GUADALAJARA - Félix Hernández parecía niño como juguete nuevo, gritando, saltando de la alegría, en aquel Clásico Mundial del 2009, cuando apenas nacía la hoy esplendorosa carrera que ha hilvanado en la Gran Carpa.
No tuvo la oportunidad de competir en la magna justa de la pelota internacional en el 2013, pero ahora proclama a los cuatro vientos que se siente bien emocionado por abrir el primer juego de Venezuela frente a Puerto Rico, el viernes en el exigente Grupo 'D' en Guadalajara.
Y el autor de uno de los 23 juegos perfectos en la historia de la pelota tiene en la mente que una buena faena suya pudiera alegrar a muchos de sus paisanos.
"Es realmente importante darle a Venezuela una victoria, por todo lo que pasa y la situación tan mala", proclamó Hernández, ganador de 154 juegos en las Ligas Mayores. "Un triunfo para Venezuela sería bien significativo".
Hernández se siente bien preparado para medirse a Puerto Rico, luego de ponchar a cinco Atléticos de Oakland en tres entradas en su apertura en la Liga del Cactus el pasado domingo, cuando subió a la lomita a defender los colores de los Marineros de Seattle.
Entretanto, en su preparación final para el juego frente a Puerto Rico, Venezuela superó por 6-4 a los Rangers de Texas en ataque encabezado por un cuadrangular de Carlos González, uno de los artilleros de una alineación nutrida de bateadores que han sacado por todo lo alto la bandera de patria en Las Mayores, como José Altuve, Jose Cabrera, Martín Prado y Víctor Martínez.
La línea central de Venezuela es tan solvente que sus cuatro integrantes, el receptor Salvador Pérez, el intermedista Altuve, el paracorto Alcides Escobar y el jardinero central Ender Inciarte pudiera ser el mejor cuarteto de la mayoría de las novenas de las Grandes Ligas.
"Todos están en la misma página", declaró el dirigente de Venezuela, Omar Vizquel, luego de la barrida de su equipo en juegos de preparación sobre los Reales de Kansas City y los Rangers. "La intensidad está allí en cada turno y en el caso de los lanzadores con cada pitcheo".
González, de los Rockies de Colorado, recuerda con nostalgia su trayectoria en la pelota invernal venezolana y el Clásico Mundial, además de su importancia competitiva, le traerá recuerdos de sus sobresalientes campañas con las Águilas del Zulia.
"Es bien chévere, parecido a la pelota invernal", recordó González. "Uno escucha la música y ve la gente bailando en las tribunas".
La primera experiencia de González en el Clásico Mundial le permitió aprender muchas cosas que espera poner en práctica desde el viernes en el Grupo de la Muerte.
"Es un torneo bien duro y no importa cómo uno se prepare entre temporadas [de las Grandes Ligas], uno nunca va a estar al 100%", analizó el guardabosque venezolano. Es difícil, pero a la vez bien divertido".
Avanzar a la segunda ronda e ir escalando posiciones hacia una posible coronación en Los Ángeles es el objetivo del escuadrón venezolano, pero sobre todas las cosas es vital para los integrantes del equipo el dar lo máximo en representación de su patria.
"Es la única oportunidad que tenemos de representar a nuestro país con la franela que dice Venezuela en el pecho", expresó Altuve, dos veces bateador de 200 hits o más con los Astros de Houston. "Uno saca la cara por el nombre de la patria cada día en las Ligas Mayores, pero ahora va a ser importante llevar nuestra bandera por todo lo alto".