Al final, nadie -- ni los Mets, ni su dirigente Mickey Callaway, ni el coach de pitcheo Dave Eiland, ni el mismo Matt Harvey -- sabe cómo terminará este nuevo capítulo en la carrera del derecho.
Es algo sorprendente el hecho de que Harvey haya terminado en el bullpen del conjunto de Queens y algunos pensaban que el diestro se merecía otra apertura tras el buen final de su última apertura contra los Bravos y lució bien cuando se enfrentó a los Filis en su primera salida del año, lanzando con mayor convicción que en la campaña pasada.
Sin embargo, Harvey llevaba 6.57 de efectividad en las últimas dos temporadas y por eso la decisión tiene buenos argumentos. Y si Harvey se adapta a su nuevo rol, es posible que sea de gran ayuda como relevista y al final pueda volver a la rotación abridora. Es casi seguro que el club neoyorquino también prefiera ese mismo resultado.
En su primera presentación como relevista el martes contra los Cardenales, el derecho concedió una carrera, dos imparables, recetó dos ponches y otorgó un pasaporte en dos innings.

La salud de del cuerpo monticular de los Mets todavía es una interrogante, especialmente con Zack Wheeler y Steven Matz, quienes todavía no han demostrado mantenerse en salud ni lanzar con solidez por toda una temporada. Esa incertidumbre deja una esperanza para Harvey, pero el diestro necesita encontrar algo del repertorio que lo hizo tan dominante en el pasado.
¿Cómo favorecería a Harvey lanzar como relevista?
La velocidad promedio de la recta de Harvey ha disminuido de 96.5 millas por hora en el 2015 a 92.6 millas-- la peor en su carrera -- en lo que va de la temporada. A su slider le ha faltado consistencia y a su cambio le ha faltado ese toque final -- sus oponentes han bateado .385 con .692 de slugging contra dicho lanzamiento este año.
Como relevista es posible que se note un aumento en la velocidad de la recta de Harvey -- algo típico cuando un abridor pasa al bullpen -- y un mejor slider en esas presentaciones más cortas. El cambio podría ser un mayor reto para Harvey, debido a que es un lanzamiento que es un poco difícil de establecer en una breve presentación.
Pero sobre todo, Harvey necesita emplear este tiempo como relevista para encontrar su comando en la zona de strike. Su índice de pasaportes es bajo (4.5%) y trae optimismo, pero sin una velocidad élite, el lanzador necesita encontrar más las esquinas de la zona y esto ha sido un obstáculo para él desde su operación para aliviar el síndrome de abertura torácica en junio del 2016. El regresar de dicha dolencia todavía es un reto con resultados mixtos. Además, los pitchers que han regresado con éxito a la rotación después de estar en el bullpen -- específicamente Danny Duffy de los Reales, junto al dominicano Danny Salazar, el venezolano Carlos Carrasco y Trevor Bauer de los Indios -- no han tenido la misma clase de lesión que Harvey.
No obstante, esas cuatro muestras son relevantes en este caso, debido a que Callaway trabajó con Salazar, Carrasco y Bauer en Cleveland, y Eiland con Duffy en Kansas City. Esos serpentineros saben cómo el bullpen puede revivir la carrera de un abridor y el capataz, junto al coach de pitcheo, probablemente le estén presentando esos factores a Harvey. El diestro estará rumbo a la agencia libre en la temporada muerta y definitivamente le gustaría entrar en el mercado como abridor.
Por supuesto, el bullpen de los Mets no sólo es un lugar para que Harvey recupere su forma. También puede tener un impacto en el éxito del club.
¿Cómo será empleado Harvey?
Parece que los Mets necesitan a un preparador de mesa derecho antes del dominicano Jeurys Familia, con AJ Ramos enfrentando problemas últimamente y la nueva adquisición Anthony Swarzak todavía fuera de acción durante al menos otras tres semanas debido a una molestia en el oblicuo izquierdo. Pero es incierto si Harvey lanzará en momentos cruciales.
Por una parte, aunque Ramos lleva 4.00 de efectividad esta temporada, tiene historial de ser buen cerrojero, lo cual le permite lanzar en las últimas entradas. En su carrera ha controlado a los zurdos a promedio de .196 y a los derechos a .198, una consistencia que convencería a Callaway a darle a Ramos más episodios completos de trabajo.
Robert Gsellman también verá más acción en momentos apremiantes si mantiene el buen paso que lleva hasta ahora -- el derecho ha registrado promedio de carreras limpias de 2.19 y 18 ponches en 12 1/3 episodios en sus 10 presentaciones como relevista.
Esto dejaría por el momento a Harvey para entradas sin mucha presión como relevo largo o abridor emergente, algo similar a como el club venía empleando a Seth Lugo y Paul Sewald. Es posible que Harvey necesite dos juegos para descifrar cómo calentar y establecer sus lanzamientos desde el comienzo, pero cuando se acostumbre, sería una buena señal para el equipo si puede realizar sus pitcheos con convicción en sus presentaciones como relevista.
¿Cuál sería el resultado final?
Ser parte del bullpen le daría a Harvey la oportunidad momentánea que necesita para volver por el camino correcto, aunque en su carrera profesional solamente tiene dos juegos como relevista. Harvey es capaz de adaptarse al nuevo rol y aprovechar la oportunidad.
Por ahora, los Mets tienen a Syndergaard y Jacob deGrom fijos para encabezar el grupo de abridores, seguidos por Matz, Wheeler y Jason Vargas, quien estaría programado para debutar contra los Padres el sábado tras una fractura en la mano derecha. Esos últimos tres puestos no están tallados en piedra y Harvey fácilmente podría reintegrarse a la rotación abridora si puede recuperar un poco de su confianza en el bullpen, especialmente si tiene éxito en presentaciones de más de una entrada.
Al final, es probable que el paso de Harvey al bullpen sea algo temporal. Es posible que regrese al grupo de abridores de los Mets -- además lanzando con efectividad -- y aunque ya no sea el as, como un brazo para la parte baja de la rotación.