José Altuve y Carlos Correa, "hermanos" del medio del cuadro en Houston

30 de junio de 2017

HOUSTON - José Altuve y recorrieron caminos bien distintos hacia el béisbol profesional, pero ahora forman el mejor dúo de la doble-matanza en las Grandes Ligas con los Astros de Houston.
Altuve, debido a su discreto tamaño, tuvo dificultad hasta para lograr que los entrenadores le dieran una oportunidad en Venezuela. Pero el maracayero hizo quedar mal a todos, convirtiéndose en una superestrella y líder como segunda base de los Astros, con dos títulos de bateo en su haber y cuatro convocaciones al Juego de Estrellas-entre muchas hazañas más.
En cambio, Correa llegó a la organización de Houston con un alto pedigrí, siendo la primera selección del draft entero del 2012 (y la primera del actual GG Jeff Luhnow) al salir de la Puerto Rico Baseball Academy and High School. Desde entonces, el boricua ha cumplido con las enormes expectativas, siendo Novato del Año de la Liga Americana en el 2015 y acumulando números abrumadores año tras año.
Con Altuve en la intermedia y Correa en las paradas cortas, los Astros cuentan con talento, juventud y unidad en el medio del cuadro.
"Es una relación única de hermanos. Jugar con él y aprender del béisbol significa mucho para mí", dijo Correa sobre la amistad que ha forjado con Altuve. "He aprendido muchas cosas en los años en que he estado aquí. Obviamente, es uno de los mejores jugadores de Grandes Ligas".
Cuando Correa hizo su debut de Grandes Ligas en el 2015 a los 20 años edad, empezó jugando al lado de Altuve, un veterano ya de cuatro temporadas a pesar de que para ese entonces contaba con apenas 25 años.
"Nosotros tenemos buena química dentro y fuera del terreno", afirmó Altuve. "Hablamos bastante, disfrutamos el juego".
Aunque a Altuve no le gusta mucho asumir el crédito de manera individual, diciendo que Correa "ya lo sabía todo" a la hora de debutar en las Mayores hace dos años, Correa sí elogia con entusiasmo las orientaciones que recibió del segunda base venezolano en aquel entonces.
"Competir cada día y tener un buen approach (mentalidad) en el home", dijo Correa al hablar de las lecciones que le dio Altuve. "No hacerle swing a todos los pitcheos, sino al que estás buscando".
Altuve (.327/.400/.527, 23 dobles, 11 HR, 38 CE) y Correa (.309/.388/.537, 16 HR, 53 CE) lucen bastante seguros para ser elegidos por los fanáticos como intermedista y paracorto titulares de la Liga Americana para el Juego de Estrellas, a realizarse en Miami el 11 de julio. Dicha calidad en ambas posiciones es el lujo que tiene el manager A.J. Hinch día tras día a la hora de formar su alineación.
"Es una gran ventaja", dijo Hinch al respecto. "Hay muchos buenos infielders a nivel de Grandes Ligas en el medio del cuadro, pero yo me quedaría con mi dúo por encima de cualquier otro de la liga. Claro, soy parcial porque quiero mucho a esos muchachos y veo lo que hacen detrás de las cámaras. Es un dúo bien especial".
Los Astros, con la mejor marca de Grandes Ligas y aspiraciones de ganarlo todo este año, saben que podrán contar con Altuve y Correa para un mínimo de dos temporadas más luego del 2017.
"Esperamos jugar muchos años juntos, pero eso no depende de nosotros", comentó Altuve.
Altuve tiene opciones del equipo en su contrato (US$6 millones para el 2018 y US$6.5 millones para el 2019) que seguramente serán ejercidas por Houston. En cuanto a Correa, el puertorriqueño no podrá optar por el arbitraje hasta el 2019, si es que los Astros no deciden darle una extensión de contrato a largo plazo.
Mientras tanto, sigue la época de oro para los Astros entre la segunda almohadilla y el campo corto.
"Son dos jugadores bien talentosos en el terreno, pero más importante es su habilidad a la hora de prepararse", expresó Hinch. "La producción habla por sí mismo. Es excepcional su estabilidad defensiva y la química que han creado por el medio del cuadro es algo que se ve claramente. No hay suficientes cosas positivas para decir a la hora de hablar de ellos dos como dúo o a nivel individual".