CHICAGO – Fue una extraña -- y tal vez controversial, según el punto de vista de los Astros – la jugada que cambió el momento a favor de los White Sox, no sólo en el Juego 3 de la Serie Divisional de la Liga Americana, sino quizás en toda la serie.

Con corredores en primer y tercera sin outs en la cuarta entrada del domingo, el receptor cubano de los Medias Blancas, Yasmani Grandal, conectó un lento rodado por la primera base ante el derecho Zack Greinke. Luego fue golpeado en su hombro izquierdo por el tiro hacia el plato del también cubano e inicialista Yuli Gurriel. La bola se desvió y los White Sox anotaron una carrera.

Eso le otorgó al equipo de casa una ventaja de dos carreras. El dominicano Eloy Jiménez continuó con un sencillo productor, ayudando a un ataque de tres rayas de Chicago, en la eventual victoria 12-6 ante Houston.

Los Astros y el manager Dusty Baker dijeron que Grandal corrió por dentro de la línea a propósito para intentar interferir con el disparo. Sin embargo, el umpire Tom Hallion explicó después del partido que no hay una regla de 45 pies para establecer la línea del corredor, porque el tiro fue desde la inicial al plato y no al revés.

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“Decidimos que no había interferencia en la jugada porque la bola fue directo al infield”, señaló Hallion. “Esa línea de 45 no se aplica. Queda en el bateador establecer su línea para correr. Cuando salió del plato y comenzó a correr, no se desvió ni sacó el hombro. No hizo nada de forma intencional para chocar con la bola”.

Sin embargo, el manager de Houston, Dusty Baker, no quedó satisfecho con la explicación. “Es interferencia, lo sabes. Fue una jugada importante porque no pudimos sacar el out y anotaron una carrera. Le dije que [Grandal] sabía lo que estaba haciendo, especialmente él, que es un receptor”.

El cubano negó haber hecho nada adrede, diciendo que simplemente estaba intentando correr a la primera base, sin saber si lanzarían al plato.

“Me encantaría decirte que fue a propósito”, confesó Grandal. “Vi la repetición. Ni siquiera sabía que estaba corriendo tan adentro. Quería llegar a la inicial. Me toma mucho tiempo hacerlo, por eso al batear, bajé mi cabeza y comencé mi recorrido. Cuando vi el tiro intenté quitarme, pero me golpeó. Conozco la regla, pero que encantaría decir que fue una jugada inteligente de mi parte, pero simplemente pasó”.

El careta puertorriqueño de los Astros, Martín Maldonado, vio inusual el hecho de que Grandal comenzará a correr tan adentro de la línea.

“La regla es diferente cuando lanzas a primera en vez de al home, pero creo que es claro que estaba sobre el césped”, dijo. “Cambió todo el juego”.

El manager de Chicago, Tony LaRussa, por el contrario, piensa que la decisión fue la correcta, porque Grandal nunca hizo nada a propósito.

“La manera en la que salió del plato y corrió directo, te dice que los umpires hicieron lo correcto”, comentó LaRussa. “Cuando el chico lanza en esa dirección, puedes crear tu propia línea. Es igual con la antesala. No hay manera en que haya hecho nada adrede”