¿Tiene Boston suficiente relevo para competir?

24 de mayo de 2019

Por ahora, los Medias Rojas no cuentan con un taponero, ni un bullpen lo suficientemente bueno como para defender su título de Serie Mundial. Tienen a dos de sus figuras claves en octubre pasado -- Jackie Bradley Jr. y Steve Pearce – bateando ambos por debajo de .200. Todavía se están recuperando de un arranque de temporada con marca de 3-8 y luego 6-13, y se encontraban a 5.5 juegos de los Rays en la lucha por el primer Comodín de la Liga Americana llegando al viernes. Tras los partidos del miércoles por la noche, los Medias Rojas tenían el mismo número de derrotas que los Indios y Rangers. Boston incluso sudó la gota gorda para vencer a los Azulejos el miércoles tras desperdiciar ventajas de 3-1 y 4-2 y luego 5-4 en extrainnings para finalmente ganar 6-5 en la 13ra. El jueves se vieron mejor, con un triunfo por 8-2 sobre Toronto para cerrar la serie.

En Boston siguen diciendo que la temporada aún es joven. Los Yankees ocupan el primer lugar en el Este de la Liga Americana. Los Medias Rojas el tercero. Si los Patirrojos no levantan su juego en los próximos días – con un par de duras series en puerta ante Astros y Yankees fuera de casa – podrían encontrarse a 10 juegos de la cima de su división para la próxima semana.

“No fue fácil”, reconoció el piloto de los Medias Rojas, el boricau Alex Cora, después del cuadrangular decisivo del novato Michael Chavis en la 13ra el miércoles.

Pocas cosas han sido fáciles para los Medias Rojas esta temporada, incluso contra equipos con marcas por debajo de .500 como los Azulejos. Tras la victoria del jueves 8-2 en Toronto, los Patirrojos tienen récord de 22-15 ante dichos rivales. Eso no luce tan mal, excepto por el hecho de que las cuatro mejores escuadras en el Joven Circuito tienen las siguientes marcas vs. clubes con marcas por debajo de .500:

Yankees: 23-9

Rays: 18-8

Astros: 16-3

Mellizos: 24-8

Los Medias Rojas están lidiando con una lesión de peso esta campaña, la del derecho Nathan Eovaldi –otro de sus lanzadores estrellas en octubre pasado, si tomamos en cuenta lo que hizo y cómo lo hizo la postemporada pasada, al igual que David Price. ¿Los Yankees? Ustedes saben la exorbitante cantidad de jonrones que han estado conectando los Bombarderos del Bronx. Aaron Judge ha estado en la lista de lesionados, al igual que Giancarlo Stanton. Lo mismo pasa con los dominicanos Luis Severino y Dellin Betances. Didi Gregorius, su torpedero titular, se encuentra recuperándose de una cirugía Tommy John a la cual se sometió el año pasado. CC Sabathia es el último en ingresar a la lista de lesionados. Aaron Hicks, el jardinero central titular, acaba de unirse al equipo este año. Los fanáticos de los Yankees están bien atentos a todo esto de la misma manera en que lo estuvieron con el final de la popular serie “Juego de Tronos” (“Game of Thrones”), mientras su equipo lucha por recuperar el trono del Este de la Liga Americana.

Cora ha tratado de muchas maneras de llenar el hueco que dejó el estelar taponero Craig Kimbrel (actualmente desempleado), con Ryan Brasier, Matt Barnes, Brandon Workman y Heath Hembree. El miércoles por la noche frente a los Azulejos, el piloto probó suerte con Marcus Walden cuando los Medias Rojas trataban de sellar una victoria por 4-3, pero Toronto le empató el juego a Walden. Hembree eventualmente sacó los últimos tres outs del juego en la 13ra, pero no antes de que Rowdy Téllez empatara el partido con un tablazo de dos rayas en la 12da. Este es un bullpen que desperdició una ventaja en contra de los Rockies la semana pasada en Fenway y otra ante los Astros.

Cabe destacar que los Medias Rojas lograron recuperarse de un inicio de 6-13 y han jugado pelota de 20-10 desde entonces, evitando así caer en un bache aun más profundo. Pero los Yankees, que han venido ganando gracias a héroes inesperados como el colombiano Gio Urshela y más recientemente figuras como el dominicano Gary Sanchez y el venezolano Gleyber Torres, arrancaron el año con marca de 8-10. De ahí en adelante, tienen 23-7. Y la realidad acerca de la temporada que ya se ha jugado es que los Medias Rojas han disputado más partidos contra equipos con marcas por debajo de los .500 que los mismos Yankees.

Los campeones defensores están por disputar una serie de tres encuentros en el Minute Maid Park este fin de semana vs. los Astros. Luego de eso, habrá tres juegos más la próxima semana en el Yankee Stadium frente a sus archirrivales. Esta es una escuadra que consiguió 108 victorias la campaña pasada y luego tuvo marca de 11-3 en octubre. Los Medias Rojas están obligados a hacer más que simplemente luchar por ganarles a equipos sotaneros. Ahora tienen una oportunidad de oro para hacerlo.

Desde el 29 de abril, los Medias Rojas cuentan con el tercer mejor récord en la liga, incluso medio juego por encima de los Yankees desde entonces. Chavis ha marcado una gran diferencia en el lineup. Pero el relevo continúa siendo el talón de Aquiles. Y siempre vale la pena recordar que los mejores relevistas de los Medias Rojas en octubre pasado fueron sus mejores abridores. Quizás puedan repetir la hazaña este próximo octubre. Pero primero tienen que ganarse un boleto a la postemporada.

Por supuesto, aún es temprano. Por supuesto, la temporada de los Medias Rojas apenas llega a 50 juegos. Por supuesto, los Patirrojos han trabajado duro para cambiar su propia narrativa en el último mes, y estarían disputando el Juego por el Comodín de la Liga Americana si la temporada acabase hoy. Por supuesto, un solo equipo que ha ganado el Comodín (Gigantes del 2014) ha logrado ganar la Serie Mundial desde que MLB integró el formato de dos Comodines por liga en el 2012.

Conclusión: A pesar de todo, los Medias Rojas aún deberían tener un mejor récord que solamente cuatro juegos por encima de .500. Este sería el momento perfecto para que esta campaña comience a lucir como la del año pasado en Boston. Para cuando enfrenten a los Yankees en Londres a finales de junio, los Medias Rojas no desean que sus fanáticos comiencen a preguntarse si Chris Sale o David Price deberían abrir el Juego por el Comodín de la Liga Americana.