ATLANTA -- Tal vez la presencia de Jurickson Profar ayude de inmediato a despertar la ofensiva de los Bravos y a lidiar con lo que se ha convertido en una rotación muy debilitada.
Profar regresó el miércoles tras cumplir una suspensión de 80 juegos por uso de sustancias para mejorar el rendimiento y de inmediato mostró su potencial. Celebró su primer juego desde el 30 de marzo igualando los jonrones de Matt Olson y Sean Murphy en la victoria 8-3 sobre los Angelinos en el Truist Park.
“Lo mejor que puedes hacer cuando sales de una situación así es rendir, y [Profar] lo hizo”, dijo el mánager de los Bravos, Brian Snitker.
Este parecía un día complicado para los Bravos. Spencer Schwellenbach fue colocado en la lista de lesionados con una fractura en el codo derecho y la seguidilla sin anotar del equipo llegó a 21 innings antes de que Murphy conectara un jonrón de tres carreras y Olson un grand slam en un sexto inning de siete carreras.
Murphy ha conectado jonrones en tres juegos consecutivos, y el grand slam de Olson pudo sentirse aún más especial al hacerlo con su amigo Travis d’Arnaud detrás del plato con los Angelinos. Pero el cuadrangular que podría tener mayor impacto a largo plazo fue el que Profar envió al segundo nivel del Chop House, por la línea del jardín derecho.
¿Qué pensó Profar de los aplausos que siguieron a su jonrón?
“¿Aplaudieron?”, dijo Profar entre risas. “Estaba tan concentrado que no me di cuenta”.
Profar escuchó una mezcla de aplausos y abucheos antes de su primer turno al bate el miércoles, pero solo abucheos después de que retomó su carrera con los Bravos con un ponche.
“Tienen todo el derecho de hacer lo que quieran”, manifestó Profar. “Cometí un error y debo pagar por ello”.
Profar necesitará ofrecer una producción constante para acallar a quienes dudan de su capacidad de repetir el éxito del año pasado sin ayuda de sustancias prohibidas.
“No tomé nada a propósito”, aseguró Profar antes del juego. “Como dije en mi comunicado [emitido en marzo], soy responsable de lo que entra en mi cuerpo. Cumplí los 80 juegos. Fue difícil, pero lo hice. Soy responsable. No hay excusas”.
Profar firmó un contrato de tres años y US$42 millones con los Bravos en enero. Jugó sólo cuatro partidos antes de que se anunciara que había dado positivo por gonadotropina coriónica humana (hCG), una sustancia para mejorar el rendimiento que viola el Programa Conjunto de Prevención y Tratamiento de Drogas de Major League Baseball.
¿Cómo dio positivo Profar por una sustancia asociada principalmente con el embarazo, pero que también usan hombres para estimular la producción de testosterona o esperma?
“Tuve un problema en la rodilla el año pasado”, explicó Profar. “Lo que pedí era algo normal, algo que ya había [tomado] antes cuando tuve mi problema en el hombro. Pero [la prueba] resultó que tenía una sustancia prohibida”.
Profar pasó parte de los entrenamientos de primavera sabiendo que había dado positivo. Su intento de apelación retrasó el anuncio oficial hasta el 31 de marzo, justo cuando los Bravos se preparaban para comenzar una serie de tres juegos en el Dodger Stadium.
“Fue muy, muy, muy difícil”, lamentó Profar. “Pasé noches sin poder dormir durante semanas, mientras seguía practicando y haciendo lo que debía. Y sabiendo que [ser suspendido] era una posibilidad real”.
Profar será el jardinero izquierdo titular todos los días y bateará en el medio del orden. Tiene la oportunidad de ayudar a los Bravos a buscar una improbable clasificación a los playoffs. Pero junto con la suspensión, su prueba positiva le prohíbe jugar en la postemporada de este año.
Para hacerle espacio a Profar, los Bravos designaron para asignación al mexicano-americano Alex Verdugo.
Cuando los Bravos firmaron a Verdugo con un contrato de un año y US$1.5 millones el 20 de marzo, no estaba claro por qué añadían a un jardinero con bajo rendimiento a un outfield ya congestionado. Pero el movimiento cobró sentido poco más de una semana después, cuando se anunció el positivo de Profar.
Profar pegó 24 jonrones, un máximo personal, y registró un OPS de .839 con los Padres el año pasado. El ex prospecto produjo un OPS de .702 en 470 juegos (1,793 apariciones al plato) entre 2020 y 2023. Su éxito en San Diego sorprendió, considerando que fue dejado en libertad por los Rockies cerca del final de la temporada 2023.
Además del jonrón, Profar también conectó un sencillo antes del batazo de tres carreras de Murphy. Su debut crea esperanza de que los Bravos por fin reciban producción desde el jardín izquierdo. Antes del jueves, el equipo tenía un fWAR de -1.9 en esa posición, el peor de MLB, que había sido cubierta por Jarred Kelenic, Eli White y Verdugo en ausencia de Profar.
Pero Profar también dio su primer paso para acallar a los críticos que necesitan verlo rendir este año antes de confiar en que su éxito del año pasado no se debió a sustancias prohibidas.
“Él es parte de este equipo y para mí es casi como un hermano”, destacó Ronald Acuña Jr. “Todos cometemos errores. Ahora se trata de pasar la página y seguir adelante”.