”, dijo el exmanager de los Reales Ned Yost. “No puedo decirte cuántas veces dudamos de una decisión y cuando revisamos el video, nos dimos cuenta de que Soler tenía la razón. Tiene un buen ojo y conocimiento de la zona”.

Los compañeros del cubano están de acuerdo.

“Si está reclamando un lanzamiento, tiene razón”, dijo el inicialista de los Reales, Ryan O’Hearn. – Jeffrey Flanagan.

Tigres: Isaac Paredes

El año pasado los Tigres se convirtieron en el primer equipo en la historia de Grandes Ligas que se ha ponchado en más de 1,550 ocasiones a la vez que ha negociado menos de 400 boletos. Entonces, el bateador con mejor ojo de la franquicia se encuentra en ligas menores, al menos por ahora.

El mexicano Isaac Paredes tuvo casi la misma cantidad de boletos (57) que ponches (61) en 552 visitas al bate el año pasado en Doble-A Erie, con uno de los menores porcentajes de perseguir pitcheos en las menores, demostrando la buena disciplina que tiene a sus 21 años. Tiene el poder necesario para tener un bate productivo en las Mayores. Debe recibir un chance pronto en la antesala, si Jeimer Candelario y Dawel Lugo tienen problemas. – Jason Beck

Mellizos: Max Kepler

Es por algo que ha fungido como primer bate en la alineación de Rocco Baldelli. Kepler no se aproximó al porcentaje de embasarse que tuvo el “Bomba Squad” el año pasado, pero los Mellizos prefieren mantener al patrullero en el tope de la alineación por su habilidad a la hora de hacer trabajar a los lanzadores. Kepler demostró un buen ojo con habilidad de dejar pasar pitcheos malos y hacer swing con sólido contacto ante los buenos lanzamientos.

Kepler tuvo un índice de boletos de 10.1% y 16.1% de ponches, lo cual lo hizo el único jugador de los Mellizos que rebasó las marcas colectivas de Grandes Ligas en ambos sentidos. Eso significa que negoció un mayor porcentaje de boletos y tuvo menos ponches. – Do Hyoung Park

Medias Blancas: Yasmani Grandal

Grandal estuvo limitado al dar sus primeros pasos con los Medias Blancas, debido en parte a una lesión en su pantorrilla izquierda en la pretemporada, antes de que la temporada fuera postergada por la pandemia del coronavirus. Pero entre sus talentos, el cubano ambidiestro tiene el mejor ojo del equipo. Tiene porcentaje de embasarse de por vida de .348, mientras que en el 2019 con los Cerveceros tuvo .380 y recibió 109 boletos. En las últimas dos temporadas ha acumulado 181 pasaportes.

Su compatriota Yoán Moncada sería otra excelente opción. Su buen ojo en el plato lo perjudicó en su primera temporada completa en el 2018, cuando vio muchos pitcheos. Estaba yéndose muy profundo en las cuentas de pitcheos y se ponchó 217 veces. Moncada mantuvo un buen ojo en el 2019, pero fue más agresivo atacando a los lanzadores temprano en la cuenta. – Scott Merkin