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Bien armados para la recta final

Los Bravos se ven bien fuertes en la Liga Nacional

Si fueras a formar el equipo ideal de Grandes Ligas, querrías talento y liderazgo, además de una mezcla de experiencia veterana y juventud entusiasmada. Buscarías algo de velocidad para el tope del lineup y bates poderosos para la parte gruesa.

Y claro, sería ideal contar con todo el pitcheo posible, además de algunas historias notables para poder decir al final, "¿Cómo pasó ESO?"

Damas y caballeros, les presento los Bravos del 2012.

En este momento podrían ser el equipo más interesante de Grandes Ligas, al menos de los que no juegan en Oakland. Atlanta se ha convertido en un conjunto muy, muy bueno. No ha sido un camino sin obstáculos, y eso debe de hacer aun más interesantes estas últimas semanas de la temporada.

El gerente general de los Bravos, Frank Wren, ha vuelto a hacer un trabajo magnífico a la hora de darle los ajustes al roster.

Por el momento, vamos a enfocarnos en los Bravos de ahora, porque lo ocurrido en los últimos dos años deja sin importancia el "panorama general".

Atlanta cuenta con una alineación profunda que tiene par de estrellas rindiendo a un alto nivel. También están los muchachos que ponen su granito de arena. Y en los Bravos hay un tema que parece ser demasiado bueno como para ser de verdad.

Justo antes de la fecha límite para hacer cambios sin que los jugadores pasen por waivers, Wren llenó dos huecos importantes al agregar al zurdo Paul Maholm y al jardinero Reed Johnson.

Aun antes de dicho cambio, los Bravos venían jugando un buen béisbol. De hecho, han ganado 18 de sus últimos 24 partidos para colocarse a apenas 2.5 juegos de los Nacionales en el Este de la Liga Nacional. (Atlanta y Washington jugarán seis veces más en el 2012.)

Hemos destacado todo esto sin mencionar lo que podría ser el punto más llamativo de la temporada de Atlanta: La despedida de Chipper Jones, quien se retirará luego de esta campaña. Y el veterano está diciendo su último adiós con éxito, bateando .316 y con la oportunidad de llegar a los 20 jonrones por primera vez desde el 2008.

Mientras más importantes los juegos, mejor ha jugado Jones. El tercera base bateó .364 en julio y ha seguido sellando su legado como futuro Salón de la Fama.

Jones ha tenido mucha ayuda en esta edición de los Bravos. Michael Bourn tiene porcentaje de embasarse de .347, el mejor entre los primeros bates de la Liga Nacional con al menos 300 turnos. Jason Heyward y Brian McCann llevan un ritmo para alcanzar los 30 cuadrangulares.

Y sí, sé lo que están pensando todos. Todo se reduce al pitcheo. Los Bravos han vuelto a contar con uno de los mejores relevos de Grandes Ligas, y el manager cubano Fredi González ha sabido mover bien las piezas. Gracias a Craig Kimbrel, Jonny Venters y los otros, Atlanta sólo ha malogrado nueve oportunidades de salvamento, la segunda menor cantidad en al Liga Nacional.

Sin embargo, nadie avanza en el béisbol sin una fuerte rotación abridora. En ese sentido, los Bravos han estado a la altura durante la mayor parte de la temporada.

Tommy Hanson y Tim Hudson llevan 22-9 entre ellos, pero el enfoque de Wren ha sido llenar los otros tres puestos. Brandon Beachy iba muy bien antes de lesionarse el codo derecho en la primera mitad de la campaña. La ausencia de éste se vio más grande cuando Jair Jurrjens (3-4, EFE de 6.89) no se vio como el de antes.

Y luego llegó Ben Sheets.

Si los Bravos llegan a ganar un título, recordarán que las cosas tomaron un giro bien positivo cuando firmaron a Sheets a un pacto de liga menor.

Sheets-cuatro veces convocado al Juego de Estrellas como integrante de los Cerveceros-no ganaba un partido en dos años. Pero trabajó mucho para rehabilitarse el hombro derecho y le ha caído del cielo a Atlanta.

El diestro ha realizado cuatro aperturas de calidad en igual número de salidas, con marca de 3-1.

Wren hizo otra cosa inteligente, que fue tenerle paciencia al zurdo Mike Minor, de 24 años. En cuatro aperturas de julio, Minor tuvo efectividad de 2.98, antes de ser limitado a 3.2 innings en blanco el jueves debido a una demora por lluvia.

Y el lunes, después de no poder adquirir a Ryan Dempster de los Cachorros, Wren hizo un canje por Maholm.

El zurdo veterano ha tenido una de las temporadas más desapercibidas del 2012, con 5-0 y efectividad de 1.00 en sus últimas seis aperturas. Maholm debe de poner un buen ejemplo como su aplomo y su sólida ética de trabajo.

Falta tanto béisbol por jugarse que sería imprudente declarar un favorito claro en estos momentos. En el caso de Atlanta, es más así si se toma en cuenta lo bien que ha jugado Washington.

Pero los Bravos se ven casi sin debilidades. Además, la pesadilla del colapso del año pasado debe de ser una buena lección para no repetir lo mismo en el 2012. Cuidado con Atlanta.