Carlos Correa exhibe mucho aplomo en grandes momentos

22 de junio de 2016

HOUSTON - Un momento de alta presión con el juego en la línea no molesta a Carlos Correa, torpedero de los Astros. De hecho, el puertorriqueño vive para eso.
"Quiero estar en esa situación todos los días", dijo Correa. "Me motiva sentir esa presión. Me siento cómodo en esa situación".
Por tercera ocasión en esta temporada, el joven de 21 años de edad tuvo la oportunidad de ganar el juego con el madeor y la aprovechó a plenitud.
El martes, le tocó hacerlo contra los Angelinos. Con las bases llenas y cuenta máxima sin outs en el cierre del noveno inning, Correa conectó un sencillo empujador de dos carreras para dejar en el terreno a Los Angeles-Anaheim y colocar a Houston en .500 (36-36) por primera vez desde el 6 de abril.
Fue el tercer batazo de oro de Correa en el 2016, la mayor cantidad en Grandes Ligas.
"No sé si creo en eso de bateadores del clutch", dijo el lanzador de los Astros, Colin McHugh. "Pero él está empezando a hacerme creer un poco".
El manager de Houston, A.J. Hinch, afirma que la mentalidad calmada de Correa es uno de los grandes motivos por sus éxitos en grandes momentos.
"Es muy calmado y muy confiado", dijo Hinch. "No me importa qué diga la pizarra. No me importa dónde la gente cree que deberían estar sus números. Con el juego en la línea, él va a ver un buen pitcheo y va a realizar un buen turno".
Durante la actual serie de juegos de los Astros en casa, Correa ha conectado tres jonrones y ha empujado siete carreras, bateando .333. También se ha visto con más poder, ya que el lunes rompió una cadena de nueve partidos consecutivos sin dar extrabase alguno.
Además de su batazo decisivo el martes, Correa hizo historia en el quinto inning del encuentro ante los Angelinos. En dicha entrada, dio jonrón solitario, su número 32 como torpedero. Ahora Correa se encuentra en el segundo lugar de dicho departamento en la historia de los Astros, superando al también boricua Dickie Thon. El récord pertenece a Adam Everett, quien dio 35 como paracorto de Houston entre el 2001 y el 2007.
En el caso de Correa, no está nada mal para un jugador que aún no cumple los 22 años de edad.
"Nada me sorprende de lo que hace Carlos Correa", dijo Hinch. "Ahora, su calma en grandes momentos empieza a convertirse en costumbre".