Ciudades tras clubes de MLB… y fracasaron

14 de enero de 2022

La expansión de equipos de MLB es siempre un tema tentador, porque nos permite soñar con nuevas posibilidades. Nuevos estadios, nuevos apodos, nuevos logos, nuevas rivalidades. La gente del béisbol suele charlar acerca de cuáles ciudades encajarían como sedes para un club de Grandes Ligas, ya sea el regreso del mejor béisbol del mundo a Montreal o una nueva franquicia en Las Vegas, Nashville, San Antonio, Charlotte, Portland, Vancouver o en cualquier otra ciudad que la gente se imagine.

En efecto, durante el tiempo que MLB ha existido, ha habido entidades interesadas en traer a un club de Grandes Ligas a nuevas sedes. El actual formato de 30 equipos incluye las historias de las sedes que han sobrevivido.

Sólo unos pocos ejemplos: Seattle recibió y perdió una franquicia de expansión en 1969, pero después recibió otra oportunidad de expansión en 1977. Milwaukee perdió a los Cerveceros y a los Bravos, pero recuperó a los Cerveceros tras arrebatarle la franquicia original a Seattle. Los Rays batallaron en grande, pero al final trajeron béisbol a Tampa Bay. Y el Metroplex de Dallas/Fort Worth fue rechazado en varias pujas por un equipo de expansión, antes de que los Senadores de Washington se mudaran ahí para convertirse en los Rangers previo a la campaña de 1972.

Pero, ¿qué pasó con las ciudades que no han podido tener una franquicia de Grandes Ligas?

A continuación, un grupo de sedes que llegaron a ser fuertemente consideradas pero que al final se quedaron con las manos vacías.

Louisville, Kentucky
Muchos de ustedes saben que los Atléticos se mudaron de Kansas City a Oakland previo a la temporada de 1968. Pero lo que quizás no sepan es que existieron otras potenciales sedes de reubicación para el equipo que precedieron ese cambio de residencia.

Frustrado con el arrendamiento del Estadio Municipal de Kansas City, propiedad de la misma ciudad, el propietario de los Atléticos, Charlie Finley, salió en busca de potenciales sedes para reubicarse. Una puja para mudarse a Dallas fue desechada por los otros dueños de los equipos de la Liga Americana en 1962. También se habló de un posible traslado a Seattle o Milwaukee. Finley incluso fantaseó con la posibilidad (completamente absurda e improbable) de mudar al equipo a la pequeña población de Peculiar, Missouri, ubicada a unos 45 minutos al sur de Kansas City, y levantar gradas temporales en un pastizal.

Más seria era la idea de trasladar a los Atléticos al estado de Kentucky.

Finley se entrevistó con el alcalde de Louisville, William Cowger, y con el gobernador de Kentucky, Edward Breathitt, y anunció que había firmado un contrato de alquiler por dos años para que su equipo utilizara el Fairgrounds Stadium como su casa. De nuevo, los propietarios de los clubes de la Liga Americana rechazaron la propuesta. Cuando Finley planteó la idea de firmar un acuerdo de 20 años con la ciudad de Oakland para mudar al equipo a un estadio que aún estaba por construirse, los dueños también la desecharon y amenazaron con expulsar a Finley de la liga si no aceptaba lo que para ellos era una propuesta de extensión de alquiler justa de parte de Kansas City.

Al final, Finley tuvo que ceder y firmar el contrato de cuatro años, pero, después de que éste expiró en 1967, la liga y los dueños finalmente dejaron que empacara y se mudara a Oakland. ¡Qué lástima!, Pero la casa donde se fabrican los famosos bates Louisville Slugger ha sido sede de varios equipos de las Ligas Negras, así como del equipo de ligas menores, Coroneles. La franquicia de ligas menores ahora conocida como los Murciélagos de Louisville ha estado en operación desde 1982.

Buffalo, Nueva York
Buffalo llegó a tener un equipo de MLB – a préstamo – cuando los Azulejos se combinaron para disputar 49 juegos de “local” en el Sahlen Field, sede de su filial de Triple-A Bisons (que han existido desde 1979), en las temporadas alteradas por la pandemia del 2020 y del 2021. Pero esta ciudad ya había tenido a una franquicia de la Liga Nacional – los originales Bisons -- de 1879 a 1885, otra variante de los Bisons en la Liga Americana en 1900 (antes de que se convirtiera en Liga Mayor al año siguiente), así como a los BufFeds y Blues en 1914-15 en la Liga Federal (la cual es reconocida como Liga Mayor).

Y el War Memorial Stadium de Buffalo fue utilizado como sede de los ficticios “Caballeros de Nueva York” o “New York Knights” en el rodaje de la película “El Natural”, que tiene que contar para algo.

Pero varios esfuerzos por conseguir una franquicia de la Liga Americana o de la Nacional con base en Buffalo en la era moderna han fracasado. Como se detalla en este artículo sobre los volátiles primeros años de los Padres, Buffalo inicialmente tenía el apoyo de los propietarios de la Liga Nacional para recibir a una de dos franquicias de expansión en 1969, pero algo de politiqueo de último minuto y presión desviaron ese voto hacia San Diego.

