
LOS ÁNGELES – Durante todo el año, los Cerveceros han hablado con mucho orgullo sobre su temple mental para batallar los altibajos típicos de una temporada.
Bueno, ahora llegó el momento de verdaderamente sacar ese carácter grupal, si quieren empezar una improbable remontada ante los Dodgers en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, después de perder los tres primeros duelos.
Todo está en contra de Milwaukee.
Empezando por los porcentajes históricos. Sólo un equipo ha sido capaz de remontar una desventaja de 3-0 en la historia de las series a siete juegos de postemporada, cuando los Medias Rojas lograron la hazaña ante los Yankees en la SCLA del 2004.
Matemáticamente, estamos hablando de un 2.4% de posibilidades.
Y estos son números. Aquí no se está tomando en cuenta que el rival de enfrente son los campeones reinantes, en casa y exhibiendo todo su potencial. Tampoco se incluye la salida por un calambre en la pierna lesionada de posiblemente su mejor jugador, el venezolano Jackson Chourio, ni el bache del ganador del JMV del 2018, Christian Yelich – quien no tiene una carrera impulsada en los playoffs desde la edición de aquel año.
Está claro, el reto de los Cerveceros es aun más cuesta arriba de lo que los números indican, y ya eso es mucho decir.
Pero como dijo el manager Pat Murphy hace unos días, este es un equipo “improbable”.
¿Entonces, cómo luciría un improbable camino de regreso en la serie para los Cerveceros?
Primero, deben ser fieles al conocido cliché de ir juego a juego, inning a inning, pitcheo a pitcheo, etc. Ciertamente, el juego del viernes es vital. No sólo para ampliar la temporada un día más, sino porque de hacerlo, posiblemente el as dominicano Freddy Peralta estaría de vuelta en la loma con descanso corto para el Juego 5 – que a su vez aumenta sus opciones de devolver la serie a casa.
Volviendo al viernes, necesitan de una sólida presentación del veterano colombiano José Quintana, quien ha hecho 357 salidas desde el 2012 – sólo superado por Max Scherzer (373). Además, ante los Dodgers ha lucido bien históricamente, registrando efectividad de 2.32 en 15 juegos (12 aperturas) ante ellos.
El zurdo de 36 años no lanza desde el 8 de octubre, cuando completó 3.0 innings en blanco ante los Cachorros, así que no debería tener problemas en ir profundo en el juego, en caso de estar luciendo bien en la loma.
"Nos mantenemos positivos”, aseguró Quintana. “Necesitamos mostrar un béisbol realmente bueno y ganar un juego a la vez. Esa es la meta… La postemporada es completamente diferente. No tienes límites. Sólo te enfocas en seguir adelante. Esta vez no sientes ningún dolor, ningún límite. Sólo quieres seguir adelante".
Ahora, el pitcheo de Milwaukee ha sido el menor de sus problemas. Todo recae en el bateo, que ha sido maniatado por un pitcheo de los Dodgers que ha alcanzado niveles históricos en esta serie. La esencia de los Cerveceros se basa en el contacto y en la “pelota pequeña”, pero para eso deben tener gente en circulación, algo que no han podido lograr con constancia en la serie.
El jueves se vio una ligera mejoría, con los bates de Milwaukee haciendo trabajar más al pitcheo de los Dodgers, yendo más profundo en las cuentas.
“Nosotros somos buenos en ese aspecto”, comentó Chourio al respecto. “Sabemos que somos un equipó que llega a las bases y por esa parte [mejoramos], pero lastimosamente perdimos”.
Pero hace falta un despertar colectivo. Algo similar a lo ocurrido en el noveno inning del Juego 1, cuando estuvieron muy cerca de empatar el partido. Ciertamente, ese parece haber sido hasta ahora el pináculo del ataque de Milwaukee. Pueden tener gente en circulación, pero deben aprovechar las pocas oportunidades que ofrece el pitcheo de los Dodgers.
“No hemos conseguido el hit oportuno”, explicó Murphy. “Hemos estado un poco ajenos a cómo hemos jugado en términos de contacto".
Y de eso se trata todo; retomar la identidad del equipo. Si los Cerveceros quieren pensar en remontar, quizás el mejor consejo no sea mirar documentales de los Medias Rojas del 2004, sino videos del equipo que acumuló el mejor récord en las Grandes Ligas en el 2025: los Cerveceros de Milwaukee.
