Por un pase a la tierra prometida
Max Scherzer listo para enviar a Detroit a la Serie Mundial
El derecho siempre ha tenido mucho en el brazo, con una recta que ha alcanzado hasta 99 millas por hora. Pero fue en su cuarta campaña con Detroit que Scherzer empezó a cumplir con las expectativas.
Con récord de 16-7, efectividad de 3.74 y 231 ponches en 32 aperturas, el diestro se convirtió en un sólido número 2 detrás del as Justin Verlander en los Tigres.
Ahora, Scherzer tiene la oportunidad de ayudar a los felinos a lograr su pase a la Serie Mundial en su apertura del Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana el jueves contra los Yankees, luego de una suspensión del partido del miércoles.
Detroit aventaja en la serie a Nueva York 3-0.
"Estoy bien contento de estar aquí y de jugar por este equipo y esta organización", dijo Scherzer, de 28 años. "Es buenísimo ser parte de algo tan especial y espero que siga."
A pesar de su gran temporada, hubo interrogantes acerca de Scherzer en septiembre, cuando se vio frenado por dolores en el hombro de lanzar. El oriundo de San Luis se perdió una apertura en la última semana de la campaña, pasándose 10 días entre su penúltima y última salidas.
El 3 de octubre volvió para pitchar cuatro innings contra los Reales, en preparación para su apertura del Juego 4 de la Serie Divisional de Detroit contra Oakland.
En dicho partido, Scherzer pareció volver a la forma que exhibió durante la mayor parte del 2012. Lanzó 5.1 entradas en las que sólo permitió tres y una carrera, además de ponchar a ocho bateadores.
Ahora contra los Yankees, pretende llegar un poco más lejos en el juego.
"Me siento bien", dijo. "Sabes, para mí esto es como los entrenamientos en el sentido de que estoy volviendo a aumentar el cargo de trabajo. Creo que seré mejor esta vez que la última."
De por vida Scherzer lleva récord de 3-1 con efectividad de 3.42 en cuatro aperturas contra los Yankees. Pero su única derrota fue en precisamente su única salida vs. Nueva York este año.
El 29 de abril, permitió siete hits y tres carreras en 4.2 entradas, en las que dio siete bases por bolas al hacer una enorme cantidad de lanzamientos (119).
"Esa fue una de mis peores aperturas del año, tomando en cuenta que me enorgullezco de limitar los boletos", dijo Scherzer. "Entonces, desde esa salida empecé a recobrar el comando en la recta. Pero para mí, esa salida no va a incidir en cómo (los Yankees) me van a atacar."
Efectivamente Scherzer, quien lleva 1-1 con promedio de carreras limpias de 4.29 en cinco partidos (cuatro aperturas) con los Tigres desde el 2011, sabe que todo cambia a la hora de afrontar el reto de la postemporada.
"Lo único que puedo hacer es salir a tirar mi juego normal", dijo. "Habrá que atacar con mi idea habitual de cómo atacarlos, y luego hacer los ajustes de lugar."