A mediados de los 80, Buffalo construyó el Sahlen Field (originalmente conocido como el Pilot Field) con instalaciones de Grandes Ligas con la esperanza de asegurar una franquicia de MLB, pero se perdió la oportunidad de expansión, que en cambio ganaron Denver (Rockies) y Miami (Marlins) para la temporada de 1993 y Arizona (D-backs) y St. Petersburg (Rays) para la campaña de 1998.

Indianápolis, Indiana
Indianápolis tiene una rica tradición de béisbol que comenzó en los años 1870, cuando los Indianápolis Blues se convirtieron en una franquicia de la Liga Nacional. Los Indios de Indianápolis (actualmente el equipo de Triple-A de los Piratas) debutaron como franquicia de la Asociación Americana en 1902. Indianápolis también tuvo una franquicia de las Ligas Negras -- los Clowns (Payasos) – que se estableció en los años 30 y fue el último equipo de las Ligas Negras disuelto en los años 80. 

En 1985, un grupo de inversionistas locales de Indianápolis tenía tanta esperanza de conseguir un equipo de Grandes Ligas, fuera por la vía del traslado (los Piratas y Atléticos estaban en venta) o la expansión, que realizaron una conferencia de prensa para anunciar el nombre del equipo. Los Potros de la NFL se acababan de mudar a Indianápolis el año anterior y hubo suficiente interés de los fans para asegurar depósitos para 12,000 abonos. 

Pero los Arrows (Flechas) de Indianápolis, como hubiesen sido llamados, nunca despegaron. Se determinó que reutilizar el Hoosier Dome para el béisbol sería un reto demasiado difícil y que generar los fondos para nuevas instalaciones sería imposible. La cercanía de ciudades como Cincinnati, San Luis y Chicago también provocó resistencia de parte de los dueños de esos equipos.

No fue la primera vez que la ciudad de Indianápolis fue rechazada como sede. Indianápolis, Kansas City, Minneapolis y Búfalo tenían equipos en la Liga Americana en 1900, que en ese momento era un circuito de liga menor. Cada uno de esos clubs quedó eliminado cuando el circuito se reorganizó como parte de las Grandes Ligas en 1901. Kansas City y Minneapolis eventualmente regresaron a la Liga Americana, pero lamentablemente no fue el caso de Indianápolis ni Búfalo. 

Arlington, Virginia
En los años antes de que los Expos se trasladaran a Washington D.C. y se convirtieran en los Nacionales, hubo un esfuerzo serio – y casi exitoso – para establecer un equipo de Grandes Ligas al cruzar el río de la capital estadounidense. 

Representantes del norte de Virginia le hicieron una propuesta al alto mando de Grandes Ligas en 1990, proponiendo sedes en Pentagon City. En lugar de ello, la liga siguió adelante con equipos de expansión en Miami y Denver en 1993, pero Virginia dejó buena presión. Cuando la conversación de la expansión se reanudó en 1995, Arlington estuvo entre cuatro finalistas para dos nuevos equipos, pero terminaron prevaleciendo Phoenix y St. Petersburg.

Cuando MLB tomó control de los Expos y buscó opciones para trasladarlos, Arlington hizo otra puja, proponiendo un estadio junto al Río Potomac con vistas de la capital. El plan contaba con el apoyo del presidente de la Junta del Condado de Arlington, Charles P. Monroe. Pero Monroe falleció repentinamente de una aneurisma a principios del 2003, por lo que la Junta tomó otro rumbo y Washington, D.C. se quedó con los Expos. 

Orlando, Florida
Como Arlington, la ciudad de Orlando fue descartada para un equipo de expansión en 1998. Aunque la decisión final se tomó en marzo de 1995, todo parecía estar en contra de Orlando. No había forma de que el área central de la Florida se hiciera de dos franquicias; entidades de Tampa Bay habían hecho seis intentos durante 18 años para comprar un equipo y trasladarlo a St. Petersburg, incluyendo a los Gigantes de San Francisco, transacción que los dueños de Grandes Ligas rechazaron en 1992. 

Por lo tanto, los dueños posiblemente sentían que le debían un equipo a Tampa Bay, por lo que se le dio prioridad.

A finales del 2019, el cofundador del Orlando Magic de la NBA, Pat Williams, realizó una rueda de prensa en la anunció su intención de crear un equipo de Grandes Ligas llamado los “Dreamers” (Soñadores), pero por ahora eso sigue siendo un sueño.

Nueva Orleáns, Louisiana
La reciente propuesta de los Rays de dividir sus juegos como locales entre Tampa Bay y Montreal es inusual, pero no sin precedentes.  

En 1971, el dueño de Cleveland, Vernon Stouffer, estaba corto de dinero y llegó a un acuerdo para que los Indios disputaran 30 juegos por temporada durante 25 años en Nueva Orleáns. El empresario David Dixon había conseguido fondos para el Superdome en un intento por atraer una franquicia de la NFL a Nueva Orleáns, pero fue diseñado para que sirviera también para béisbol y baloncesto.

Dixon y Stouffer le comunicaron su idea al presidente de la Liga Americana, Joe Cronin, y a los otros dueños, pero no fue aprobada.