Todo apunta hacia un gran año para Devers

7 de marzo de 2018
John Minchillo

PORT CHARLOTTE, Fla. - Con la cuenta 0-2 en su primer turno al bate del martes, no se hubiese equivocado en esperar un mal lanzamiento que tuviese el propósito de obligarlo a hacerle un swing fallido.
Pero Devers, de sólo 21 años, se ha preparado para cualquier cosa que esté en la zona de strikes.
Así que cuando vio una slider en el medio de la zona, el prometedor toletero dominicano conectó la bola con su bate y la llevó al techo del jardín izquierdo para un jonrón solitario que ayudó a los Medias Rojas a vencer 9-1 a los Rays.
Fue su segundo bambinazo de los entrenamientos. Ambos han sido en los últimos dos encuentros.
"Es lo que lo hace especial", dijo el mánager de los Medias Rojas Alex Cora. "Dejó pasar una recta, le hizo swing a un cambio y luego ante la slider disparó la bola de esa manera. Es increíble, le seguimos diciendo que se mantenga en la zona, porque mientras más lo haga mejor será. Así que seguimos insistiendo en que es un pelotero especial".
Devers comienza su primera temporada completa como el titular de la tercera base de los Medias Rojas, y podría estar al borde de grandes cosas con su poderosos bate.
"Básicamente es encontrar mi pitcheo, como siempre he dicho, esperar la bola, ser agresivo y controlado a la hora de escoger", dijo Devers. "Creo que con una temporada saludable puedo hacer grandes cosas".
Luego de ser subido a las Mayores para la lucha final en el 2017, Devers hizo varias cosas para ayudar a los Medias Rojas a alzar el título del Este de la Americana. En 222 turnos, el zurdo tuvo una línea de bateo de .284/.338/.482 con 10 jonrones. Si hay algo que mejorar sería su defensa (14 errores en 149 oportunidades).
Pero lo bueno compensa lo malo, y en la postemporada Devers fue especial, conectando un jonrón de tres carreras para ayudar a los medias Rojas a evitar la barrida en el Juego 3 de la Serie Divisional ante los Astros. En el Juego 4, con Boston abajo por dos carreras en la novena, Devers enloqueció al Fenway Park con un cuadrangular dentro del campo que le dio a su equipo una ilusión momentánea, antes de ser eliminados ese mismo día.
Cora, quien fue el coach de banca de Houston en esa serie, tomó nota del chico en ese par de encuentros en el Fenway, cuando las emociones eran máximas.
"Como persona, sé que no tiene miedo. Lo vi el año pasado", dijo Cora. "Esa banca de Houston estaba encima de él gritándole. Carlos Beltrán estuvo probándolo y el chico igual se paraba en el plato a dar batazos importantes. No tiene miedo de estar en situaciones apremiantes".
Cora pudo conocer a Devers en República Dominicana el día después de Navidad.
"Tuve una reunión con el coach de tercera base, Carlos Febles y luego con Raffy", dijo Cora. "Y Carlos le dijo que estaría el 26 de diciembre con él, para demostrarle lo importante que es para nosotros. Le dije lo buen jugador que es y lo importante que será para lo que queremos lograr; es sólo un niño".
Poder hablar el mismo idioma que su mánager es otra cosa con lo que Devers puede sentirse cómodo este año.
El mejor consejo que Cora probablemente le dio fue: "Sigue trabajando".
A Cora le gusta que Devers lo llame como "AC" en vez de "señor", pero eso será un tópico de otro momento.
"He estado trabajando en la ofensiva en la defensa", dijo Devers. "Siento que nadie en las Mayores es un producto finalizado. Nadie es perfecto, siempre hay algo en lo que hay que trabajar. Estos Entrenamientos Primaverales han sido buenos para mí para mejorar".
Para un equipo que ya tiene una colección de buenos bateadores (Andrew Benintendi, , J.D. Martínez, Hanley Ramírez, , etc.) una buena campaña de Devers podría hacer de la ofensiva de Boston una de élite.
"El poder está allí. Tenemos que trabajar en algunos detalles", dijo Cora. "Algo que no queremos quitarle es la agresividad. Pero tenemos que asegurarnos de que sea en la zona de strikes. El tener 21 años y poder ajustarse en el momento es algo importante".