Claves de un Juego 5 que podría terminar en una ansiada celebración

1 de noviembre de 2023

Resulta que Halloween no fue una noche llena de suspenso en la Serie Mundial. El Juego 4 estaba prácticamente definido para el final del tercer inning. Aunque los D-backs hicieron lo posible por regresar en los últimos innings, el resultado final de 11-7 luce mucho más cerrado de lo que realmente fue. Durante la mayor parte del juego, ambos clubes ya tenían la mente puesta en el Juego 5.

El miércoles podría ser el día en el que termine todo esto, con los Rangers – quienes han jugado en Texas desde 1972 – ganado el primer título en la historia de la franquicia. Claro, a menos de que los D-backs, quienes han estado al borde del precipicio antes en la postemporada, encuentren la manera de venir de atrás de nuevo. Pero por primera vez en el 2023, enfrentamos lo que podría ser el último juego del año.

Aquí las historias a seguir en el quinto duelo del Clásico de Otoño:

Rangers ante D-backs

Rangers lideran la SM 3-1
Nathan Eovaldi vs. Zac Gallen
8:03 p.m. ET, FOX

Primera historia: ¿Podrá uno de los candidatos al Cy Young contender a la potente ofensiva de Texas?

¿Recuerdan cuando nos preguntábamos cómo harían los Rangers para anotar carreras sin el cubano Adolis García en la alineación? Es curioso cómo una ventaja de 10-0 en el tercer inning te aclara tantas cosas.

Esa alineación es profunda y luce tan peligrosa como cuando García estaba en ella – quizás incluso más considerando que Marcus Semien parece haber encontrado el ritmo, luego de conectar un bambinazo de tres carreras el martes (impulsó cinco rayitas en el encuentro).

Pero en el Juego 5 los D-backs contarán con Zac Gallen en la loma. Y aunque el derecho no ha estado particularmente sólido en octubre (EFE de 5.27 en los playoffs), es el mismo lanzador que dejó un porcentaje de carreras limpias de 3.47 a lo largo de 210 innings en la temporada. Llegó a liderar en múltiples ocasiones las encuestas de MLB.com entre los favoritos para el Premio Cy Young. Si alguien puede contener a Texas, en teoría sería él.

Segunda historia: ¿Podrán remontar de nuevo los D-backs?

Los D-backs no tuvieron problemas ante los Cerveceros y los Dodgers en el comienzo de la postemporada, pero con lo que realmente impresionaron a todos fue lo que hicieron en la SCLN. Hubo varios momentos en los que parecían que los Filis tenían la serie asegurada.

Filadelfia tuvo ventaja de 2-0, y estaba arriba 1-0 hasta la séptima entrada del Juego 3… pero los D-backs batallaron y vinieron de atrás.

Los Filis ganaban 5-3 en el Juego 4… pero los D-backs batallaron y vinieron de atrás.

Los Filis ganaron el Juego 5 para tomar ventaja de 3-2 antes de disputar los últimos dos partidos en casa… pero los D-backs batallaron y ganaron ambos juegos.

Este reto es aun mayor. Los números están en contra de ellos ahora. De cara al inicio de esta postemporada, sólo 14 equipos de 92 posibles han remontado una serie al mejor de siete después de perder tres de los primeros cuatro juegos. Es tentador descartar a Arizona, pero ocurrió lo mismo en la SCLN y mira lo qué pasó.

Tercera historia: ¿Podrán hacer esto los Rangers? ¿Finalmente?

Podrás recordar, cuando empezó esta Serie Mundial, la cantidad de referencias con la última vez que los Rangers estuvieron en el Clásico de Otoño, cuando estuvieron a un strike – ¡dos veces! – de ganar el primer título en la historia de la franquicia, antes de caer ante San Luis. El llegar tan cerca y quedarse corto, definitivamente deja una marca.

Pero hay algo que los fans de los Rangers no saben, porque nunca han ganado un campeonato, pero cuando finalmente lo haces, todo ese sufrimiento acumulado durante años desaparece. Termina siendo una anécdota. Las bebidas que inundan el clubhouse sirven para liberar a los aficionados de años de frustraciones.

Los Rangers pueden acabar con eso el miércoles. Todos esos videos de ellos perdiendo en las Series Mundiales del 2010 y 2011 que han sido tan difíciles de digerir durante años podrían quedar en el pasado, convirtiendo todo el dolor en euforia.

Para eso, necesitan un triunfo más. Sólo uno más.