Historias claves a seguir en los Juegos 2 de SDLN

9 de octubre de 2023

Debido al calendario de la postemporada, los dos equipos que perdieron el Juego 1 de sus respectivas Series Divisionales de la Liga Nacional (y sus aficionados) tuvieron un día entero libre, más de 24 horas, para sentarse y reflexionar. Y estos dos equipos resultaron ser los mejores clubes de la Liga Nacional durante toda la campaña, los dos cabezas de serie que estuvieron libres durante las Series de Comodines.

Los Dodgers vieron cómo su futuro miembro del Salón de la Fama e ícono de la franquicia, Clayton Kershaw, era aniquilado por los D-backs, y los Bravos fueron blanqueados en casa por primera vez desde el 2021. Basta con decirlo: Esto no es lo que ninguno de los equipos tenía en mente de cara a esta postemporada. Eso hace que los dos encuentros del lunes sean aún más cruciales. Otra derrota, y estos monstruos del Viejo Circuito viajarán para dos juegos en la carretera con toda su temporada en juego.

¿Podrán igualar la serie? He aquí un repaso a las grandes historias de cada novena en los dos desafíos de las SDLN del lunes.

Filis vs. Bravos
Filadelfia lidera 1-0

Zack Wheeler vs. Max Fried
6:07 p.m. ET

Filis: ¿Podrá Zack Wheeler mantener silenciados a los bates de los Bravos?

Fue extraño, por decir lo menos, ver la ofensiva de los Bravos, legítimamente una de las mejores de los últimos 25 años, completamente apagada por siete lanzadores de los Filis, ninguno de los cuales se llamaba "Wheeler" o "Nola". Ahora tienen que enfrentarse a esos dos hombres.

Wheeler será el primero en medirse a los Bravos, y no sólo ha estado fantástico en sus últimas cuatro aperturas (sólo seis carreras en 23,2 innings), sino que se ha convertido en el abridor de postemporada más fiable e incluso dominante de los Filis durante su estancia en Filadelfia. Tiene una EFE de 2.55 en siete salidas de playoffs para los Filis, aunque una de sus derrotas fue contra los Bravos en el Juego 2 de la SDLN del año pasado. Aún así, lanzó bien en ese encuentro, cediendo tres rayitas en seis entradas, lo que sería un resultado aceptable en esta salida del lunes. Pero si es tan bueno como lo fue en la victoria de la Serie del Comodín sobre los Marlins, o como lo ha sido en sus últimas cuatro presentaciones, podría dar a los Filis una ventaja realmente dominante en esta serie.

Bravos: ¿Está Max Fried listo para esto?

Fried, que sin hacer mucho ruido ha sido uno de los mejores lanzadores del béisbol desde hace media década, regresó el 4 de agosto para hacer su primera apertura en tres meses, después de estar en la lista de lesionados por un problema en el codo. Lució estupendo y así permaneció durante sus siguientes ocho salidas, aparentemente preparándose para ser otro as de los Bravos frente a su implacable alineación. Y entonces apareció una ampolla. El problema en la ampolla en su dedo índice izquierdo se agravó en una victoria el 21 de septiembre sobre los Nacionales, y no ha lanzado desde entonces. Tiró cinco innings en un juego simulado el martes pasado y dijo que estaba feliz de “mantener mi brazo en funcionamiento y sólo hacer que algunos muchachos se sientan como si estuviera en algún tipo de entorno competitivo y terminando el día saludable”.

Se trata de un avance positivo (y ciertamente mejor que la alternativa), pero todavía no es tan tranquilizador como los Bravos quisieran de cara a un Juego 2 que necesitan ganar contra los Filis. El posible regreso de Fried, tanto de su problema en el codo como de la ampolla, siempre ha parecido un extra de felicidad para un equipo que está completamente armado en todos los demás aspectos. Ahora, abajo 1-0 en casa, Fried lanzando como su mejor versión posible parece esencial. Se siente como todo lo que actualmente separa a los Bravos del borde del abismo.

D-backs en Dodgers
D-backs lideran la serie 1-0
Zac Gallen vs. Bobby Miller
9:07 p.m. ET

D-backs: ¿Podrán tomar ventaja de cómo las estrellas se han alineado para ellos?

De cara al Juego 1, si le hubieras preguntado a un fan de los D-backs qué es lo que deseaba que sucediera, habrían dicho algo como esto: “Madruguen a Clayton Kershaw, hagan que los Dodgers usen a cinco relevistas, no utilicemos a ninguno de nuestros propios relevistas de situaciones de apremio y preparémonos para que Zac Gallen suba a la loma en el Juego 2”. Concedido, concedido, concedido y… bueno, lo último está en manos de Gallen.

Para muchos el lanzador idóneo para subir al montículo en esta situación es Gallen, quien era un favorito para el Premio Cy Young de la Liga Nacional antes de que dos salidas tambaleantes en septiembre mermaran un poco dicha condición. Sin embargo, el diestro lució en sus últimas tres aperturas, incluida una eficiente salida en el decisivo Juego del Comodín contra los Cerveceros. Este calendario le permite abrir el Juego 5 en esta serie, de ser necesario. Pero con los problemas que los Dodgers tienen en su cuerpo monticular, Gallen podría colocar a los D-backs en una posición en la que no tendrían que preocuparse por el Juego 5… en cambio, la mira la pondrían en Gallen para que abra el Juego 1 de la SCLN.

Dodgers: ¿Podrán levantarse de una dolorosa derrota y empatar la serie?

Para estar claros, antes que nada: Lo que han hecho los Dodgers en la última década ha sido increíble. La última vez que no clasificaron a los playoffs fue en 2012, cuando Jamie Moyer todavía lanzaba, y el exlanzador zurdo está por cumplir 61 años. Es un trecho extraordinario de éxito digno de envidiar y no debería demeritarse de ninguna manera. ¿Está claro? Bien.

Por qué si los Dodgers son eliminados en la SDLN por un equipo que quedó por debajo de ellos en el Oeste de la Liga Nacional por segundo año consecutivo -- algo de lo quedarían al borde si pierden el segundo choque en Los Ángeles -- justamente o no, todo ese éxito en la temporada regular se iría por la borda, y su condición de “La Dinastía que se Apaga en Octubre” se solidificaría. (Su título del 2020 fue probablemente más difícil de ganar que un campeonato de una temporada “normal”, pero eso no cambia que la historia ciertamente no lo recordará de esa manera).

El Juego 1 fue una clase de desastre que raramente se ve en los Dodgers, y no será fácil recuperarse, especialmente si tomamos en cuenta la cantidad de lanzadores que utilizaron tras aplicarle la grúa a un ineficiente Kershaw. El abridor del Juego 2, Bobby Miller, tenía 13 años cuando la actual racha de playoffs de Los Ángeles comenzó. No es su culpa que los Dodgers salten al terreno bajo una inmensurable presión el lunes por la noche. Eso no significa que no la sentirá a flor de piel.