SAN DIEGO - Los Padres asumieron el rol de única franquicia deportiva a nivel profesional el jueves, cuando los Chargers del fútbol americano de la NFL anunciaron sus planes para trasladarse a Los Angeles.
Como resultado, la ciudad de San Diego-sede de los Chargers durante 56 años-es ahora el único mercado de Norteamérica con un equipo de Grandes Ligas y sin otro deporte.
Los dueños de los Padres emitieron un comunicado el jueves a través de su máximo ejecutivo Ron Fowler y su propietario mayoritario Peter Seidler.
"Estamos profundamente decepcionados con la noticia de que los Chargers se van de San Diego", se expresó en la nota de prensa. "Los Chargers son un tesoro de la comunidad y siempre hemos creído que San Diego es mejor con el equipo aquí. Dicho eso, sabemos que San Diego seguirá creciendo y se convertirá en una comunidad aun más vibrante".
La edición de los Padres de la Liga de la Costa del Pacífico eran la única franquicia deportiva de San Diego hasta que los Chargers llegaron a la ciudad en 1961 (luego de jugar su primer año en Los Angeles). Pero desde que los Padres se integraron a las Grandes Ligas en 1969, los Padres habían compartido San Diego con los Chargers, incluso ocupando el mismo estadio que el equipo de fútbol americano de 1968 al 2003.