GLENDALE, Arizona - Tres días después del repentino retiro de Adam LaRoche y un fuerte intercambio de palabras a puerta cerrada entre los jugadores de los Medias Blancas y el vicepresidente ejecutivo del equipo, Kenny Williams, el as Chris Sale se reunió con los medios el viernes para aclarar su frustración con la situación.
"Se nos mintió y se trató de alguien en quien se supone podemos confiar", dijo Sale. "No puedes venir a decirles a los jugadores que son los coaches (que no quieren que esté tan presente el hijo de LaRoche), decirles a los coaches que son los jugadores y luego venir y decir algo completamente diferente.
"Si estamos todos aquí para ganar un campeonato, esas cosas no pueden suceder. No había problema aquí, íbamos bien, pero (Williams) en cierto sentido creó uno".
De su parte, Williams dijo lo siguiente al enterarse de lo expresado por Sale, a la vez que manifestó que el enfoque del equipo debe volver al béisbol:
"No estoy de acuerdo con lo afirmado por Chris; ciertamente, siempre he valorado su pasión".
Tanto el dueño principal de los Medias Blancas, Jerry Reinsdorf, como el mismo LaRoche emitieron comunicados el viernes.
"Agradecemos la atención y el interés de todos, pero creemos que sería prematuro hacer comentarios en estos momentos", expresó Reinsdorf. "Este es un tema interno y estamos en el proceso de sostener varias conversaciones con los jugadores, los coaches y la oficina central".
De su parte, en su comunicado LaRoche afirma que primero Williams le pidió que llevara menos a su hijo Drake al clubhouse del equipo, pero que más adelante le dijo que no lo llevara nunca.