Vladdy Jr. y Cavan Biggio, 1ra pareja de hijos de HOF en un mismo equipo
Cavan Biggio y Vladimir Guerrero Jr. se convirtieron ayer, viernes, en la primera pareja de hijos de inmortales del Salón de la Fama del Béisbol en Cooperstown en jugar en el mismo equipo un partido de Grandes Ligas. El hecho ocurrió en el Roger Centre de Toronto, donde los Azulejos recibieron la visita de los Padres de San Diego.
"It’s everything I dreamed about. Playing in the Major Leagues is pretty special." - @doinitBIGgio23 pic.twitter.com/pV24UDW5ov
— Toronto Blue Jays (@BlueJays) May 25, 2019
Guerrero Jr. y Biggio abrieron en la alineación de los locales, como segundo y octavo madero en la alineación. En el caso del dominicano, defendiendo la tercera almohadilla. Mientras, Biggio hizo lo propio en la intermedia. En la acción de hoy, sábado, el dirigente Charlie Montoyo los incluyó a ambos nuevamente, pero esta vez jugó con Biggio como séptimo en el orden.
Guerrero es hijo del legendario guardabosques dominicano y miembro de la Clase 2018 de Cooperstown, Vladimir Guerrero. Cavan, entretanto, es hijo de Craig Biggio, integrante de la Clase 2015 del recinto de los inmortales de la pelota caliente.
Esto luce muy prometedor. 🤜 🤛#LosAzulejos ✨ pic.twitter.com/56Etoy4qMY
— Azulejos de Toronto (@losazulejos) May 25, 2019
Un dato importante que vale la pena resaltar, es que Cavan Biggio se enfrentó esta tarde al lanzador de los Padres, Cal Quantrill. Este último es hijo de Paul Quantrill, quien en sus tiempos se enfrentó a Craig Biggio en 15 ocasiones entre 1994 y 2005. Craig solo le conectó cuatro indiscutibles a Paul, uno de ellos doblete, e impulsó dos carreras. Asimismo, se ponchó cuatro veces.
The Next Generation. #LetsGoBlueJays pic.twitter.com/hU9576CkbM
— Toronto Blue Jays (@BlueJays) May 25, 2019
Biggio hace su debut en las Mayores a los 24 años. Por su parte, Vladdy, a sus 20 primaveras, ya ha sacudido cinco cuadrangulares en la Gran Carpa. Ambos juveniles suman su talento al de Lourdes Gurriel Jr., quien a sus 25 años también es una de las apuestas al futuro de la organización de los Azulejos y es hijo del otrora Lourdes Gurriel, quien aunque no jugó en las Mayores, es una leyenda viviente del béisbol cubano. Dicho esto, podemos afirmar que en Toronto se fusiona la historia familiar de dos generaciones de puro béisbol.
