El aspecto central del béisbol en la actualidad es el poder. Eso para los lanzadores se traduce en velocidad. Todos los equipos están acumulando ese bien en abundancia, y los Medias Rojas no son distintos.

Entonces, surge la siguiente interrogante: ¿Quién es el mayor lanzallamas actualmente en las fincas de Boston?

La respuesta podría estar en Triple-A Worcester, con el relevista dominicano Luis Guerrero. El derecho de 23 años ubica su pitcheos en 96-98 millas por hora con consistencia y toca las 100 mph ocasionalmente.

“Está en el tope”, expresó el director de desarrollo de jugadores de los Medias Rojas, Brian Abraham. “[Ryan] Zeferjahn y [David] Sandlin son otros monticulares que han lanzado 100 [mph] este año”.

Pero debido a que Guerrero es quien probablemente esté más cerca de las Mayores, vamos a darle una mirada al prospecto dominicano, quien vivió en Boston cuando era niño, idolatrando a sus compatriotas David Ortiz, Manny Ramírez y Pedro Martínez.

Si todo sale bien, Guerrero podría tener una gran carrera como relevista para situaciones apremiantes.

Pero aún hay trabajo por hacer para el prospecto número 30 del club, según MLB Pipeline.

Aunque Guerrero enciende los radares de velocidad, algunos scouts afirman que su recta tiene que seguir desarrollándose para convertirse en un pitcheo verdaderamente dominante. Para alcanzar su techo, tendrá que darle más vida a dicho tiro, con un mejor control.

¿Cuán cerca está Guerrero de ser ascendido por los Medias Rojas?

“Es difícil ofrecer una fecha exacta, pero cualquiera que esté en Triple-A está a una llamada de las Mayores”, dijo Abraham. “No está en el roster de 40 en la actualidad, así que se requiere de una transacción adicional, pero si el equipo siente que es la persona indicada, entonces será llamado. Él se prepara a diario para la oportunidad, enfocándose en sus metas actuales en Triple-A”.

¿Cuáles son esos objetivos?

“Llenar la zona con strikes, especialmente antes de tener [a los rivales] en dos strikes”, continuó Abraham. “Consistencia con cada presentación. Utilizar su splitter (recta de los dedos separados) ante [bateadores] de ambas manos y maximizar su efectividad, desarrollando a la vez más el slider”.

Y aunque aún tiene espacio para continuar su evolución, el club ha notado su crecimiento.

“Es un pelotero. Es uno de los que más trabajan”, indicó Abraham. “No es sólo un lanzallamas, sino que además tiene un plan para enfocarse en las áreas en las que más debe mejorar. Ha crecido dentro y fuera del terreno, siendo alguien que lidera con sus actos, comportándose de la manera en la que lo hace a diario”.